España necesita realizar 814 proyectos de infraestructuras que crearían 994.120 empleos. Estas son las estimaciones de Seopan (Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras). Un ‘grito al cielo’ de la patronal que engloba a las grandes constructoras como ACS, FCC, OHL, Sacyr, Ferrovial, o Acciona. La pregunta es: ¿A cuántos de esos proyectos optarían?
Pues si echamos un vistazo al Observatorio Sectorial DBK de Informa sobre Construcción, a no muchos. Porque el valor de la producción del sector de la construcción en España fue de 124.092 millones de euros durante 2018. Se trata de un 8,4% superior al cosechado un año antes. De esa cantidad, un pírrico 3,4% fue la cuota que acabaron alcanzando los seis grandes grupos. Es decir, sólo cayeron en su ‘bolsillo’ 4.220 millones de euros. Los casi 120.000 millones restantes fueron a parar a las 79.986 empresas constructoras restantes.
El elevado precio de algunas licitaciones ministeriales, las de mayor enjundia, hace que sólo puedan optar a ellas las grandes constructoras
Eso sí, y según denuncia otra asociación de constructoras, en este caso Anci (Asociación Nacional de Constructores Independientes), que acoge a 25 de las mayores compañías no cotizadas del sector (Copasa, Sando, Rubau…), la licitación de obra pública acaba beneficiando a las afiliadas a Seopan. Porque, durante los últimos años, el porcentaje de Anci ha ido descendiendo, desde el 27,7%, de 2016, al 20%, en 2017. “Lo contrario ha ocurrido en el grupo de grandes empresas que han concentrado una gran parte de las adjudicaciones ministeriales”, afirmó Jaime Lamo de Espinosa, presidente de Anci, en Cinco Días.
Por tanto, la gran parte del pastel del volumen de trabajo es para la inmensa mayoría de las empresas constructoras, pero la guinda, y el mejor trozo, acaba cayendo en el ‘estómago’ de las seis grandes. ¿Por qué? Por el elevado precio de las licitaciones, que hace que el bocado esté limitado para unas pocas. Dicho de otra manera, las grandes son ‘sibaritas’ a la hora de escoger donde hincar el diente el España: grandes obras con grandes volúmenes. Y no abundan. Por eso, prefieren los mercados exteriores.
Un dato: la facturación del sector en los mercados internacionales fue de 40.300 millones de euros en 2018, un 5,1% más que el año anterior, lo que supuso un nuevo récord. Sólo las seis constructoras más grandes acapararon el 96,2% del total de la producción en el extranjero llevada a cabo por empresas españolas. ACS, por ejemplo, consiguió en 2018 contratos en el exterior por más de 14.000 millones de euros.
LAS CONSTRUCTORAS, DE ENHORABUENA
De los 124.092 millones de euros cosechados por las constructoras, fue el segmento de edificación el que alcanzó la mayor cifra (105.108 millones de euros), lo que supuso un incremento del 10%. Ese porcentaje fue del 11,8% en el área de edificación residencial, y del 8,2%, y del 8,7% en edificación no residencial, y rehabilitación y mantenimiento, respectivamente.
Durante ese 2018, la licitación pública de obra civil creció un 34%, para llegar a los 11.203 millones de euros, y la contratación pública lo hizo en un 40%, para situarse en 7.131 millones de euros. La licitación pública de edificación, por otra parte, también aumentó un 19% (5.560 millones de euros).
Las previsiones para 2019 son optimistas. Según el Observatorio Sectorial DBK de Informa, el valor total de la producción sobrepasará los 132.000 millones de euros (+6,5%). “Se sustentará en la prolongación del crecimiento de los trabajos de edificación y en la aceleración del ritmo de aumento de la actividad de obra civil”, apuntan en DBK.
De momento, y de enero hasta mayo (datos de Seopan), la licitación de obra nueva ha sido de 4.775 millones de euros, englobando tanto a administración general, comunidades autónomas y administración local. Se trata de un 55,5% más que en el mismo periodo de 2018. Por lo que respecta a rehabilitación y mantenimiento, esa cantidad se ha situado en 3.832 millones de euros, un 44,5% más. ¿Qué porcentaje se acabarán llevando las grandes constructoras? ¿Volverá a quejarse Anci de la forma de reparto?