Nestlé es una de las firmas más reconocidas. En 2020, la compañía alimenticia suiza estaba en la lista de empresas más contaminantes. Además de ello, la entidad suiza viene exponiendo sus objetivos para mejorar el medio ambiente, como una manera de combatir el cartel de empresa contaminante, pero según Changing Markets Foundation, en 2020, Nestlé fue el tercer mayor contaminante del plástico del planeta. Nestlé aumentó los precios de sus productos un 7,5% el año pasado y su estrategia ‘verde’ puede hacer que los suba de nuevo.
En el marco de estas acusaciones sobre contaminación, desde 2020 están llevando a cabo un plan de sostenibilidad para que en 2025 ningún envase de sus productos sea de plástico contaminante. La empresa «realiza su actividad empresarial optimizando los recursos naturales y minimizando su impacto», detallan en el apartado de ‘Sostenibilidad medioambiental’ de su web.
EL PLAN DE SOSTENIBILIDAD DE NESTLÉ
La compañía alimentaria realiza su actividad empresarial optimizando los recursos naturales y minimizando su impacto. No obstante, para ello dispone de un sistema propio y eficaz de gestión: ‘Nestlé Environmental Management System (NEMS)’. Con el fin de afrontar los retos medioambientales, la empresa suiza lleva a cabo una doble estrategia.
En primer lugar, su estrategia se basa en impulsar la innovación en productos, no solamente saludables y nutricionalmente equilibrados, también elaborados de forma respetuosa con el medio ambiente, optimizando el uso de recursos naturales. Y, la segunda estrategia, se basa en minimizar el consumo de estos recursos naturales en las operaciones.
REDUCIR EL PLÁSTICO NO REUTILIZABLE TENDRÁ CONSECUENCIAS COMO UN AUMENTO DE PRECIOS QUE PAGARÁN LOS CONSUMIDORES
«En 2025, reduciremos el uso de plástico virgen en 1/3 respecto a 2018, y más del 95% de nuestros envases de plástico estarán diseñados para ser reciclados, con el compromiso de alcanzar el 100% en el futuro. En enero de 2019, presentamos nuestra visión más amplia para un futuro sin residuos y anunciamos una serie de acciones específicas para cumplir con nuestro compromiso», añaden fuentes internas de la compañía.
Actualmente, las empresas como Nestlé están promoviendo una generación de plantas de reciclaje, llamadas reciclaje ‘avanzado’ o ‘químico’, que prometen reciclar muchos más productos de los que se pueden reciclar hoy. La nueva tecnología está siendo aclamada por la industria del plástico como una solución a un creciente problema mundial de residuos.
El enfoque tradicional del reciclaje es simplemente triturar y derretir los residuos plásticos. Los nuevos operadores de reciclaje avanzado dicen que pueden descomponer el plástico mucho más, en componentes moleculares más básicos, y transformarlo en plástico nuevo. Contar con estos nuevos avances es una mayor inversión económica que deberá de desembolsar Nestlé,y, esto hace que sea probable que aumente los precios de sus productos para, de este modo, seguir apostando por envases 100% sostenibles.
EL OBJETIVO DE NESTLÉ: MEJORAR EL PACKAGING SIENDO MÁS SOSTENIBLES
La compañía ha invertido un total de 1.800 millones de euros para conseguir liderar el cambio de plásticos vírgenes a plásticos ya reciclados aptos para el uso alimentario y acelerando el desarrollo de soluciones innovadoras en envasados sostenibles. La mayoría de los plásticos que se reciclan son difícilmente aptos a posteriori para ser utilizados en el ámbito de alimentación, llevando a un suministro de plásticos aptos para el uso alimentario realmente limitado.
«ESTAMOS DANDO GRANDES PASOS PARA CREAR UN MERCADO MÁS AMPLIO DE PLÁSTICOS RECICLADOS APTOS PARA LA ALIMENTACIÓN E IMPULSAR LA INNOVACIÓN EN LA INDUSTRIA DEL EMBALAJE»
Mark Schneider, CEO de Nestlé
Si centramos en la ‘lista negativa’ de los materiales que Nestlé debe eliminar para este 2024, nos encontramos con tres puntos importantes. El primer punto, el revestimiento para el metal con los cierres de presión y capa de sellado de las cápsulas de café de Nestlé, es decir, con Nescafé. El segundo punto, es el papel y el plástico, intentando reducir el papel laminado con contenido de papel en un 50% menos; y ya por último los colores para las botellas de los alimentos de las mascotas, donde la cadena quiere evitar cualquier color que no sea transparente, verde transparente o azul transparente no puede ser usado, evitando los colores oscuros y opacos.
La compañía quiere abordar claramente que algunos materiales del pasado ya no son aceptables, y deben eliminarlos de su cadena de suministro como parte de su viaje de transformación de envases sostenibles. Nestlé quiere utilizar menos material de embalaje, incluido menos plástico virgen. Algunos ejemplos de acciones que están haciendo es la eliminación de tapas de plástico, accesorios, capas y películas innecesarias.
En este contexto, Nestlé sigue comprometida en diseñar el 100% de sus envases de plástico para el reciclaje. Para 2025, esperan que más del 25% lo sea, y hasta la fecha el 86,8% del total de sus envases ya es reciclable o reutilizable. «Como la compañía de alimentos y bebidas más grande del mundo, nuestras acciones importan y estamos comprometidos a poner todo de nuestra parte para hacerlo realidad», certifican desde la empresa suiza.
El gigante suizo de la alimentación obtuvo un beneficio neto atribuido de 11.775 millones de euros en 2023, lo que supone un 20,9% más en comparación con el resultado contabilizado en el ejercicio anterior. Las ventas de Nestlé sumaron un total de 97,691 millones de euros y Nestlé aumentó los precios de sus productos un 7,5%.