Hispasat trata desde el pasado mes de junio de llevar internet allí donde no lo quería o podía llevar nadie, a las zonas rurales y recónditas de la España rural, vaciada e incluso silvestre donde no llegaba. Lo consiguen paso a paso, y aunque queda mucho por andar, su solución Conéctate35, que ofrece internet vía satélite por 35 euros al mes, pese a quienes señalan que no ha conseguido una gran implantación, ha hecho felices ya a muchos ciudadanos de nuestra España más olvidada. Con el próximo apagado de la vieja red de cobre y de internet mediante ADSL, que comenzará el próximo 19 de abril, el trabajo de Hispasat va a ser más relevante que nunca.
Conéctate35 es un programa desarrollado por Hispasat para que a través del programa «Único Demanda Rural» la ciudadanía tuviese acceso a la conectividad ultrarrápida a un «precio razonable» mientras se despliega la fibra «a todos los rincones de España».
Para ello el Gobierno adjudicó a Hispasat ayudas por un importe de 76,3 millones de euros procedentes de los fondos europeos ‘Next Generation’, con el fin de que las zonas rurales más remotas y poco pobladas pudieran conseguir conectividad fija para cualquier actividad privada o empresarial, pero a un precio que no dejara a nadie atrás. Por esa razón, su coste mensual es de solo 35 euros, con una velocidad de bajada de 200 Mb, y el programa contempla ayudas de hasta 600 euros para la instalación si es necesaria.
Conéctate35 es un «proyecto de Estado» que quiere llevar internet a cualquier rincón del país, se ha tratado de informar e, incluso «seducir», en cada comunidad autónoma de España y en cada pueblo susceptible de beneficiarse del satélite
Allí donde no llega la fibra y va a tardar en llegar, donde el apagado de la red de cobre deje sin ADSL a sus ciudadanos y ciudadanas, o dónde la cobertura móvil tampoco permite tirar de datos para sacar adelante pequeños negocios y actividades, disfrutar de contenidos en streaming, manejar las finanzas online donde ya no hay ni bancos ni cajeros o, en general, seguirle el paso al mundo digitalizado en el que vivimos hoy, allí, si no ha llegado ya, va a llegar Hispasat.
MERCA2 se ha puesto en contacto con representantes de la tecnológica que se muestran tan ilusionados con este programa como con el que la empresa desarrolla para llevar internet a la luna; sí, a la luna. Para ellos es igual de importante que llegue también a una pedanía de, por ejemplo, Ciudad Rodrigo, en Salamanca, hasta un matrimonio de pastores en los montes de Navarra que pueden ver Netflix y hablar con sus hijos que están en el pueblo, o a los monjes de clausura del Monasterio de las Batuecas, que necesitan la conectividad por WhastApp para gestionar su pequeño negocio de hospedería.
Recientemente algunos medios señalaban que el programa es un fiasco, porque tras nueve meses de desarrollo no había llegado a cubrir los 1,3 millones de hogares y empresas a los que pretende llegar, pero lo cierto es que hasta que la población afectada no se quede sin cobre, no se van a dar cuenta de que necesitan este servicio. Indicaban que el slogan «Que allá donde haya cielo, pueda llegar internet», no lo conocía ni el periodista Manuel Campo Vidal, que dijo estar «sorprendido de que esto exista y no se sepa» en unas jornadas en las que ha participado recientemente, y que conocía a alcaldes que tampoco sabían nada del tema.
Desde Hispasat aclaran que han comunicado el programa a cada alcalde de las «zonas elegibles» donde no hay ninguna otra estructura para la conexión a internet, o que se van a quedar sin ADSL, «y por el cambio de color político tras las elecciones no se han leído la carta», o bien que los múltiples avisos de Telefónica desde hace meses (por carta, por mail, a través de la factura) se han obviado, y que solo han hecho caso cuando les ha llegado un burofax advirtiendo del cierre de la red de cable, y es ahí cuando por fin se han reaccionado.
La campaña de información del servicio se realizó por radio, prensa y Tv, lo ha publicitado desde la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones hasta el mismo Ministerio de Economía, pero en general el servicio está pensado para pueblos y zonas donde todavía falta bastante sensibilidad y formación digital, y hay mucha resistencia a la digitalización y cierta fragmentación entre público rural y urbano, y «es este último el que sí se preocupa más de que si se desplaza a la España más tranquila, no les falte conectividad.
HISPASAT Y SU COMUNICACIÓN CASI PUEBLO A PUEBLO
Según el ultimo informe de cobertura de banda ancha de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, en España 9 de cada 10 hogares y empresas d tienen acceso a redes de banda ancha fija, pero no en las zonas rurales, donde la media baja hasta 7 de cada diez, y cuando las poblaciones tienen menos de 500 habitantes, en el mitad de los casos no tienen ninguna cobertura en cuanto a internet se refiere. Ahí es donde está tratando de llegar Hispasat con su cobertura por satélite.
Desde que arrancara este «proyecto de Estado» que quiere llevar internet a cualquier rincón del país, se ha tratado de informar e, incluso «seducir», en cada comunidad autónoma de España y en cada pueblo susceptible de beneficiarse del satélite. Arrancaron con un acto de presentación en la localidad de Hita, un pueblo con encanto y sin fibra de Guadalajara, de la mano de la entonces Ministra de Economía, Nadia Calviño, y con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, «porque precisamente las dos Castillas -por Castilla y León y Castilla La Mancha-, son los dos territorios que más puntos sin conexión a internet registran», aclaran desde Hispasat.
Allí también estuvieron el director de la Feria Nacional para la Repoblación de la España Rural, Presura, Joaquín Alcalde Sánchez, por ejemplo, y se contaron casos de éxito como el de la cooperativa de pan Despelta, situada en una pedanía de Sigüenza, a quien el proyecto piloto de internet por satélite «le ha cambiado la vida«, nos aseguran, porque ha podido vender su pan y ampliar el negocio como nunca soñó.
en España 9 de cada 10 hogares y empresas d tienen acceso a redes de banda ancha fija, pero no en las zonas rurales, donde la media baja hasta 7 de cada diez, y cuando las poblaciones tienen menos de 500 habitantes
Después presentaron Conectaté35 en Cantabria, con la colaboración de la CEOE y de las empresas locales, donde hasta la recién elegida nueva presidenta de la comunidad cántabra «se sorprendía de que Hispasat llegara con la propuesta y no pidiera dinero por ella». Al poco presentaron en Asturias, con el presidente Adrián Barbón presente, donde al igual que en Galicia Hispasat ha llegado a acuerdos de colaboración con las operadoras locales para difundir, «porque son entidades que están más próximas al territorio y saben dónde están las necesidades de conexión».
Es el caso también de la Caja Rural de Asturias, cuyo interés está en que sus clientes puedan operar con banca electrónica, para amortiguar el problema de la escasez de oficinas. Han presentado dos veces en el complejo territorio de la provincia de Soria, en Salamanca, y tienen infinidad de actos previstos en Huesca, en Córdoba y en todas las comarcas y provincias en las que creen que pueden ser útiles. «Explicamos el programa con la colaboración de los medios locales, de las Cámaras de Comercio y siempre con los empresarios, es decir, con la CEOE, que para eso son organizaciones de interés público y tienen la adecuada implantación territorial», nos indican fuentes de la empresa de telecomunicaciones.
CONTRATAR CON CONÉCTATE35
Y es que Hispasat es un operador mayorista neutro que en ningún momento puede señalar con quién contrata el usuario final el servicio, por lo que se lo ofrece a todos. Ahora mismo ya tiene acuerdos con 26 operadores adheridos de toda España, que son los que tienen el contacto directo con el cliente final. Como mayorista, su llegada al público final debe ser mediante las colaboraciones descritas. El proceso para tener internet por satélite es hablar con tu operadora o entrar en la página web, confirmar que tu zona es «elegible» y al facilitar los datos de localización te indica qué operadora te puede instalar el servicio.
El programa está diseñado con todo tipo de garantías para que los fondo europeos que lo riegan lleguen de verdad al cliente final, razón por la que se decidió que se estableciera en base a los puntos catastrales en los que deben darse varias características, no contar con una infraestructura fija por tierra o por antena, por la que llegue internet con más de 50Mb y ser un usuario final (ayuntamiento, particular o empresa), pero no puede, digamos «revender» la línea.
Unico trata de salvar la desigualdad que había de acceso a internet entre el mundo rural y el urbano», porque la fibra no va a llegar a lugares recónditos y montañosos
El satélite no es una tecnología que quiera hacer competencia a la fibra, si no que es complementaria, no se explican, «se trata de salvar la desigualdad que había de acceso a internet entre el mundo rural y el urbano«, porque la fibra no va a llegar a lugares recónditos y montañosos donde no les es rentable instalarla por la escasa densidad de la población. Por esa razón Conéctate35 no tiene permanencia, y en cuanto a ese hogar, negocio o institución llega otra opción de internet, se puede dar de baja.
Sin ir más lejos, «en Hita, después de la presentación, pusieron un sistema de radioenlaces (Wimax) por los que algunos puntos del pueblo sí llegaban internet a más de 100 MB y por ello dejaron de ser zonas elegibles», señalan desde Hispasat. Y como curiosidad, aunque no es nada rural, en el mapa de la web de Conéctate35 aparece como zona elegible un kiosco de El retiro, o el hangar de los autobuses de la Plaza de Castilla, porque no tienen fibra.