La multinacional alimentaria catalana Gallo también está sufriendo la subida de las materias primas y el auge de la marca blanca que le repercute en pérdidas para sus productos que se venden menos. No obstante, Grupo Gallo, es de las pocas marcas de fabricante que no ha optado por el aumento de precio para sus productos, pero ha llevado a cabo una estrategia que no ha gustado a sus consumidores.
En este contexto, los últimos resultados presentados por la compañía catalana hacen referencia a 2022, donde consiguieron una facturación de 240,4 millones de euros, es decir, un 31% más que en 2021. En verano de 2023, la empresa líder en pasta alimenticia en España, consiguió hacerse con una cuota de mercado del 30,5%.
A lo largo de la trayectoria empresarial del Grupo, la empresa catalana ha sabido anticiparse a las nuevas tendencias y necesidades de los consumidores, creando así productos innovadores y abriendo nuevos caminos en el mundo de la pasta. Ahora a la multinacional se le abre la posibilidad de pensar que en un futuro puede seguir continuando el sector, compitiendo directamente con la marca blanca de los supermercados.
EL PROCESO DE DIVERSIFICACIÓN DE GRUPO GALLO
Grupo Gallo cuenta con más de 90 referencias, entre productos como pasta seca, fresca, salsas, harinas y variedades orientales. A día de hoy han sabido innovarse con pasta de trigo duro, con verduras deshidratadas, y con variedades como ‘sin gluten’, integral y legumbres. Ya en 2019, empezaron a desarrollar un proyecto de diversificación del portfolio de productos y las tecnologías, así como una apuesta por la internacionalización de la actividad de la compañía.
En 2020, el grupo catalán adquirió ‘Ta-Tung’, un hecho que supuso la ampliación de nuevas referencias de fresco al portafolio de Grupo Gallo, que tiene la marca en esta categoría, con especialidades procedentes de la cocina asiática. Ta-Tung, en su momento, fue líder absoluto en el segmento de comida precocinada de origen asiático en España. La empresa facturaba alrededor de 15 millones de euros, y buscaron crecer gracias a la aceleración y el apoyo de Gallo.
LA ADQUISICIÓN DE ‘TA-TUNG’ POR PARTE DE GRUPO GALLO ES PARTE DE SU ESTRATEGIA DE CRECIMIENTO ENFOCADA A LA TRANSVERSALIDAD Y LA INTERNACIONALIZACIÓN
A día de hoy, los productos de Pastas Gallo se consumen en más de 40 países diferentes. Un número que demuestra que la multinacional catalana sigue apostando a día de hoy no solo para un crecimiento de dinero y facturación, también para una expansión territorial que consiga hacerles crecer como compañía.
En este contexto, el sector de la pasta es un sector que tiene que ir innovando y adaptándose a los cambios de hábitos de los consumidores. El principal competidor de Pastas Gallo, además de las propias marcas blancas de los supermercados, es la compañía italiana Barilla. La empresa controla el 45% del mercado italiano y el 25% del estadounidense. Además, comercializa a través de varios canales de distribución alimentaria, es decir, no solo en supermercados, se utiliza en restaurantes con su gama específica para profesionales, ‘Selezione Oro Chef’.
MENOS CANTIDAD POR EL MISMO PRECIO
La inflación ha afectado a empresas de todos los tamaños y de todos los sectores. Grupo Gallo, se encuentra en las muchas compañías que buscan ajustar sus estrategias para mantener la rentabilidad en medio de los crecientes costes de producción y logística. En este caso, la multinacional catalana ha decidido no subir los precios ni bajarlos pero reducir en 50 gramos la cantidad de sus productos.
Es decir, antes los consumidores cuando compraban macarrones, pasta o cualquier otro producto Gallo, si se fijaban en las cantidades que llevaban siempre ponía 500 gramos. A día de hoy, la empresa ha reducido el contenido de sus productos para no aumentar los precios y con los 50 gramos que quita de cada producto tiene para producir más. Un movimiento estratégico que busca mantener los márgenes de beneficio en un entorno económico desafiante, siendo una estrategia que ya ha sido utilizada antes por varias empresas, y no solo en el sector de la distribución.
La dinámica económica global ha experimentado fluctuaciones significativas en los últimos tiempos, desde crisis sanitarias hasta problemas de cadena de suministro. Estos desafíos han llevado a las empresas a reconsiderar sus estrategias para mantener la rentabilidad y, en muchos casos, eso implica ajustar los precios y las cantidades de los productos.
En este contexto, la estrategia de cobrar más por menos no es única de Grupo Gallo. En un intento por compensar los aumentos en los costes de materias primas, transporte y mano de obra, varias empresas han optado o por ajustar sus precios o por ajustar los tamaños de sus productos. Este enfoque es comprensible desde el punto de vista empresarial, pero pone en duda la relación de la compañía catalana con los consumidores.