El Euríbor, el principal indicador al que están sujetas la mayor parte de las hipotecas en España, ha marcado en estos días su nivel más bajo de la historia al acercarse a la barrera de 0,21% en negativo y la situación no tiene pinta de cambiar al menos en el corto plazo (la fecha es octubre). En otras palabras, la banca europea se acerca a su particular winter is coming, y la única solución (a no ser que se cambie la política monetaria existente) para afrontar el largo invierno será una fuerte concentración en el sector bancario, español y europeo.
En este punto, que a finales de año puede ser de no retorno (si el que debe ser el nuevo presidente del Banco Central Europeo ratifica las palabras del actual, Mario Draghi), las medianas y pequeñas entidades serán las principales perjudicadas y estarán abocadas a unirse o venderse al mejor postor. Sálvese quien pueda. Y claro, no hay nada que le guste más a un inversor, ya sea particular o institucional, que beneficiarse del despegue en las acciones que provoca una fusión bancaria. Por ello mismo, muchos de ellos han empezado a colocarse en el accionariado de distintas entidades, en especial las pequeñas y medianas (las que no tienen más remedio).
Un ejemplo de lo anterior es Unicaja, la entidad andaluza ha atraído a una serie de fondos importantes a su accionariado en los últimos días a medida que su cotización se hundía. De hecho, el pasado 18 de junio marcaba mínimos históricos (en su corta vida bursátil) tocando los 0,751 euros por acción, dos sesiones antes el fondo Santander Acciones Españolas, que es propiedad de la gestora de fondos de Banco Santander, Santander Asset Management, adquiría hasta 50 millones de acciones, superando el 3%, de la firma malagueña hasta convertirse en un socio de referencia.
Un día después de traspasar mínimos históricos, el fondo Invesco LTD compraba hasta 750.000 acciones del banco andaluz. Por su parte, un par de sesiones después de tocar mínimos históricos, otro gran inversor hacía un fuerte movimiento en favor de Unicaja. En este caso, la cartera DWS European Opportunities con sede en Alemania, de la gestora del Deutsche Bank, multiplicaba su inversión en la firma española tras comprar más de 6,2 millones de acciones. Por último, otras grandes firmas financieras como Blackrock, State Street o UBS han incrementado sus posiciones en lo que va de mes.
En total, los fondos han incrementado sus posiciones en cerca de 7,2 millones de acciones del banco español, mientras que ninguno de ellos reflejado ventas de títulos. Una situación que contrasta con lo ocurrido un mes antes, cuando el resultado neto de los movimientos de los mismos actores en mayo fue la venta de 454.850 títulos, lo que indica que los fondos han empezado a posicionarse de cara a futuros movimientos corporativos.
Por su parte, Liberbank, que era la otra parte en el principio de fusión, también ha registrado importantes movimientos en su capital. Así, en la última semana han incrementado su posición las mismas firmas que también lo han hecho en Unicaja: UBS, Blackrock, State Street o Deutsche Bank.
Los fondos han empezado a posicionarse en las entidades medianas, las más acuciadas por los bajos tipos, a la caza del próximo movimiento corporativo en el sector.
A LA CAZA DE UNA POSIBLE FUSIÓN ENTRE SABADELL Y BANKIA
Los ejemplos de Unicaja o Liberbank no son los únicos, puesto que otras entidades de mediano también han registrado movimientos por parte de diversos fondos por el atractivo de M&A en el sector. Uno de los casos más claro, lo vemos en Banco Sabadell, después de que Bestinver, una de las marcas más reconocidas en España, destinase el 2% de su fondo para invertir en la península a la compra de acciones de la firma catalana, debido a la posibilidad de una fusión con Bankia (incluso hablan de BBVA) como justificación de su movimiento.
De hecho, Sabadell y Bankia son los bancos, entre los grandes del Ibex, que más expuestos están a la caída del Euríbor, por lo que serían los más interesados en buscar algún movimiento corporativo para paliar los mínimos que en la actualidad está marcando el Euríbor. «Más del 50% de los ingresos de la firma catalana provienen del neto de intereses, a través del negocio enfocado en España (…) Por su parte, la alta participación de Bankia en los préstamos hipotecarios variables vinculados al Euribor también lo hace relativamente más expuesto a las tasas”, explican desde Bloomberg en relación a la nueva (que en realidad es la misma, pero más deteriorada) situación del sector.