Entidades locales confían en Telefónica, Indra y TRC para brinar servicios de ciberseguridad por un contrato multimillonario

En un movimiento estratégico para fortalecer la seguridad digital de las entidades locales españolas, el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública ha dado un paso significativo al adjudicar un contrato público valorado en 59,1 millones de euros. Este ambicioso proyecto tiene como objetivo la implantación de un centro de operaciones de ciberseguridad único y centralizado, diseñado específicamente para atender las necesidades de los municipios con menos de 50.000 habitantes, así como de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

La adjudicación de este contrato a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Telefónica, Indra y TRC Informática marca un hito importante en la protección digital de las administraciones locales. Este proyecto, que cuenta con financiación de la Unión Europea, busca no solo proporcionar servicios de ciberseguridad de alta calidad, sino también establecer un sistema integral que pueda responder eficazmente a las amenazas cibernéticas en un panorama digital cada vez más complejo y desafiante.

Alcance y objetivos del centro de operaciones de ciberseguridad

El centro de operaciones de ciberseguridad se perfila como una iniciativa ambiciosa y de gran alcance. Su objetivo principal es proporcionar servicios de ciberseguridad a un estimado de 7.983 municipios españoles con menos de 50.000 habitantes, además de incluir a Ceuta y Melilla debido a su situación estratégica particular. Este enfoque centralizado permitirá una gestión más eficiente y coordinada de los recursos de ciberseguridad.

Los servicios que ofrecerá este centro son exhaustivos y abarcan múltiples aspectos de la seguridad digital. Incluyen la provisión de medios materiales y humanos necesarios para la ingeniería, implantación, operación, monitorización y soporte las 24 horas del día. Además, se contempla la implementación de sistemas de ticketing, difusión y comunicación, así como la gobernanza global de herramientas y servicios de ciberseguridad.

Un aspecto crucial de este proyecto es su integración con el sistema de emergencias del Centro Criptológico Nacional (CCN-CERT) y su incorporación a la red nacional de centros de operaciones de ciberseguridad. Esta conexión permitirá una respuesta coordinada y eficaz ante posibles amenazas cibernéticas a nivel nacional, fortaleciendo así la postura de seguridad de España en su conjunto.

Fases de implementación y despliegue del proyecto

La implementación de este ambicioso proyecto se llevará a cabo en tres fases claramente definidas, cada una con objetivos específicos y pagos asociados. La primera fase se centra en la implantación de un centro de operaciones con capacidad para atender al 50% de la población de los municipios objetivo, incluyendo Ceuta y Melilla. Esta etapa inicial sentará las bases para la expansión posterior del servicio.

La segunda fase busca ampliar la cobertura del centro de operaciones para alcanzar al 100% de la población de los municipios con menos de 50.000 habitantes, además de Ceuta y Melilla. Este hito crucial marcará la plena operatividad del centro, permitiendo una protección integral de todas las entidades locales dentro del alcance del proyecto.

La tercera y última fase se enfoca en la operación continua del centro «como un todo» durante toda la duración del contrato. Esta etapa es fundamental para garantizar la sostenibilidad y eficacia a largo plazo del proyecto. Incluye tanto la gestión centralizada del centro como la operación en las entidades locales adheridas, asegurando una cobertura completa y constante.

Impacto y consideraciones futuras del proyecto

La adjudicación de este contrato a la UTE formada por Telefónica, Indra y TRC Informática no solo representa una inversión significativa en la ciberseguridad de las entidades locales, sino que también marca un precedente importante en la colaboración público-privada en el ámbito de la seguridad digital. La participación de empresas con participación estatal como Telefónica e Indra subraya el compromiso gubernamental con este proyecto estratégico.

El despliegue de soluciones de ciberseguridad en cada provincia es un aspecto crucial del proyecto. Este enfoque descentralizado pero coordinado permitirá adaptar las soluciones a las necesidades específicas de cada región, garantizando al mismo tiempo una visión de conjunto y una integración efectiva con el centro de operaciones global. La realización de análisis previos de necesidades en cada provincia, en coordinación con las diputaciones, asegurará que las soluciones implementadas sean las más adecuadas y efectivas para cada entidad local.

Mirando hacia el futuro, este proyecto tiene el potencial de transformar significativamente el panorama de la ciberseguridad en las entidades locales españolas. Al proporcionar recursos y expertise de alto nivel a municipios que de otra manera podrían carecer de los medios para implementar soluciones de ciberseguridad avanzadas, se está creando una red de protección más robusta y uniforme en todo el territorio nacional. Esto no solo mejorará la seguridad de los datos y sistemas de las administraciones locales, sino que también aumentará la confianza de los ciudadanos en los servicios digitales ofrecidos por sus ayuntamientos.