La victoria del Frente de Todos, con Alberto Fernández como cabeza visible, en las elecciones primarias de Argentina el pasado domingo ha sacudido la economía del país sudamericano. Un día después, el Merval cerró la sesión con una caída del 38% y el peso perdió el 25% de su valor frente al dólar americano. BBVA y Santander observan con preocupación las posibles consecuencias en sus filiales.
La relación de Santander con Argentina viene de largo. Emilio Botín abrió la primera oficina de representación de Banco Santander en América, en La Habana (Cuba), en 1947. A esta le siguieron otras en Argentina, México y Venezuela. En la década de los 60, la entidad cántabra compró el Banco del Hogar Argentino y creó el Departamento Iberoamericano.
Por su parte, BBVA (por aquel entonces Banco Bilbao Vizcaya) compró el 30% del Banco Francés en Argentina en diciembre de 1996. Un año después, anunciaba su fusión con el Banco de Crédito Argentino. De esa forma, se constituía el primer grupo bancario del país con un activo total que rondaba los 8.000 millones de dólares.
La respuesta de Emilio Botín no tardó en llegar. A penas dos semanas después de movimiento realizado por BBVA, Santander anunció su entrada en el capital del Banco Río de la Plata. En la operación, la entidad cántabra desembolsó 594 millones de dólares y cedía un 6% de Santander de Chile. Posteriormente, los bancos Río de la Plata y Santander Argentina se fusionaron para adelantar a BBVA francés como primer banco privado del país latinoamericano.
LOS NÚMEROS DE SANTANDER EN ARGENTINA
En la actualidad, Argentina apenas representó el 1% del beneficio ordinario atribuido de Santander en el primer semestre de 2019. En concreto, 73 millones de euros. Esta cifra incluía el impacto negativo por “el ajuste por la alta inflación de 74 millones de euros”. Sin embargo, su presencia en el país latinoamericano sigue muy vigente. La entidad presidida por Ana Botín contaba con activos por valor de 12.903 millones de euros, 9.183 empleados y 469 oficinas a 31 de junio de 2019. No hay olvidar que América es el motor del crecimiento del banco.
El banco cántabro destacó en su informe financiero del primer semestre el aumento de los ingresos un 67% hasta 720 millones de euros en ese periodo con respecto al mismo de 2018. Asimismo, los costes crecieron un 89% (-431 millones de euros) y las dotaciones un 114% hasta 143 millones de euros. Pese a la delicada situación económica del país, la ratio de mora se situó en el 3,79% (menos que en España, por ejemplo).
Las filiales argentinas de BBVA y Santander suman una plantilla superior a 15.000 profesionales y una red de 722 sucursales
La estrategia comercial de Santander en Argentina durante los primeros seis meses del año se centró en “el negocio transaccional y en mejorar el servicio a los clientes”. Además, siguió el impulso de la transformación digital de los principales productos y procesos.
Santander es el mayor banco privado del sistema financiero argentino por volumen de negocio bancario. En el segundo trimestre de este año comunicó el cambio de su marca comercial de Santander Río a Santander.
LOS NÚMEROS DE BBVA EN ARGENTINA
A diferencia de Santander, BBVA no hace un desglose tan exhaustivo por mercado en la presentación de resultados. Engloba Argentina en América del Sur y no ofrece datos tan detallados del negocio como la entidad cántabra. América del Sur generó un resultado atribuido acumulado de 404 millones de euros en el primer semestre del 2019, lo que representa un crecimiento interanual del 35,7% (21,9% a tipos de cambio corrientes).
Como en el trimestre anterior, apuntó la entidad presidida por Carlos Torres, esta evolución está afectada por el impacto negativo derivado de la hiperinflación en Argentina en el resultado atribuido del área (-94 millones de euros). La filial reportó un beneficio atribuido de 110 millones de euros en el primer semestre del año sin el ajuste mencionado. Impulsado, según el banco, “por una mayor contribución de la cartera de valores y la venta de la participación en Prisma (1T19)”.
La filial argentina de BBVA cerró el primer semestre con activos ponderados por riesgo por valor de 6.435 millones de euros (la mitad comparados con Santander). La actividad crediticia creció un 3,8% debido a “las carteras minoristas de hipotecas y tarjetas”. Por su parte, la tasa de mora, que se situó en el 2,8% al 30 de junio del 2019, aunque siguen comparando favorablemente con el sistema.
Pese a su menguante valor en libros, las filiales argentinas de BBVA y Santander suman una plantilla de más de 15.000 profesionales. Su red de oficinas supera las 720 sucursales. Sus activos casi alcanzan los 20.000 millones de euros. Ambos son los bancos más importantes del país. Lo que ocurra en Argentina preocupa (y mucho).