La conducción autónoma es una tecnología emergente que está revolucionando la forma en que nos desplazamos. En los próximos años, veremos una rápida adopción de estos sistemas en los vehículos, lo que requerirá una regulación clara y exhaustiva por parte de las autoridades competentes. En este sentido, la Dirección General de Tráfico (DGT) está trabajando en la elaboración de un nuevo reglamento que busca establecer un marco normativo adecuado para la circulación de vehículos con sistemas de automatización.
El objetivo de este nuevo reglamento es garantizar la seguridad vial y el correcto funcionamiento de estos sistemas tecnológicos integrados en los vehículos. La DGT ha anunciado que su intención es aprobar este nuevo reglamento entre el último trimestre de 2023 y el primero de 2025, una vez que se hayan recogido y analizado las observaciones públicas pertinentes.
Modificaciones en el Reglamento General de Circulación
Una de las principales novedades de este nuevo reglamento será la incorporación de dos nuevos artículos en el Reglamento General de Circulación. Estos artículos establecerán las obligaciones que deberán asumir los ocupantes de un vehículo con sistemas de automatización de la conducción.
Asimismo, se prevé introducir una nueva disposición relativa al comportamiento del coche en el tráfico. Además, se añadirá un nuevo anexo que tendrá como objetivo establecer las normas y condiciones de circulación de los vehículos con estos sistemas de automatización.
Cambios en el Reglamento General de Vehículos
En cuanto al Reglamento General de Vehículos, también se introducirán modificaciones importantes. Se añadirá el artículo 14 bis, en el que se establecerá que los vehículos con sistemas de conducción automatizada no podrán circular sin contar con el correspondiente permiso de circulación expedido por la Jefatura Central de Tráfico.
Este permiso de circulación tendrá como finalidad asegurar la aptitud del vehículo para circular de manera segura en las vías públicas. Además, se redactará un nuevo Anexo XX que regulará el procedimiento de certificación destinado a verificar que un vehículo dotado de un sistema de conducción automatizado cumple con las normas de circulación.
En este nuevo anexo, se definirán las capacidades de automatización y los entornos en los que podrán circular estos vehículos. De esta manera, la DGT busca establecer un marco regulatorio sólido que permita la integración de la conducción autónoma de manera gradual y segura en nuestras carreteras.
Hacia una Movilidad más Segura y Eficiente
La aprobación de este nuevo reglamento representa un paso crucial en el desarrollo de la conducción autónoma en España. Al establecer requisitos y condiciones claras para la circulación de estos vehículos, la DGT busca fomentar la adopción de esta tecnología de una manera responsable y segura.
Además, la regulación de la conducción autónoma tendrá un impacto positivo en la movilidad de nuestro país, ya que mejorará la eficiencia en el transporte y reducirá los accidentes causados por errores humanos. Todo ello contribuirá a una experiencia de conducción más segura y confortable para todos los usuarios de la red viaria.
En resumen, la DGT está trabajando arduamente en la elaboración de un nuevo marco normativo que permita la integración gradual de la conducción autónoma en España. Este esfuerzo regulatorio sentará las bases para una movilidad más segura, eficiente y sostenible en los próximos años.
