El laudo arbitral sobre la resolución del pacto de accionistas de Itínere da la razón a Globalvía, Abanca y Kutxabank, al declarar dicho pacto resuelto desde el 5 de febrero de 2018, según ha informado la compañía de concesiones que dirige Juan Béjar. Asimismo, el tribunal condena a Gateway-Corsair y Liberbank a pagar las costas del proceso, que ascienden a casi 400.000 euros.
En opinión de Globalvía, la resolución del acuerdo de accionistas desde esa fecha tiene como consecuencia la invalidez de las operaciones hechas al amparo del acuerdo en 2019. Por su parte, fuentes próximas a Gateway aseguran que el laudo no afecta a la validez de las operaciones sobre acciones de Itínere realizadas en febrero de 2019. «Cualquier sugerencia en contrario es falsa», subrayan.
Por lo tanto, el laudo no afecta a la actual composición accionarial de Itínere ni, por consiguiente, a la estructura de control de la compañía, de acuerdo con estas fuentes.
Globalvía elevó a finales de julio al 40,4% su participación en Itínere después de que en febrero Corsair alcanzara el 60% del capital
Una vez decidido el fondo del asunto y siendo innecesarias, el tribunal ha levantado las medidas cautelares dictadas en la orden procesal en las que ordenaba a Sacyr no vender y a Itinere Investco -fondo controlado por Corsair- no comprar la participación del 15,5% en manos del grupo presidido por Manuel Manrique.
En concreto, el laudo declara válida y efectiva la denuncia de los demandantes, pero rechaza la petición de Abanca y Kutxabank sobre compensaciones económicas adicionales por los daños causados durante la vigencia del acuerdo de accionistas.
A su vez, no declara responsabilidades de Liberbank en el incumplimiento del contrato de accionistas y ordena al grupo Gateway a abonar costas a Abanca, Kutxabank y Globalvia.
El tribunal ordena también a Liberbank a abonar costas a los demandantes, además de dictaminar que el grupo Gateway, Liberbank, Sacyr, Abanca, Kutxabank y Globalvia deben afrontar el pago de costas a Caser por importe de 34.000 euros. Por último, decide que las demás costas sean asumidas por cada parte y rechaza todas las demás pretensiones de las partes.
Globalvía elevó a finales de julio al 40,4% su participación en Itínere después de que en febrero Corsair materializara la pretendida compra del 15,5% que Sacyr tenía en el grupo de concesiones y alcanzara así el 60% de su capital.
Los dos accionistas de Itínere están enfrentados, desde que en julio de 2018, Globalvía alcanzara un acuerdo para hacerse con la participación del 55% de la empresa comprando las participaciones que entonces tenían Sacyr, Abanca y KutxaBank y, posteriormente, Corsair, como primer accionista de la compañía de autopistas con un 38% del capital, ejerciera su derecho a igualar la oferta, si bien sólo igualó la correspondiente a Sacyr y no las del resto de socios.
El conflicto desembocó en los tribunales. Mientras, Globalvía se hizo con un 40,1% de Itínere al cerrar en octubre la acordada compra de las participaciones de Abanca y Kutxabank, un 23,8% y un 16,3% respectivamente.
De su lado, Corsair compró en febrero de este año la participación de Sacyr y alcanzó el 60% del capital. La operación fue posible, a pesar de estar pendiente de resolución judicial, porque la materializó otro de los fondos que gestiona Corsair y no Gateway, el afectado por el contencioso.
Itínere, que recientemente nombró presidente no ejecutivo a Juan María Nin, es el segundo operador de autopistas del país. La firma explota vías de pago en el Noroeste del país que suman unos 500 kilómetros de longitud, después de que el pasado año concluyera el contrato de concesión de la AP-1, que se convirtió en la primera en volver al Estado.