Comentario de Ario Emami, gestor de fondos de renta fija de Fidelity International sobre el mercado de renta fija europea investment grade.
A pesar de la volatilidad reciente de los tipos de interés, en bonos europeos investment grade mantenemos nuestra visión de que lo conveniente es un posicionamiento largo en duración y en deuda corporativa.
Esperamos que la volatilidad de los tipos descienda durante los próximos meses. Dado que una de nuestras ideas clave durante los últimos 15 meses ha sido que la estabilidad de los tipos es condición indispensable para que se normalicen los diferenciales de la deuda corporativa, también mantenemos el optimismo sobre las perspectivas de la deuda corporativa de cara al final de año.
Parece que cada vez que el mercado está a punto de encontrar por fin algo de estabilidad frente a la volatilidad de los tipos, este se ve afectado por un dato macroeconómico sorprendente (la cifra de empleo no agrícola de EE.UU. y quizá el reciente dato del IPC) o por una sacudida externa (sucesos en Oriente Medio). Sin embargo, en nuestra opinión estamos cerca de tener estabilidad en los tipos por varias razones que exponemos a continuación.
EL CONFLICTO DE GAZA NO SE EXTENDERÁ
En primer lugar, no creemos que la confrontación en Oriente Medio pueda extenderse a otras partes del mundo. La guerra entre Rusia y Ucrania fue la que más probabilidades tuvo de que ocurriera algo así, pero no se materializó porque las grandes potencias, como EE.UU. y China, hicieron todo lo posible para evitar un enfrentamiento directo. Pensamos que la prolongada situación que se da en Oriente Medio probablemente siga siendo un problema local y que, en el peor de los casos, se convierta en una guerra subsidiaria sin confrontación directa entre Occidente y Oriente.
la economía estadounidense parece estar en mucha mejor forma de lo que la mayoría de los inversores preveía
En segundo lugar, la economía estadounidense parece estar en mucha mejor forma de lo que la mayoría de los inversores preveía y ciertamente de lo que habían descontado los que apostaban por un aterrizaje forzoso. Sin embargo, la reacción del mercado a los últimos datos ha sido muy similar a lo que vimos durante el tercer trimestre de 2022, cuando unos datos sólidos hicieron que funcionaran las apuestas anti-paridad de riesgos, es decir, que todos los activos de riesgo cayeron con fuerza. Pensamos que el entorno actual es diferente del año pasado y, por ende, el comportamiento del mercado podría terminar siendo también diferente.
En el segundo semestre de 2022, la Fed tuvo que lidiar con una inflación superior al 7% que no emitía señales de estar llegando al máximo ni de descender. Para mantener la “credibilidad”, tenía que dejar claro que devolvería la inflación al objetivo. El cálculo de política monetaria de 2023 es muy diferente. Puesto que la inflación describe una clara trayectoria a la baja y la inflación general podría caer por debajo del 3%, resultaría muy difícil explicar por qué la Fed sigue subiendo los tipos de forma agresiva simplemente para reducir la inflación otros 50 o 75 puntos básicos.
La Fed podría permanecer en el elevado nivel actual durante algún tiempo, aunque pensamos que recortará tipos rápidamente a la primera señal de debilidad. Así pues, en nuestra opinión, el buen comportamiento de los planteamientos “anti-paridad de riesgos” debería ser temporal y dar paso automáticamente al buen comportamiento de las apuestas de paridad de riesgos cuando el ciclo de recortes de la Fed dé impulso a los bonos.
DEUDA: SEGUIMOS OPTIMISTAS CON LA DURACIÓN EN EUROS
En cuanto a los tipos europeos, resulta interesante observar la correlación relativamente alta entre los bunds alemanes y los bonos del Tesoro de EE.UU.
- En primer lugar, Europa carece de la sólida dinámica de crecimiento de EE.UU., ya que el viejo continente ya se encuentra sumido en un estancamiento que podría durar varios trimestres.
- En segundo lugar, la dinámica de la inflación europea no emite señales de persistencia, ya que la inflación del sector servicios de la región ya ha perdido fuelle durante el verano (generalmente, un periodo favorable para esa cesta).
- En tercer lugar, los bunds no van a sufrir la misma dinámica de emisión de deuda que se contempla para los bonos del Tesoro de EE.UU., ya que los políticos alemanes ya están debatiendo formas de recortar el déficit y recuperar el equilibrio presupuestario.
los datos recientes sobre el crecimiento y el IPC parecen haber consolidado la idea de que, de hecho, podría haber sido la última subida de tipos
Una pregunta más importante que nos planteamos ahora es lo pronto que el BCE debe poner en marcha el ciclo de recortes y, cuando lo haga, con qué velocidad. Pensamos que, a medida que conozcamos más datos sobre el ritmo de desinflación y estancamiento en Europa, la beta entre los bunds y los bonos del Tesoro de EE.UU. debería debilitarse y el mercado debería empezar a descontar recortes más tempranos y más numerosos en Europa de lo que se descuenta en EE.UU.
Si no se produce un incremento sostenido de los precios del petróleo, creemos que la segunda mitad de 2024 puede traer consigo un entorno en el que la inflación general en Europa se mueva en cotas muy bajas en torno al 2%.
A la vista de esta coyuntura, el estancamiento o recesión en varios países europeos debería obligar al BCE a empezar a recortar tipos en dirección a su tipo neutro percibido (1-2%).Así, si los datos confirman nuestra visión sobre la dinámica de crecimiento e inflación en Europa, pensamos que existe un importante recorrido al alza en los bunds desde los niveles actuales.