Los últimos estudios del sector de la salud han demostrado que tener relaciones sexuales plenas resulta fundamental para la salud humana. Esta reciente investigación científica ha puesto de manifiesto que en las relaciones íntimas entre las personas el sentido del bienestar alcanzan niveles increíbles.
Por esta razón, los expertos recomiendan tener relaciones íntimas, de manera regular, para equilibrar nuestro organismo. En este artículo profundizaremos sobre los grandes beneficios para el organismo al tener relaciones sexuales plenas.
Índice
Combatir el estrés:
Tener relaciones sexuales plenas a diario es un excelente antídoto para combatir el estrés. Durante la actividad sexual el organismo segrega óxido nítrico, la hormona del placer y la oxitocina, una hormona de enlace neuroendocrina involucrada en la regulación de la presión arterial, el estado emocional y el crecimiento muscular. Estas tres hormonas se unen para producir un efecto de relajación en nuestro sistema nervioso y muscular, liberándolos del estrés acumulado al largo del día.
Además de esto, tener relaciones sexuales regulares permite ayudar a liberar aquellas tensiones reprimidas en nuestro cuerpo relacionadas con el estrés. De esta forma, nos sentimos más tranquilos, tranquilizados y satisfechos.
Cuando practicamos relaciones sexuales plenas con nuestro pareja, estamos construyendo un ambiente de intimidad y afecto que nos permite mejorar la comunicación. La libertad de expresar nuestros sentimientos sin el temor a las críticas nos ofrece la oportunidad de mejorar nuestra relación.
Precisamente, el hecho de ser capaces de establecer conversaciones antes y después de practicar relaciones sexuales aumenta considerablemente nuestra reconciliación, nuestra honestidad y la confianza entre nosotros. Así podemos disfrutar nuestra relación más intensamente.
Protección contra enfermedades:
Tener relaciones sexuales regulares ayuda a protegernos de algunas enfermedades. Los expertos han concluido que una persona que practica relaciones sexuales regularmente se enfrenta a menos enfermedades como el embarazo no deseado, el sida, y el herpes genital.
Además, tener relaciones sexuales también ayuda a disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de próstata y ovarios en los hombres y mujeres respectivamente. Los estudios han demostrado que tener relaciones sexuales con regularidad instrumental la producción de los anticuerpos del organismo.
Los expertos han descubierto que, para controlar el nivel de glucosa en la sangre, es necesario practicar relaciones sexuales plenas regularmente. Según estudios recientes, tener sexo una vez a la semana aumenta la sensibilidad a la insulina en un 10%, lo que ayuda a mantener los niveles de glucosa en la sangre bajo control.
Estar sexualmente activos ayuda a los hombres y mujeres a reducir en promedio el colesterol en la sangre en un 20%, que es el mismo efecto que se produce si tomamos medicamentos para bajar el colesterol. Estos dos beneficios ayudan a prevenir problemas cardiovasculares.
Mejora la autoestima:
Tener asexualización regular entre la pareja estrecha el vínculo que une a las personas entre sí, ayudando a los hombres y mujeres a mejorar su autoestima. Los científicos han descubierto que las relaciones íntimas regulares ayudan a que las personas se sientan satisfechas consigo mismas al sentirse queridas, deseadas y comprendidas.
Por otra parte, tener sexo consciente de forma regular ayuda a generar en las personas un sentimiento de unión y completitud. Esta sensación favorece la realización personal, estrechando los lazos afectivos entre los compañeros.
Como hemos visto, el acto sexual tiene un efecto directo sobre nuestro estado emocional. Así mismo, cuando se practica con consciencia puede ayudar a controlar los dolores físicos en el organismo. Durante la actividad sexual del organismo segrega endorfinas, los analgésicos naturales, que pueden aliviar el dolor en nuestro sistema muscular.
Además, según los expertos, tener relaciones sexuales regulares durante el embarazo ayuda a las mujeres a desarrollar un sentimiento de seguridad, de confort y de tranquilidad, lo que reduce significativamente los dolores en el organismo durante el periodo.
Estimula el despertar intelectual:
Estudios recientes han demostrado que tener relaciones sexuales regulares puede ayudar a estimular el despertar intelectual, tanto en los hombres como en las mujeres. Las endorfinas y dopamina, dos compuestos encontrados durante el coito, mejoran notablemente el funcionamiento de los receptores cerebrales a nivel intelectual. Por esta razón, tener sexo ayuda a mejorar nuestra memoria, nuestra creatividad y nuestra capacidad de razonamiento.
Incluso hay estudios que han demostrado que tener relaciones sexuales regulares promueve la fabricación de nuevas neuronas en el cerebro Hipocampo, lo que ayuda a mejorar el funcionamiento intelectual, la capacidad para la solución de problemas y la memoria de largo plazo.
Cuando practicamos relaciones sexuales plenas a diario también estamos protegiendo nuestro organismo contra la aparición de enfermedades crónicas. Estudios recientes han descubierto que las personas que tienen una vida sexual activa tienen un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, gracias al efecto de relax que proporcionan las hormonas liberadas durante la actividad sexual.
También hay estudios que han demostrado que tener relaciones sexuales regularmente ayuda a prevenir la ansiedad, la hipertensión y la depresión, y mejora la calidad de vida de las personas, así como el sueño.
Potencia la felicidad:
Cuando practicamos relaciones sexuales regulares con nuestro pareja también estamos potenciando nuestra felicidad. Durante el acto sexual liberamos una cantidad significativa de hormonas como la dopamina, la oxitocina y la testosterona, que mejora la actitud y el ánimo, el que puede influir en positivo nuestros ánimos y nuestra relación.
Además, según los expertos, el acto sexual ayuda a cuidar las relaciones interpersonales, ya que darnos placer a nosotros mismos mejora nuestra relación con los demás. Por esta razón, sentir pasión entre miembros de una misma pareja aumenta considerablemente el nivel de felicidad en todos los aspectos de la relación.
Tener relaciones sexuales regulares resulta ser un excelente antídoto contra la adicción al sexo. Una persona que practica relaciones sexuales conscientes y regulares es capaz de potenciar su deseo sexual, lo que mejora nuestra autoestima y sentimiento de satisfacción.
Tener relaciones íntimas regulares nos ayudan a satisfacer nuestra necesidades de intimidad y cariño en forma satisfactoria. Así podemos controlar nuestro apetito sexual sin la necesidad de tener buscar satisfacción en otros lugares.
Mantiene la vitalidad:
Tener relaciones sexuales plenas también son útiles para mantener un nivel de vitalidad adecuado en nuestro organismo. Los estudios constataron que cuando las personas tienen relaciones sexuales regulares con consciencia, aumenta la energía de su organismo y mejora su rendimiento durante el día a día.
Realizar actividades sexuales regulares también proporciona a nuestro organismo una importante cantidad de vitamina D junto con enzimas anti-aging, que ayudan a combatir el envejecimiento prematuro, manteniendo la vitalidad en nuestro cuerpo.
Los expertos han demostrado que practicar relaciones sexuales plenas regulares puede ayudar a incrementar el deseo sexual de todas las partes involucradas. Cuando practicamos relaciones íntimas conscientes con nuestro pareja aumentamos el nivel de experimentación y cercanía, lo que nos permite disfrutar mucho más el acto sexual.
Además, cuando las relaciones sexuales son satisfactorias suelen ofrecernos una sensación de plenitud y bienestar, lo que ayuda a aumentar el deseo sexual y el nivel de satisfacción personal. El hecho de poder compartir nuestras experiencias sexuales con nuestra pareja potencia la intimidad dentro del grupo, lo que contribuye considerablemente a aumentar el deseo sexual.
En conclusión, tener relaciones sexuales plenas resulta fundamental para mantener la salud humana. Esta actividad nos ayuda a controlar el estrés, prevenir enfermedades cardiovasculares, mejorar la autoestima y estimular el despertar intelectual. También potencia los lazos afectivos con nuestro pareja, incrementa el deseo sexual y contribuye a mantener la vitalidad de nuestro organismo. La clave está en practicar estas relaciones íntimas con consciencia para lograr los mayores beneficios para nuestro organismo y nuestros sentimientos.