El Banco Central Europeo (BCE), presidido por Christine Lagarde, se reunirá este jueves y las calculadoras echan humo con las previsiones. La apuesta más generalizada es que no habrá bajada de tipos de interés. En este contexto, la tecla con la que quieren dar analistas y empresas es la del punto inflexión. Los gurús de Goldman Sachs y Bank of América tienen su particular visión de la jugada. Apuestan por una bajada, pero difieren en el timing. Goldman lo ve en más hacia abril y Bank of America espera que sea a partir del junio.
LAS RAZONES PARA QUE EL BCE REDUZCA LOS TIPOS
La inflación y los datos de empleo hacen que el BCE tenga que recortar los tipos sí o sí. Es la visión que tiene Goldman Sachs. “Siguen existiendo buenas razones conceptuales para un repunte del crecimiento en Europa este año, gracias al aumento de la renta real de los hogares y a unas condiciones financieras más favorables, y algunos indicadores de actividad prospectivos, como el indicador de expectativas ZEW, muestran una modesta mejora». «No obstante, como el crecimiento sigue claramente por debajo de la tendencia, esperamos que la desaceleración gradual del mercado laboral en 2023 se traduzca en un aumento de la tasa de desempleo en 2024.
La inflación y los datos de empleo hacen que el BCE tenga que recortar los tipos
Tanto la inflación como la actividad señalan, por tanto, la necesidad de recortar los tipos para reequilibrar los riesgos del mandato del BCE”, apuntan en un análisis al que ha accedido MERCA2. ”Nuestra previsión de referencia es una serie de recortes de 25 puntos básicos a partir de abril, pero no descartamos un inicio más temprano y vemos una probabilidad del 30% de recortes más agresivos de 50 puntos básicos. Por tanto, nuestra previsión ponderada por la probabilidad para el tipo de depósito se sitúa por debajo de los precios de mercado a finales de 2024/principios de 2025”, apuntan.
UNA BAJADA POR CITA DEL BCE
Desde Bank of América, el economista jefe para Europa, Rubén Segura-Cayuela, ya habla de una reducción que puede llegar a una por cita del BCE. “No esperamos cambios en la política monetaria, ni cambios importantes en la comunicación (pero sí una mayor presión sobre los precios de mercado) por parte del BCE la próxima semana. El BCE quiere ver los datos de primavera sobre beneficios, salarios e inflación». «Mantenemos nuestra opinión de que el primer recorte de 25 puntos básicos se producirá en junio pero, dada la rápida desinflación, los riesgos apuntan a una actuación más rápida a partir de entonces (…). Estamos cada vez más nerviosos ante la posibilidad de que los datos obliguen al BCE a recortar una vez en cada reunión posterior, en lugar de trimestralmente, un ritmo acelerado que no esperábamos hasta 2025”, señaló.
El BCE mantuvo sin cambios los tipos de interés en diciembre. El tipo de interés de las operaciones principales de financiación y los tipos de interés de la facilidad marginal de crédito y de la facilidad de depósito continúa en el 4,50 %, el 4,75 % y el 4%, respectivamente.
El BCE mantuvo sin cambios los tipos de interés en diciembre
El organismo que preside Christine Lagarde señaló que “nuestras anteriores subidas de los tipos de interés están teniendo un fuerte efecto en la economía y están ayudando a reducir la inflación. Nuestras próximas decisiones dependerán de cómo veamos la evolución de la economía y la inflación” Agregaron que a partir de este año, tienen previsto gradualmente el importe de los activos adquiridos en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia. Muchas empresas aún siguen atendiendo pedidos acumulados. La subida de los tipos de interés está enfriando la actividad, especialmente en la construcción y en el sector manufacturero.
LA INFLACIÓN
La inflación también tiene su influencia en las decisiones del BCE, algo que recogieron en un análisis sencillo realizado en la web del emisor. La inflación “descenderá de nuevo, pero más lentamente. Esto se debe, en parte, a la retirada de las medidas públicas que habían ayudado a controlar los precios. Las subidas salariales también están haciendo que los precios sigan siendo altos”.
Al respecto, según Goldman Sachs, “la inflación subyacente mundial repuntó hasta una tasa anualizada de un mes estimada del 2,6% en diciembre, frente al mínimo del 1,2% registrado en noviembre (promedio de los países emergentes y del G-10, excluido Japón)”.
la inflación subyacente mundial repuntó hasta una tasa anualizada de un mes estimada del 2,6% en diciembre, según DESTACA Goldman Sachs
Sin embargo, Goldman Sachs Research sigue pensando que la inflación está mejorando. L”a tasa trimestral anualizada siguió cayendo hasta una estimación del 2% en diciembre. El ajuste de los precios de los bienes básicos dista mucho de haberse completado; por ejemplo, los coches usados estadounidenses sólo han recuperado el 31% de su subida de precios relacionada con Covid. Y nuestros economistas esperan que tanto la inflación de los servicios como el crecimiento de los salarios sigan ralentizándose gradualmente como respuesta retardada a la mejora del equilibrio entre la oferta y la demanda en toda la economía mundial”.
LA RESERVA FEDERAL
EE.UU. ha sido una pieza clave en el descenso mundial de la inflación, y el mercado laboral del país sigue reequilibrándose. Por ello, Goldman Sachs Research “espera que la Reserva Federal empiece a recortar los tipos pronto, muy probablemente en marzo. Nuestros economistas prevén cinco recortes este año, por debajo de los entre seis y siete que reflejan los mercados financieros. En comparación, sólo el 9% de los clientes espera el primer recorte de tipos en el primer trimestre de este año, según una encuesta realizada esta semana en la Conferencia de Estrategia Global de Goldman Sachs en Londres”.