El gigante inmobiliario experimenta fuertes caídas en Bolsa y suspende su cotización
El Tribunal Superior de Hong Kong ha ordenado este lunes la liquidación del gigante inmobiliario chino Evergrande tras no lograr presentar una propuesta para reestructurar su deuda, que asciende hasta los 328.000 millones de dólares (unos 302.000 millones de euros).
«La vista ha durado un año y medio y la empresa aún no ha sido capaz de presentar una propuesta de reestructuración concreta. Creo que ha llegado el momento de que el tribunal diga basta», ha declarado la jueza Linda Chan durante la audiencia, según ha publicado el diario chino ‘South China Morning Post’.
Esta decisión, que se ha convertido en la primera orden de liquidación dictada por tribunal de la ciudad, aún puede ser recurrida, si bien esta misma jornada se asignará al liquidador provisional para que comience a gestionar la reestructuración de la deuda con los acreedores y tomar el control de sus activos, libros y registros.
Tras el anuncio, las acciones de Evergrande Group en la Bolsa de Hong Kong se han desplomado casi un 21 por ciento, las de Evergrande New Energy Vehicle han caído un 18 por ciento y las de Evergrande Property Services Group Limited han bajado un 2,5 por ciento, por lo que el grupo ha decidido suspender la negociación de sus acciones.
Esta orden judicial se enfrenta al desafío de ser reconocida por alguno de los tribunales competentes en la China continental, donde la empresa cuenta con más de 1.200 proyectos en distintas etapas y donde los liquidadores tendrán poderes de ejecución limitados sin el apoyo de uno de los tres juzgados.
La orden ha llegado tras una serie de prórrogas a la audiencia, que habían sido concedidas precisamente para poder realizar una reestructuración de su deuda.
En junio de 2022, la compañía Top Shine Global, con sede en Samoa, decidió demandar a la compañía denunciando que esta no cumplió sus obligaciones para recomprar las acciones que el inversor había adquirido en Fangchebao, filial de Evergrande.
Las dificultades financieras de la compañía se agravaron el pasado mes de septiembre, cuando el fundador de Evergrande, Hui Ka Yan, fue puesto bajo arresto como sospechoso de haber cometido varios delitos, y la imposibilidad de realizar nuevas emisiones de deuda como consecuencia de la investigación de una de sus principales filiales, Hengda Real Estate.