Telefónica ha negociado con los representantes de los trabajadores el establecimiento de una jubilación forzosa de los empleados. Este movimiento se enmarca en la negociación del nuevo convenio colectivo, por el cual la entidad prevé dar entrada a jóvenes menores de 35 años.
Según informaron fuentes sindicales a Europa Press, la oferta presentada por la compañía contempla que dicha jubilación forzosa afectará a los trabajadores de las firmas Telefónica de España, Telefónica Móviles España y Telefónica Soluciones, siempre que cumpla con los requisitos legales para acceder a la jubilación ordinaria.
La compañía pretende ligar esta medida al número de empleados jóvenes menores de 35 años que se incorporen dentro de un compromiso de creación de empleo. Dicho número estaría ligado al número de empleados que accedan a la jubilación por este mecanismo.
Esta es la principal novedad entre las propuestas presentadas este miércoles por la empresa en la reunión del convenio colectivo, entre las que también destaca una revisión salarial al alza en el período de vigencia del documento (1 de enero de 2019 a 31 de diciembre de 2021).
Así, la compañía ofrece una subida salarial total del 4,5% entre 2019 y 2021, con un incremento anual del 1,5% en cada uno de los tres ejercicios sobre la masa salarial teórica y que tendría carácter consolidable.
Además, Telefónica incorpora en el nuevo convenio garantía de empleo y de no movilidad geográfica, así como la promoción de la deslocalización de actividades y la recuperación de actividades de mayor valor, con el fin de asegurar la empleabilidad en las provincias en los casos que sea posible.
Por otro lado, también se incluye, junto con la igualdad de oportunidades y la diversidad como principios rectores de la gestión de los recursos humanos, el respeto y la promoción de la igualdad efectiva de las personas trabajadoras del colectivo LGTBI.
PLAN DE BAJAS VOLUNTARIAS
La reunión de la mesa se produce después de que la compañía anunciara este martes su intención de poner en marcha un nuevo plan que, ente otras medidas, contempla bajas voluntarias para mayores de 53 años y que tendrá un coste previsto de 1.600 millones de euros, aunque registrará ahorros anuales de 220 millones desde 2021.
La intención de la entidad es dotar de nuevas habilidades a los trabajadores y continuar en los avances para la digitalización y robotización de procesos. Para ello, la corporación pondrá en marcha un programa de formación para mejorar las capacidades de los trabajadores y aprovechar las oportunidades que ofrecen los empleados actuales.
Esta iniciativa supondrá que más de 6.000 empleados participen en programas de ‘reskilling’, centrándose en áreas como seguridad, robotización, analytics, desarrollo web, consultoría de negocio, capacidades en TI o metodología Agile.
También se mejorarán las habilidades de trabajadores, para lo que el presupuesto de formación se duplicará y las horas dedicadas a ello por empleado aumentarán un 40% a lo largo del período de implementación del plan.