La compañía de ciencia y tecnología Merck ha destacado en Biospain 2023, que fomentar y agilizar el acceso a la innovación es el camino para que Europa recupere su papel como centro de atracción de la inversión y de la producción en el sector farmacéutico. «De esta forma se mejorará la llegada de los nuevos medicamentos para todos los pacientes de la Unión Europea», han indicado desde la compañía.
Esta es la conclusión principal que se ha debatido en la mesa redonda “Impulsar la industria innovadora para lograr la Autonomía Estratégica Europea”, promovida por la compañía en el marco Biospain 2023, congreso organizado por la Asociación Española de Empresas de Biotecnología AseBio, con la colaboración de Biocat, el Ajuntament de Barcelona y la Generalitat de Catalunya, del 26 al 28 de septiembre en Barcelona.
MERCK Y BIOSPAIN 2023
En este contexto, la mesa celebrada por Merck ha permitido hablar de la situación de pérdida de competitividad de Europa como lugar de inversión en I+D+i de la industria farmacéutica frente a otros países como Estados Unidos, China y Japón. En los últimos 20 años dicha inversión ha caído del 41% en 2001 al 31% en 2020. En la actualidad, el 48% de los nuevos tratamientos tienen como origen Estados Unidos frente al 22% de Europa (EFPIA).
Desde el punto de vista de la integrante del Parlamento Europeo (Grupo Renew Europe), Susan Solís, hay un problema crónico en Europa en este sentido: «Vivimos momentos de escasez a causa de nuestra dependencia en las importaciones de otros países y territorios, como China. Es importante reconocer la biotecnología como un sector estratégico y crítico para nuestra región, y facilitar su acceso a la financiación por medio de una legislación coherente».
«Vivimos momentos de escasez a causa de nuestra dependencia en las importaciones de otros países y territorios, como China».
Susan Solís, integrante del Parlamento Europeo (Grupo Renew Europe).
Un planteamiento muy alineado con el del secretario general de Industria del Ministerio de Industria de España, Fernando Borredá Juste, quien ha señalado que la biotecnología permite «desarrollar nuevos fármacos, equipos, terapias, medicina personalizada, lo cual no solo es bueno para el paciente, sino que también reduce nuestra dependencia del suministro global».
Además, Borredá ha apuntado como otra medida a tomar, el asegurar las cadenas de suministro de seguridad y mejorar la coordinación entre las instituciones europeas y nacionales con el objeto de «ser más eficaces».
En este sentido, la directora de Productos Químicos, Sanidad, Venta Minorista y Agroalimentación (DG-GROW) de la Comisión Europea, Kristin Schreiber, ha explicado que “para lograr la autonomía estratégica y la notificación temprana del riesgo de desabastecimiento, tenemos que poner en marcha planes de prevención e intercambiar información entre Estados miembros”.
TRES LÍNEAS DE ACCIÓN
Desde Merck se han apuntado tres líneas de acción para apoyar la autonomía estratégica de Europa. En primer lugar, simplificar el marco normativo europeo, lo que implica eliminar regulaciones innecesarias y armonizar las normativas para facilitar la innovación y la fabricación de productos de salud de alta calidad.
Del mismo modo, también se pide reducir las cargas administrativas para aumentar la agilidad en la respuesta a las necesidades médicas no cubiertas, lo que permitirá que las soluciones innovadoras lleguen a los pacientes de manera más rápida y efectiva.
Por último, resulta clave acabar con las barreras a la inversión, reduciendo costos, fortaleciendo infraestructuras y desarrollando políticas industriales que promuevan el crecimiento sostenible a largo plazo en el sector salud.
Por su parte, el presidente de Merck en España, Manuel Zafra, ha concluido el debate asegurando que «proteger la innovación es aún más crítico cuando lo que está en juego es el sector sanitario». En este sentido, las empresas farmacéuticas tienen un papel protagonista, ya que lideran la inversión en el continente europeo (también en España), invirtiendo más del 12% de sus ventas en I+D, más que ningún otro sector industrial.
DRUG DISCOVERY
Este congreso ha sido también el escenario escogido por AseBio para presentar el informe “Las nuevas tech en el proceso de Drug Discovery”, desarrollado a través de su Grupo de Trabajo de Drug Discovery.
Está claro que Big Data, Machine Learning, Internet de las cosas (IoT) o Inteligencia Artificial (IA), entre otras, son herramientas cada vez más necesarias para el desarrollo de las empresas, y la biotecnología no es ajena al cambio.
«Hay miles de enfermedades, pero solo se aprueban 50 fármacos al año. El uso de inteligencia artificial está demostrando un incremento notable en la productividad farmacéutica. Este cambio de paradigma pronto se traducirá en más fármacos aprobados y, por lo tanto, el acceso a nuevos tratamientos para pacientes necesitados», ha manifestado el vicepresidente y coordinador del grupo de trabajo de Drug Discovery de AseBio y fundador de ZeClinics y ZeCardio Therapeutics, Javier Terriente.
«Hay miles de enfermedades, pero solo se aprueban 50 fármacos al año».
La adoptación de estas herramientas digitales por parte de las empresas biotecnológicas ha generado un importante impacto, como la creación de nuevos departamentos y la diversificación de los equipos de trabajo que ya no están únicamente compuestos por investigadores, sino también por informáticos. Además, la implementación de estas herramientas en las empresas ‘biotech’ supone también la modificación y estandarización de sus procesos con el objetivo de asegurar, entre otras tareas, el correcto tratamiento de los datos.
«En Almirall, hemos creado un departamento de ciencia de datos en I+D con el objetivo de usar estas tecnologías en dos aspectos críticos: acelerar la toma de decisiones informadas y mejorar la capacidad de generar información clave en diferentes etapas de nuestros proyectos. Por ejemplo, al integrar grandes cantidades de datos de alta calidad, podemos identificar dianas terapéuticas de una forma más fiable. También usamos herramientas de inteligencia artificial para diseñar nuevos fármacos», señala el data science director de Almirall, Francesc Fernández Albert.
TECNOLOGÍAS DIGITALES MÁS USADAS
Según el documento “Las nuevas tech en el proceso de Drug Discovery”, el Big Data (79%) y la inteligencia artificial (68%) son las tecnologías digitales más utilizadas entre las entidades socias que han participado en su elaboración.
En el ámbito de la biotecnología y particularmente en Drug Discovery, el Big Data se utiliza principalmente para analizar información de estructuras moleculares (proteínas, RNA, moléculas químicas, etc.) (53%), información transcriptómica (37%), genómica (32%) o proteómica (32%) o datos clínicos entre otros.
En el ámbito de la biotecnología y particularmente en Drug Discovery, el Big Data se utiliza principalmente para analizar información de estructuras moleculares.
Dentro del grupo de herramientas digitales basadas en inteligencia artificial destacan el uso de Machine Learning (58%) y de los métodos estadísticos avanzados para el descubrimiento de nuevos fármacos (42%). En este sentido, cabe destacar que el crecimiento en el uso de la realidad virtual (21%) para el almacenamiento y visualización de datos, aunque no se emplea de forma intensiva todavía en los procesos de Drug Discovery.
Las herramientas digitales se encuentran en constante evolución y, en la actualidad, existe un amplio abanico. El Internet de las cosas (IoT) o el Computer Science, aunque son utilizados en menor medida, también se emplean en los procesos de Drug Discovery para el almacenamiento, la visualización y la certificación de datos.
La aplicación de las herramientas digitales se centra en el descubrimiento de nuevos fármacos se produce, principalmente, en la fase de descubrimiento de nuevas moléculas terapéuticas químicas (60%), de nuevos biomarcadores (52%) o para el screening virtual (44%).
#VIDAALABIOTECNOLOGÍA
El congreso es el escenario en el que AseBio, ha presentado #VidaAlaBiotecnología a los más de 2.100 profesionales de más de 30 países y más de 100 inversores que se esperan en esta edición de 2023.
La iniciativa de AseBio tiene como objetivo concienciar y sensibilizar sobre la relevancia de la biotecnología en la sociedad, destacando la importancia de seguir invirtiendo en el sector para revitalizar la economía española. Esto pasa por construir un nuevo modelo productivo más sostenible y resiliente ante los grandes desafíos sociales y medioambientales a los que se enfrenta Europa.
La presidenta de AseBio, Ana Polanco, ha señalado que «la biotecnología está protagonizando grandes disrupciones con un gran impacto en la salud, la alimentación y la sostenibilidad del planeta. La apuesta como país por industrias estratégicas como la biotecnológica, no puede ser una cuestión a debate en la construcción de un futuro más resiliente».
«la biotecnología está protagonizando grandes disrupciones con un gran impacto en la salud, la alimentación y la sostenibilidad del planeta».
Ana Plonaco, presidenta de AseBio.
Por su parte, el director general de AseBio, Ion Arocena, ha indicado que «el camino hacia la autonomía estratégica de Europa pasa por aprovechar todo el potencial científico y tecnológico que nos ofrece la biotecnología. En el caso de España, es necesario reconocer la industria biotecnológica como un sector clave, así como desarrollar instrumentos específicos que aceleren la llegada al mercado de las innovaciones. Un objetivo que requiere una regulación acorde con la naturaleza y el impacto social y económico que tiene la biotecnología. Además, es crucial el fomento de la I+D mediante modelos colaborativos e incentivos que estimulen la inversión en las innovaciones disruptivas que genera la biotecnología».