Un escenario geopolítico extremadamente volátil en el que actualmente nos encontramos, (conflicto Rusia-Ucrania, fricciones entre China y Taiwán o las tensiones en Oriente Medio), ha hecho que el gasto militar de los países occidentales se haya incrementado de forma notable y que la mayoría de ellos hayan iniciado diferentes programas al respecto. Hay buenas perspectivas para invertir en empresas o absolutamente ligadas al sector defensa, aunque sí con presencia en él. Airbus subió un 37% y puede continuar al alza. Airbus se pone en pista.
Esta apuesta abre la vía a que sigan las ganancias en las empresas armamentísticas y en las derivadas vinculadas a defensa y por ello el mercado apuesta por invertir en este tipo de compañías, unas empresas sobre las que que los analistas que siguen dichos valores seguirán revisando al alza sus previsiones sobre el precio de las acciones. Airbus es la más jugosa. Hay opciones también con Leonardo, Thales y Safran, aunque en las recomendaciones de los analistas no pasan por su mejor momento.
INVERTIR EN DEFENSA
Las perspectivas son buenas como negocio y para estas empresas en bolsa. “Si las cifras de inversión en defensa aumentan de acuerdo a lo previsto, vamos a poder seguir viendo aumentos en la facturación y en los resultados de las empresas europeas del sector, por lo que entendemos que sí que se trata de un sector en el que permanecer invertidos, ya que aunque muchas de las empresas citadas, desde un punto de vista fundamental estén en sus precios teóricos o muy cerca de ellos, también es verdad que los analistas que siguen dichos valores seguirán revisando al alza sus previsiones sobre los mismos”, señala el analista de iBroker, Antonio Castelo.
Las perspectivas son buenas como negocio y para estas empresas en bolsa
Las acciones de las empresas europeas del sector han subido de forma notable en el último año. Así lo hicieron las de Leonardo, un 113%; Rheinmetall, un 92%; Kongsberg, un 76%; Safran, un 51%; Bae Systems, un 36% y Hensoldt, un 30%.
Mientras, en el caso de empresas no absolutamente ligadas al sector defensa, aunque sí con presencia en él. Airbus subió un 37%; Thales, un 16%; Dassault Aviación un 14%; Qinetiq, un 14% y MTU Aero Engines, un 3%. (Aunque en los últimos 6 meses se ha revalorizado un 44%).
Si las cifras de inversión en defensa aumentan de acuerdo a lo previsto, vamos a poder seguir viendo aumentos en la facturación y en los resultados de las empresas europeas del sector, por lo que entendemos que sí que se trata de un sector en el que permanecer invertidos, ya que aunque muchas de las empresas citadas, desde un punto de vista fundamental estén en sus precios teóricos o muy cerca de ellos, también es verdad que los analistas que siguen dichos valores seguirán revisando al alza sus previsiones sobre los mismos.
Si las cifras de inversión en defensa aumentan de acuerdo a lo previsto, vamos a poder seguir viendo aumentos en la facturación y en los resultados de las empresas europeas del sector
LEJOS DE LA META
Ahora bien, «ni de lejos se ha llegado al objetivo de inversión en Defensa del 2% del PIB de cada país miembro de la OTAN. Años atrás, siendo presidente de los Estados Unidos Donald Trump, se produjeron fricciones entre su Administración y entre los líderes europeos de los países pertenecientes a la OTAN, ya que los americanos reclamaban un compromiso por parte de los europeos para incrementar el gasto en Defensa de cada de uno de ellos al límite establecido del 2% del PIB de cada país», señala el analista de iBroker, Antonio Castelo.
Este puede ser un punto que los analistas den precios objetivos inferiores a las cotizaciones que tienen ahora empresas como Leonardo y Safrán, aunque eso puede cambiar.
Leonardo tiene un precio objetivo a un año inferior a en casi dos al actual. Así, cotiza a 23,21 euros y a 12 meses le dan 21,65 euros. Safran lo hace ahora 207,80 euros y le dan 199 euros a un año.
LO DE AHORA
Aunque el gasto general en defensa ha aumentado en los últimos años en Europa (como debería haberlo hecho, considerando la guerra de Rusia contra Ucrania), todavía no es suficiente. Según los propios datos de la OTAN, se espera que sólo 11 de los 31 miembros de la OTAN cumplan el objetivo de gasto en 2023. Alemania aún no lo ha alcanzado.
Aunque el gasto general en defensa ha aumentado en los últimos años en Europa (como debería haberlo hecho, considerando la guerra de Rusia contra Ucrania), todavía no es suficiente
El presidente francés, Emmanuel Macron, habla muy bien de la búsqueda de una “autonomía estratégica” europea, pero en realidad su país tampoco ha hecho nada para que eso se convierta en realidad.
Resolver estos problemas requiere mucho tiempo y es complicado. Europa no sólo necesita reconstruir sus ejércitos, sino que necesita reprogramar su mentalidad colectiva. Incluso cuando se acerca el segundo aniversario de la fallida marcha de Vladimir Putin sobre Kiev, la guerra y sus implicaciones para la seguridad europea siguen siendo demasiado abstractas para muchos europeos, especialmente aquellos de Europa occidental, pero parece que esta vez “algo más se va a mover”.
En este sentido, desde la Comisión Europea se ha trasladado que se quiere impulsar una mayor cooperación entre los Estados miembros para aumentar la inversión conjunta del bloque en Defensa y aunque de momento no hay acuerdo a la vista para fijar una hoja de ruta, el impulso de la defensa europea parece imparable y es una de las prioridades de la actual presidenta de la Comisión Europea.
Tras la invasión rusa de Ucrania, los Estados miembros de la UE han aumentado progresivamente sus gastos militares: de los 240 mil millones de euros de 2022 a 280 mil millones en 2023 y se prevé que alcanzarán hasta los 350 mil millones en 2024.
El primer paso será la llamada Estrategia Industrial Europea de Defensa, que se presentará en las próximas semanas, según anunció la jefa del Ejecutivo comunitario. Todo apunta a que si von der Leyen es reelegida al frente del Ejecutivo de la UE, se asignará a un comisario europeo. Esto puede hacer variar el rumbo y por eso mucha gente está expectante.