Tener una piscina privada en el hogar puede aportar varios beneficios y comodidades. Sin embargo, mantener la temperatura del agua y sus condiciones adecuadas puede implicar varios gastos y esfuerzos. Para facilitar esta tarea, una de las mejores alternativas son las mantas térmicas para piscinas.
Estos accesorios están diseñados para mantener el agua de la piscina en su lugar, a temperatura cálida y en óptimas condiciones, de manera ecológica y natural. Así lo recalca Swimhome, un distribuidor especializado en equipos e implementos para piscinas elaborados por las más destacadas marcas en el sector.
Accesorios fabricados a medida para preservar las condiciones de la piscina
Swimhome es un distribuidor especializado en equipos y accesorios para el cuidado de piscinas privadas, el cual cuenta con una extensa variedad de mantas térmicas para piscinas. Estos accesorios se confeccionan a medida de lo que requiere cada cliente, sin importar el tamaño o la forma de su piscina, ya sea de forma rectangular, ovalada, tipo riñón o con formas libres y personalizadas.
Los usuarios pueden configurar el diseño de la manta a su gusto, mientras que su confección se lleva a cabo con los materiales más avanzados en el mercado, fabricados por marcas ampliamente reconocidas en el sector. Esto garantiza una alta durabilidad y resistencia ante el sol, la sal y los productos químicos de la piscina.
Por otro lado, estos accesorios evitan la evaporación del agua a causa del sol, un factor que puede causar una pérdida de hasta 5 litros por metro cuadrado al día. Al mismo tiempo, captan y redistribuyen la radiación solar hacia el agua, para mantenerla caliente sin consumir electricidad. Además, inhiben el crecimiento de algas, lo cual ayuda a mantener la piscina limpia y, a la vez, reduce sus costes de mantenimiento.
Claves para utilizar correctamente las mantas térmicas para piscinas
Colocar y utilizar una manta térmica para piscinas es una tarea bastante rápida y sencilla, sin embargo, es imprescindible considerar algunas recomendaciones clave para extender su durabilidad, y aprovechar al máximo sus funciones. Una de ellas es almacenar este accesorio en un lugar oscuro, tapada con una cubierta de protección opaca y, de ser posible, en su enrollador correspondiente.
También es importante evitar colocar la cubierta a pleno sol o sobre la hierba, ya que esto puede contribuir a su deterioro. Además, cuando la temperatura del agua ronda los 28 grados, es recomendable quitarla de forma inmediata.
Por otro lado, al colocarla sobre la piscina, es crucial cerciorarse de que el lado liso apunte hacia el sol, mientras que el lado con burbujas debe quedar en contacto con el agua. Otra recomendación es que, después de aplicar un tratamiento de cloración en la piscina, no se debe colocar la manta térmica en contacto con el agua durante al menos 48 horas. Además, es muy importante no caminar ni tumbarse sobre la manta, ni se recomienda tampoco nadar debajo de ella.
Todas estas pautas ayudan a prevenir el deterioro de este accesorio y a extender significativamente su vida útil.
