Parece ser que vivir en Marte es uno de los planes de futuro más latentes para el ser humano. Las futuras generaciones podrán escoger entre ser terrícolas o ser marcianos, o al menos eso es lo que esperan muchos investigadores. Es por ese motivo por el cual algunos científicos llevan un tiempo probando diferentes cultivos para conocer los alimentos que se podrán cultivar en el planeta rojo.
La papa parece ser uno de los candidatos más infalible ya que podrá ser cultivada en Marte. Eso sí, no se si podremos trasladar la famosa tortilla de patatas allí o hacer la versión vegana sin huevos. La cuestión es que la patata, que es el tercer alimento más importante en todo el mundo en la actualidad, podrá venirse con nosotros a Marte.
Ahora bien, ¿Cómo han averiguado esto los científicos? Pues con un experimento que se puso en marcha hace ya un año. Para realizar esta prueba se plantó un tubérculo de patata en un entorno completamente cerrado llamado CubeSat. Este contenedor se cerró herméticamente y se adaptó para tener la misma temperatura de día y de noche que en planeta marciano. También se han conseguido imitar los niveles de presión de aire, oxígeno y dióxido de carbono del planeta. Además, se instalaron unas cámaras de transmisión en vivo para que todo el mundo pudiese ver la evolución de este cultivo, lo podéis ver aquí.
Según afirma Julio Valdivia-Silva, investigador asociado del Instituto SETI y la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) en Lima, «si estos cultivos llegan a tolerar las condiciones extremas que se están exponiendo en el CubeSat, tienen una buena oportunidad de desarrollarse en Marte. Además, están realizando este experimento con diferentes variedades de papas para ver cuáles son las que mejor sobreviven a estas condiciones.
«Queremos saber cuáles son las condiciones mínimas que una patata necesita para sobrevivir».
Eso sí, los científicos afirman que los futuros habitantes del planeta Marte deberán acondicionar el suelo para permitir que los tubérculos de patatas obtengan suficiente agua y sal. Para ello tendrán que añadir al suelo nutrientes y una estructura un poco más suelta y arenosa. Una de las variedades que mejor se desarrolló era muy tolerante a la sal, por lo que parece ser que esta especie de patata es la que mejor se adapta a las condiciones climáticas.
La buena noticia es que esto significa que si realmente la vida se traslada a Marte existen algunos alimentos que se podrán seguir cultivando en la tierra roja sin ningún tipo de complicación. Eso sí, las recetas deberán ser diferentes a las que conocemos, así que habrá que innovar en la cocina e inventar nuevos platos dignos de un restaurante de cinco estrellas.
El experimento ha proporcionado buenas noticias sobre el potencial de la papa para que los futuros marcianos no se queden sin ningún tipo de sustento. ¿Qué os parece a vosotros? ¿Creéis que realmente se cultivarán las papas en ese ambiente árido? Y, lo más importante, ¿Terminará el ser humano viviendo en Marte?