Corren buenos tiempos para Mercadona. La cadena de supermercados es líder del mercado español con una cuota de mercado del 24,9% en 2018. Y su objetivo es seguir creciendo y para ello ha comprado terreno en Parc Sagunt (Valencia) para construir un macroalmacén que le sirva como lugar de almacenaje de todo su producto.
Allí la cadena de supermercados construirá un centro logístico que le permitirá seguir creciendo en la zona. Una inversión por todo lo alto que muestra el buen momento en que se encuentra Mercadona, apostando fuerte por una estrategia de crecimiento. El almacén estará completamente automatizado para que la logística sea más eficaz y rápida.
Una operación en marcha desde 2016
Mercadona comenzó a invertir en ese parque empresarial en 2016, cuando compró más de 350.000 metros cuadrados por un total de 24 millones de euros. En junio de 2017 invirtió otros 17 millones en la adquisición de otros 200.000 metros cuadrados, y ahora en 2019 ha comprado otras seis nuevas parcelas, de más de 136.000 metros cuadrados, en una inversión que supone casi 17 millones de euros.
El plan es crear un almacén automatizado que funcionará conjuntamente con el de Ribarroja. En total los dos macroalmacenes emplearán un millar de personas. Está destinado exclusivamente a pedidos online y en los planes de Mercadona está abrir 12 almacenes más de este tipo. El futuro es la venta por internet, directamente del almacén a casa.
Las colmenas de Mercadona
En Mercadona, este tipo de almacenes para las ventas por internet los llaman de la manera coloquial «las colmenas«. Hasta ahora, y al igual que se hace en otras cadenas de supermercados, los pedidos que recibían para llenar la cesta de la compra por Internet se servían y preparaban en la tienda más cercana al cliente.
Pero en toda la zona de Valencia, gracias a estos gigantescos almacenes, se preparan de manera mucho más rápida y robotizada los pedidos de los clientes que compran en el super online. La forma de funcionar es similar a la de empresas como Amazon, todo un referente en logística, o cadenas más grandes como Carrefour.
Futuros macroalmacenes de Mercadona
Sabiendo hacia donde evoluciona la logística, Juan Roig quiere que su empresa esté a la última en servicio al cliente. Así que los planes para estos macroalmacenes no terminan en Valencia. Durante este año y el siguiente se abrirán dos nuevas colmenas en Madrid y dos más en Barcelona.
Además, se abrirán más de estos almacenes automatizados en grandes ciudades como A Coruña, Bilbao, Zaragoza, Palma, Alicante, Murcia, Sevilla, Málaga y Las Palmas. No se conocen aún las fechas exactas, pero en los planes de Mercadona está apostar fuerte por este servicio directo al cliente.
Apostar por la presencia online
Mercadona se suma así a la tendencia de apostar por una mayor presencia en internet. Como el mismo Juan Puig decía hace un par de años «nuestra web es una mierda«. Y desde entonces apostó por una renovación al completo de la web y una mejora y facilidad en la venta de productos del super por internet.
Su nuevo proyecto online, para colocar a Mercadona en la cabeza del mercado de consumo, gira entorno a estos almacenes especializados con los que es mucho más fácil preparar los pedidos que llegan por internet. La nave de la primera colmena de Mercadona tiene 13.000 metros cuadrados y funciona como un reloj.
Un almacén que funciona de noche
A partir de las diez de la noche es cuando estas colmenas funcionan a todo gas. Los pedidos online se reciben durante 24 horas, pero se trabaja sobre todo de noche para tenerlos listos a primera hora del día siguiente. En los supermercados normales el trabajo empieza de día, pero todo cambia en estos almacenes especiales.
El ritmo es vertiginoso para preparar los 800 pedidos que reciben de media al día. Las cestas con los pedidos se empiezan a preparar a partir de las 10 de la noche para poder tenerlos todos a tiempo. Primero se seleccionan los productos secos envasados y a partir de las 3 de la mañana se añaden al pedido los productos frescos. Después se añade el pan y por último los congelados.
Pedidos siempre a tiempo en Mercadona
Con tanta rapidez y eficiencia se puede empezar a entregar los primeros pedidos en las casas a las siete de la mañana. Una opción muy cómoda para las familias que trabajan y tienen niños. Antes de ir al trabajo o de dejar a los niños en el cole ya está el pedido completo de Mercadona en casa. Las últimas entregas se hacen a las diez de la noche.
El pedido mínimo para la compra online en Mercadona es de 50 euros para que le compense al supermercado. Y el precio de preparar y gestionar el pedido, 7,21 euros. Un trabajador es capaz de hacer la compra de seis clientes más o menos en una hora. Una persona, en una especie de mula mecánica, recorre por todos los pasillos y prepara seis cajas de pedido.
Unos almacenes para perderse
Los almacenes en el polígono de Vara de Quart de Valencia son gigantescos. Además de la zona donde están los productos alimenticios, hay una zona de servicios generales (informática, atención al cliente, etc). También hay un pequeño estudio de fotografía donde se toman imágenes de los productos para ser colgados en la web. Todo esto está situado en la planta de arriba.
En la planta de abajo es donde están todas las estantería con productos y un muelle de entregas. Un proyecto con una inversión cercana a los 12 millones de euros y que empezó a funcionar en mayo. Aquí trabajan 160 personas. Este almacén será todavía más grande en el nuevo macroalmacen en Parc Sagunt.
Un sistema que se expandirá
Estos macroalmacenes de Mercadona son aún un experimento, que será extrapolado a otras poblaciones. Estos almacenes que ya están en funcionamiento sirven a 97 poblaciones valencianas. Desde mayo van introduciendo cambios al sistema para depurarlo y hacerlo aún más eficiente.
Se trata de crear el modelo que copiar en los futuros macroalmacenes que se construirán por toda la península. El objetivo es que la venta online sea rentable, para que también en este mercado Mercadona sea líder. Aunque lo que da dinero es la tienda física, hay que seguir apostando por este campo, a pesar de la fuerte inversión que hace falta.