Renta Corporación ha cosechado pérdidas durante los primeros seis meses del año a pesar de la subida del precio de los inmuebles durante el primer semestre de 2023, en el caso de la vivienda el alza se sitúa en el 6,3%. Concretamente ha registrado un resultado negativo de 3,1 millones de euros. Ese hecho ha provocado que su evolución en bolsa durante este ejercicio sea muy negativo, con caídas del 28,6% hasta los 1,21 euros, lejos de los 4 euros en los que llegó a cotizar en 2020, con una capitalización bursátil a día de hoy de 38 millones de euros.
La empresa lo justifica por el frenazo del mercado, que ya empezó a notar en el segundo semestre de 2022. Las condiciones macroeconómicas y geopolíticas, la inflación persistente y las reiteradas subidas en los tipos de interés -que alcanzan el nivel más alto desde 2008-, así como el incremento del precio de las materias primas, se han traducido en un aumento de los costes de construcción y financiación en el sector inmobiliario.
Todo ello ha conllevado un retraso en las decisiones de inversión, así como un desplome de las transacciones y del volumen de las mismas, impactando directamente en el margen de las operaciones del Grupo y en el resultado del período, que se sitúa en -3,1 millones de euros.
A pesar de ello, la compañía ha logrado unos ingresos de 30,6 millones de euros, con un margen de operaciones de 4,5 millones en el primer semestre. La cartera de negocio con la que cuenta la compañía a junio de 2023 es un 88% superior a la del cierre del ejercicio anterior. Asimismo, Renta ha conseguido reducir la deuda neta del grupo en un 34% durante los primeros seis meses del año.
A pesar del desfavorable contexto macroeconómico, la línea de negocio patrimonial sigue ganando peso dentro de la actividad del Grupo, favoreciendo una menor exposición de la compañía al carácter cíclico del sector e incrementando las fuentes de ingresos recurrentes, que en el semestre han ascendido a 3,4 millones de euros.
Por ello, Renta Corporación sigue impulsando con fuerza sus dos nuevas líneas de negocio: Wellder, socimi especializada en el sector sociosanitario y centros de tercera edad, y CABE, compañía de alquiler de trasteros urbanos, que ya suman un total de 10 activos adquiridos. Ambos vehículos complementan la línea que la inmobiliaria abrió en 2017 con el lanzamiento de la socimi Vivenio.
EL NEGOCIO PATRIMONIAL DE RENTA CORPORACION
Wellder, creada a finales del ejercicio 2022 con APG, ha adquirido su primer activo durante el primer semestre de 2023. La operación de compra ha supuesto una inversión de 7,5 millones de euros en la adquisición y remodelación de la residencia de mayores DomusVi Río Vena, ubicada en la ciudad de Burgos. El centro, que cuenta con 4.500 m2 y 98 habitaciones, está gestionado por uno de los principales operadores del sector en España.
El vehículo, del que Renta Corporación es gestora en exclusiva, nació con el objetivo de adquirir, en una primera fase, activos inmobiliarios en España por valor de 250 millones de euros, de alta calidad y elevados estándares ESG. Actualmente, cuenta con una cartera de inversión en estudio de 65,2 millones de euros compuesta por 8 activos, que suman alrededor de 1.200 habitaciones operativas.
Por su parte, CABE, el negocio dedicado al alquiler de trasteros, se posiciona ya como la novena compañía con mayor número de trasteros urbanos en España, con más de 8 trasteros operativos y un modelo de negocio diferencial marcado por una fuerte experiencia digital.
Desde su creación, el vehículo ha adquirido 9 locales ubicados en Barcelona y Madrid, y cuenta con una cartera de 14 activos más ubicados en otras ciudades como Zaragoza y Palma de Mallorca, considerando también la apertura de centros en nuevas localizaciones dada la alta escalabilidad del negocio. La compañía prevé cerrar el ejercicio con 15 centros operativos y otros tantos nuevos proyectos, iniciando una fase de fuerte proceso de expansión del negocio.
La compañía inmobiliarconcentra su foco de negocio en los mercados de Madrid y Barcelona, las dos plazas más líquidas y con más actividad en España. La compañía complementa su modelo de negocio a través de su actividad patrimonial, gestionando activos inmobiliarios de diferente naturaleza, tanto de su propiedad como de sociedades participadas.