Las terapias CAR-T contra el cáncer hematológico que desarrollan algunos laboratorios como Novartis o Gilead Sciencies, están bajo el punto de mira de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés). El Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia (PRAC), que depende de este organismo europeo, ha anunciado que va a evaluar aspectos relacionados con los riesgos y la seguridad de las terapias celulares contra el cáncer. Estas dos compañías farmacéuticas tienen tratamientos enfocados a tumores relacionados con la sangre.
DUDAS DE LA EMA
Desde el PRAC han informado que se van a revisar los datos sobre neoplasias malignas secundarias relacionadas con la células T. Según explican desde el Instituto Nacional del Cáncer, los cánceres secundarios son el mismo tipo de cáncer que el original o primario. Esto quiere decir, que es posible que las células cancerosas de la mama, que sería el cáncer primario, se extienda a otro órgano, como puede ser el pulmón y en donde desencadenan nuevos tumores, esto es, un cáncer secundario. Así, las células cancerosas que han surgido en el pulmón son iguales a las de la mama. Por esto se llama cáncer secundario.
Este tipo de tratamiento consiste en la extracción del paciente de glóbulos blancos que atacan el cáncer, conocidos como células T, unas células específicas de sistema inmunitario, que se modifican genéticamente para que al introducirlos de nuevo en el organismo acaben con la enfermedad. Se trata, además, de tratamientos individualizados.
Este tipo de tratamiento consiste en la extracción del paciente de glóbulos blancos que atacan el cáncer
Desde Novartis explican que algunos cánceres hematológicos, entre los que se encuentran la leucemia y el linfoma, aparecen cuando un tipo de células, la células B, se tornan cancerígenas, crecen y se multiplican. La inmunoterapia llamada terapia con células CAR-T aprovecha la capacidad de las células T que están en el organismo del paciente para abordar el tumor.
Un CAR (receptor de antígeno quimérico) penetra en las células T de los pacientes para identificar características concretas en las células cancerígenas. Cuando el CAR se accede a las células T, se transforman en células CAR-T. Esta modificación genética se puede dirigir específicamente a algunas dianas en las células dañadas y acabar finalmente con ellas.
NOVARTIS, MÁS DE 20 AÑOS
La farmacéutica suiza Novartis fue una de las pioneras en el tratamiento celular y génico. De hecho, fue el primer laboratorio en crear una terapia con células CAR-T aprobada para pacientes pediátricos y adultos jóvenes (de hasta 25 años de edad, inclusive) con leucemia linfoblástica aguda (LLA) de células B en recaída o refractaria. La compañía lleva más 20 años investigando en la leucemia mieloide crónica.
Hace poco presentó resultados positivos del análisis primario de ASC4FIRST, un estudio pivotal de Fase III que compara Scemblix (asciminib) para pacientes recién diagnosticados con leucemia mieloide crónica. Este tratamiento demostró un perfil de seguridad y tolerabilidad favorable con un número menor de acontecimientos adversos y de interrupciones del tratamiento en comparación con el estándar de tratamiento.
En los últimos meses de 2023, las ventas netas de Novartis fueron de 34.000 millones de dólares (31.014 millones de euros) y los ingresos netos principales fueron de 10.300 millones de dólares (9.412 millones de euros).
GILEAD Y CAR-T
En cuanto a Gilead, en junio de 2023, presentó a través de Kite, su compañía especializada en terapia celular, resultado de su CAR-T axicabtagén ciloleucel destinado al tratamiento del linfoma B difuso de células grandes. Este es un tipo de cáncer que crece en las células B. La mayoría de los linfomas de células B son linfomas no Hodgkin.
Kite comunicó resultados del análisis de supervivencia global del estudio de fase 3 ZUMA-7 con Yescarta (axicabtagén ciloleucel), en comparación con el tratamiento estándar histórico- Con una mediana de seguimiento de 4 años (47,2 meses), esta terapia de administración única demostró una supervivencia global significativamente mayor en comparación con el SOC, con una reducción del 27,4 por ciento en el riesgo de muerte.
En cuanto a la facturación de Gilead, añadir que en los nueve meses de 2023, los ingresos fueron de 20.002 millones de dólares (18.278, millones de euros), frente a los 19.892 millones (18.178 millones de euros) del ejercicio anterior. Los ingresos netos fueron de 4.236 millones de dólares (3.871 millones de euros) en comparación con los 2.952 millones de dólares (2.697 millones de euros) de hace un año.