Honda ha registrado un beneficio neto atribuido de 172.300 millones de yenes (1.435 millones de euros) en el primer trimestre de su ejercicio fiscal (de abril a junio de 2019). Pese a las elevadas cifras, el resultado del fabricante nipón ha sido un jarro de agua fría porque supone una disminución del 29% respecto a las ganancias del mismo periodo del pasado año, según ha informado la empresa. La entidad ha tenido que revisar a la baja sus previsiones para todo el año.
El recorte en las ganancias trimestrales se explica por el aumento de los gastos, así como por el peor ‘mix’ de producto en las entregas de automóviles en Estados Unidos, por un menor volumen comercial de motocicletas y automóviles y por el efecto negativo del cambio de divisa, entre otros factores.
Entre abril y junio de este ejercicio, la empresa asiática se anotó unos ingresos por importe de 3,99 billones de yenes (33.301 millones de euros), lo que supone una disminución del 0,6% respecto a la facturación de dicho trimestre del año fiscal previo.
La compañía registró un beneficio operativo de 252.400 millones de yenes (2.103 millones de euros) en el primer cuarto del ejercicio fiscal 2019-2020, un 15,6% de reducción en la comparación con dichos meses de 2018.
LAS PREVISIONES DEL AÑO, A LA BAJA
En cuanto a las ventas, Honda obtuvo unas entregas consolidadas de automóviles de 905.000 unidades al cierre del trimestre fiscal, un 4,9% menos, mientras que las matriculaciones de motos se situaron en 3,26 millones de unidades, un 9,7% menos. Además, la firma comercializó 1,28 millones de motores, un 4,5% menos.
Ante los resultados trimestrales, la firma nipona ha decidido revisar a la baja sus previsiones para el año completo, publicadas en mayo. Así, anticipa ahora un beneficio neto atribuido anual de 645.000 millones de yenes (5.375 millones de euros), un 3% menos frente a la estimación anterior de 665.000 millones de yenes (5.541 millones de euros).
Además, ahora la empresa prevé registrar unos ingresos anuales de 15,65 billones de yenes (130.416 millones de euros), un 0,3% menos que la cifra inicialmente contemplada, mientras que el beneficio operativo se mantendrá en 770.000 millones de yenes (6.416 millones de euros).