Supermercados como Mercadona, Dia, Carrefour y Lidl se han visto afectados por la inflación con la subida de precios que ha tenido consecuencias directas en los clientes. Y es que los consumidores han reducido el volumen de compra en el momento en el que los precios subían y han visto como comprando menos cantidad seguían gastando el mismo dinero que antes. Estas tres empresas apuestan por numerosas acciones destinadas a incrementar las ventas el año que viene. Facilitar las cosas al cliente mediante la tecnología y los descuentos serán clave para que logren sus metas.
LOS HÁBITOS DEL CONSUMIDOR
El consumidor ha cambiado sus hábitos de compra y cada vez es más exigente y demanda productos más versátiles que cumplan con varios criterios y no solo uno. No obstante, al mismo tiempo, el consumidor también busca “que se lo pongan fácil”, es decir, la conveniencia. Así, el 60% de ellos, cuando tienen prisa, prefieren comer algo sencillo, cambiando la estructura de los menús hacia platos únicos.
El precio de la cesta de la compra es un 7,1 % más elevado, un alto incremento teniendo en cuenta que el año pasado ya se encareció en un 11,6 %. Según datos aportados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el consumo de alimentos en los hogares de nuestro país se ha reducido exactamente un 6,69%. Este año, la marca blanca supone el 38% del total de las ventas de bienes de consumo en Europa (229.000 millones de euros) según el informe publicado por la firma de datos de mercado Circana.
MERCADONA, DIA Y CARREFOUR EN EL CENTRO DE LA BATALLA
Los supermercados han desplegado estrategias ingeniosas para no solo atraer a los clientes, sino también para conquistar sus corazones y sus carritos de compras. Desde programas de fidelidad hasta experiencias de compra innovadoras, los supermercados están constantemente evolucionando para mantenerse en la cima de la mente del consumidor. Dia y Carrefour cuentan con una gran capacidad de ofrecer a los consumidores ofertas y promociones.
los supermercados han desplegado estrategias ingeniosas para no solo atraer a los clientes, sino también para conquistar sus corazones y sus carritos de compras
Desde la disposición estratégica de los productos hasta la elección de colores y luces, cada elemento está diseñado para guiar a los clientes y hacer que el acto de comprar sea agradable. La inflación y la reducción de la media del ticket final de los consumidores está trayendo consigo que las citadas superficies comerciales estén temerosas de cómo les pueda afectar esa situación de cara a 2024.
LAS TARJETAS DE FIDELIZACIÓN DE DIA Y CARREFOUR EN UNA HERRAMIENTA PODEROSA PARA LOS SUPERMERCADOS
Más allá de ofrecer descuentos, las tarjetas de fidelización recopilan datos valiosos sobre las preferencias de compra de los clientes. Las cadenas de distribución utilizan esta información para personalizar ofertas, promociones, enviar cupones específicos y mejorar continuamente la experiencia de compra de cada cliente. Utilizando datos de compra y preferencias individuales, los supermercados envían ofertas específicas que se alinean con los gustos y necesidades de cada cliente, creando así una experiencia única y altamente relevante.
LA ESTRATEGIA DE LOS SUPERMERCADOS PARA RECUPERAR INGRESOS
La comodidad y la tecnología han aparecido en el día a día de los supermercados para quedarse y facilitar así el proceso de compra de los consumidores. Sin ir más lejos, Alcampo y Carrefour han apostado por las ‘cajas rápidas’ de autoservicio en las que la experiencia de pago es más rápida y el cliente puede agilizar el proceso de compra.
Alcampo y Carrefour han apostado por las ‘cajas rápidas’ de autoservicio en las que la experiencia de pago es más rápida y el cliente puede agilizar el proceso de compra
Con la tecnología han querido desarrollar la digitalización no solo en las tiendas, también en conseguir una aplicación móvil que termine de conquistar a los clientes, como la de Dia, que es una plataforma personalizada en la que el consumidor recibirá cupones de descuento en productos que se asemejen a sus preferencias. Y es que, la rápida evolución de las preferencias del consumidor, la creciente competencia en línea y las cambiantes dinámicas del mercado requieren una adaptación constante.
Las cadenas de distribución tienen un continuo avance para seguir innovando y avanzando. Sin embargo, no hay que olvidarse de la marca blanca, que con la inflación ha conseguido ganar terreno y en supermercados como Mercadona la marca propia es más vendida que la de un distribuidor.
LA MARCA BLANCA, LA OPCIÓN QUE MÁS CRECE
Las marcas blancas han pasado de ser simplemente alternativas asequibles para productos básicos a ofrecer opciones gourmet y especialidades. Hay que tener en cuenta que el 40% de los compradores prueban nuevas marcas precisamente gracias a la promoción. Sin embargo, la realidad nos muestra que las marcas siguen utilizando la promoción más como herramienta para terminar con las existencias que para dar a conocer el producto.
LA MARCA BLANCA PERMITE QUE EL SUPERMERCADO SE DIFERENCIE DEL RESTO DE CADENAS DE DISTRIBUCIÓN
Por supuesto, el factor económico es uno de los principales motivos por los que el cliente elige la marca blanca. Los consumidores encuentran que pueden obtener productos de calidad comparable a un precio significativamente más bajo que las marcas tradicionales. Las marcas propias de las cadenas como Mercadona y Dia han ido evolucionando desde sus modestos comienzos hasta convertirse en actores clave en el panorama minorista.
Lo que comenzó como una respuesta a la escasez ya se ha transformado en una elección consciente para los consumidores que buscan calidad sin comprometer así su presupuesto. A medida que los supermercados continúan invirtiendo en la mejora de la calidad y la diversificación de sus ofertas, es probable que las marcas blancas sigan desafiando las percepciones tradicionales y desempañando un papel aún más significativo.