Las compras online son ya una realidad entre la población. Muchos de los usuarios prefieren adquirir los productos o servicios a través de Internet que desplazarse a una tienda física.
Esto tiene sus ventajas, pero también sus inconvenientes. Aunque es cierto que no hay nada mejor que tener la posibilidad de hacerlo todo desde el sofá de nuestra casa, no hay que olvidar lo malo. ¿Qué ocurre si el producto que llega no es como el deseado? ¿Y si ni siquiera llega?
Al comienzo de las compras por Internet los usuarios apenas estaban protegidos. Sin embargo, actualmente, mucho más normalizado, los consumidores sí cuentan con la protección suficiente.
Organismos a los que puedes reclamar por tus compras online
Una compra a través de un comercio electrónico ya tiene las mismas garantías que una efectuada en un establecimiento físico. Pero, ¿cómo poner una reclamación por compras online?
Los Organismos encargados recomiendan extremar las preocupaciones y, en caso de duda, reclamar toda la información.
Servicio de Atención al Cliente
Lo primero que se recomienda en el caso de que el consumidor necesite efectuar una reclamación por su compra online, es acudir al Servicio de Atención al Cliente de la propia empresa.
De esta manera se pretende llegar a un acuerdo amistoso y evitar el papeleo y el tiempo que se pierde en acudir a Organismos superiores. Esto se debe hacer en el plazo de un mes desde que el cliente quiera interponer la queja. Se puede realizar por correo postal, vía telefónica o por Internet.
Oficina Municipal de Información del Consumidor
Si el cliente ha puesto la reclamación por sus compras online a la empresa y esta no se ha solucionado, puede acudir a la Oficina Municipal de Información del Consumidor. Esta actuará de mediadora para que la empresa reclamada pueda concederle una solución al consumidor.
Si la empresa no responde u ofrece una solución que no guste al cliente, la OMIC acudirá al arbitraje de consumo ya que no ha habido acuerdo entre las partes.
Juntas arbitrales de Consumo
En este Organismo se pueden resolver las incidencias o desacuerdos que aparezcan entre los clientes que han realizado sus compras online y las empresas. Esto queda al margen de los Tribunales de Justicia, por lo que es un proceso más rápido y sencillo.
Además, es gratuito y voluntario para ambas partes. Después de conocer el caso, el Colegio Arbitral será el Órgano encargado de dictar la resolución. Esta tendrá el mismo efecto que una sentencia judicial firme.
Asociaciones de Consumidores y Usuarios
Un ejemplo conocido de este tipo de asociación es FACUA. Esta se encarga de asesorar al consumidor sobre sus derechos. Además, le indica cuáles son las vías más indicadas según el tipo de reclamación que quiera efectuar por sus compras online.
A través de estas vías, se busca ejercitar los derechos del cliente así como exigir su correcto cumplimiento.
Centro Europeo del Consumidor
Si el consumidor ha realizado sus compras online en una empresa de un Estado que pertenece a la Unión Europea y no encuentra solución en los Organismos anteriores, puede ponerse en contacto con el Centro Europeo del Consumidor.
Este es una oficina pública que ofrece información y asesoramiento a cualquier cliente o consumidor que lo necesite.
Estas son las quejas más frecuentes
Las quejas más comunes que destacan cuando se realizan compras online están encabezadas por el hecho de que las características del producto no se corresponden con lo ofertado en un primer momento. A esto le sigue que el precio pagado no ha sido el indicado previamente en la web.
Otras de las quejas más frecuentes son el retraso en la entrega, problemas con la devolución, falta de garantías, etc.
Si has efectuado una compra online y no estás satisfecho con el resultado, no dudes en interponer la correspondiente reclamación para que la misma empresa o cualquiera de los Organismos mencionados procedan a ofrecerte una solución.
