La subida de las tarifas energéticas y la escalada en los costes de la materia prima han estrechado los márgenes del sector de los alimentos congelados, pese al incremento generalizado de los precios finales del producto. Un cambio en los hábitos de los españoles que vienen generados por la inflación y la situación tan precaria que se vive, después de unas vacaciones en las que los españoles han destinado gran parte de su dinero ahora toca encarar de la mejor forma septiembre y la vuelta al cole.
PRIORIZAR EL CONSUMO
Que se priorice el consumo de congelados es una buena oportunidad para las empresas del sector de los congelados, que de momento cuentan con un buen comportamiento, al no haber subido excesivamente el precio de sus productos, como sí ha marcado el contexto de encarecimientos de todos los alimentos frescos.
El sector del pescado y del marisco congelado ha capeado el temporal un año más pese a una coyuntura marcada por el alza de los costes de producción, la dificultad para acceder a algunas materias primas y el descenso del consumo, entre otros factores. Bien es cierto que el pescado es uno de los alimentos que más ha aumentado de precio pero que es necesario en nuestra dieta mediterránea.
LA CESTA DE LA COMPRA MÁS ECONÓMICA GRACIAS A LOS CONGELADOS
Los Informes del sector de la distribución revelan cómo la escalada sin precedentes de los precios de la cesta de la compra básica, especialmente de los alimentos frescos, que obligan a las familias españolas a buscar refugio en la sección de productos congelados del supermercado. Según la Organización de Consumidores y Usuarios, (OCU), los alimentos congelados son un 40% más baratos.
SI OPTAMOS POR VERSIONES CONGELADAS EL AHORRO PUEDE LLEGAR A SER MUY SIGNIFICATIVO
Antes de las vacaciones de verano las búsquedas de los productos congelados subieron, en concreto un 147% en los seis meses desde enero, según detallan fuentes de Tiendeo, un portal de folletos y ofertas en línea. Los consumidores cuentan que al consumir productos congelados pueden tener el producto almacenado sin necesidad de tener que consumirlo en un margen corto de tiempo. Esto permite distribuir el consumo en un rango mayor por lo que no se madurará en el refrigerador.
Tras las vacaciones la idea de ahorrar es primordial y el pescado es uno de los alimentos que más ha notado el aumento de precios. Un ejemplo muy claro es el salmón fresco que ya cuesta 14 euros y congelado en cualquier supermercado o cadena especialista en congelados no sube de los siete euros.
LA SIRENA, UNA OPCIÓN ‘PREMIUM’ PARA SEPTIEMBRE
La Sirena es la cadena líder en alimentos congelados, que continúa apostando por la innovación de productos, trabajando por ampliar su oferta saludable y sostenible. La marca española no cesa en su empeño de diseñar y lanzar soluciones al mercado con el objetivo de seguir posicionándose como la marca de referencia del sector, ofreciendo una amplia gama de productos a sus clientes que les permiten seguir con una alimentación sana y variada sin tener que renunciar al ahorro que ofrecen los ultracongelados.
La cadena cerró en 2022 con una facturación total de más de 175 millones de euros, un 15% más que en el ejercicio previo a la pandemia en 2019. Según explicó en su día la cadena de alimentos el aumento se debió a que se cuadruplicó el número de pedidos online, alcanzado los tres millones de euros en ventas a través de su propia página web. Incrementando los esfuerzos de la marca en su estrategia omnicanal.
Si decidimos optar por las versiones congeladas, el ahorro puede llegar a ser muy significativo. Más del 40% en el caso de las verduras, más del 38% en el caso de la merluza, el 13% en el atún y más del 20% en el pollo. Comprar estos alimentos congelados sale mucho más económico. Comparando precios vemos que un paquete de guisantes frescos nos va a costar el precio medio por kilo 20,25 euros y congelado 1,53 euros, una diferencia que supera el 90%.
Según un estudio de la OCU, las grandes cadenas de supermercados más baratas en lo que ha congelados se refiere son Alcampo, Mercadona y Aldi. Alcampo es el más barato y más en concreto en las verduras y pescados congelados. El Corte Inglés, en cambio, es la cadena de precios más caros en congelados. Cabe destacar que los precios del pescado son muy variables y varían mucho según la especie, el arte de la pesca y la estacionalidad, por lo que siempre está bien hacer una comparativa entre producto fresco y congelado, y también entre supermercados.