El cambio de paradigma en las sociedades humanas está en desarrollo, cada vez más personas tienen en consideración la repercusión que un determinado producto o servicio tiene sobre los ecosistemas y entornos naturales. En estos momentos, ya es una realidad que, si la empresa productora lleva a cabo en sus procesos de manufacturas técnicas sostenibles, que reduzcan la emisión de CO2 a la atmósfera, que recicle y reduzca al máximo la producción de desechos entre otros factores, se estará más predispuesto a adquirir su producto o a contratar sus servicios.
En este sentido, los fabricantes de plásticos están tomando buena nota y ya están implantando todo tipo de estrategias para la mejora en la fabricación de sus mercancías con el mínimo daño al medio ambiente posible y sin disminuir en la calidad del producto final.
Estos son los factores que determinan una producción de plástico ecológica y sostenible
Es fundamental que los procesos productivos cuenten con un diseño optimizado en el sentido de Ecodiseño, es decir, que se utilice solo la cantidad mínima imprescindible de material para la fabricación de los objetos. Así mismo, es indispensable que se introduzcan en los procesos productivos cada vez mayores cantidades de plástico reciclado y reciclable.
También empresas como Polimertecnic que destacan por la innovación y por el uso de materiales 100% reciclables están introduciendo nuevos materiales, compostables y de origen vegetal, dando de lado cada vez más a los oxodegradables por su dificultad para la descomposición.
También es importante evitar el uso de plásticos de un solo uso, llevando a efecto como lo normal la reutilización de estos materiales. Por último, se debe trabajar en la optimización en la fabricación de objetos plásticos con el objeto de reducir al máximo posible los residuos de postproducción.
El final de su vida útil
Uno de los grandes problemas que tiene el planeta como consecuencia de la forma que ha habitado el hombre en ella es la acumulación desorbitada de materiales plásticos en vertederos o desperdigados por tierra, mar y aire. Se estima que solo en los océanos se acumulan 170 billones de trozos de plástico, esto significa que hay unas 21.000 piezas por cada ser humano.
Se hace necesario, por tanto, aplicar sistemas que procuren un final feliz para estos productos. Es urgente crear el entorno adecuado para que los residuos plásticos se gestionen y reciclen de la mejor manera posible. Se trabaje para facilitar la opción del reciclado para que se reintroduzcan nuevamente en el proceso productivo, participando con ello de manera activa en la transición global hacia la economía circular.
Un final idílico para este problema sería la combinación eficiente de los tres tipos de tecnologías para el reciclado que en la actualidad se encuentran disponibles, el mecánico, por disolución y el químico.
Aunque, lo más importante es actuar en el consumo responsable, eligiendo empresas como la aquí mencionada, Polimertecnic, que incluyen prácticas ecológicamente responsables que benefician a los entornos naturales y al planeta ofreciendo el más alto nivel en cuanto a calidad. Así mismo, es necesario y urgente, la creación de un marco regulatorio permanente que permita el desarrollo de nuevas tecnologías para el reciclado garantizando que se alcanzan los objetivos impuestos por la Unión Europea.
