El arrendador y el arrendatario es una relación que se basa en la confianza. En el periodo de tiempo estipulado por ambas partes pueden surgir ciertos inconvenientes que pueden provocar enfados. La Ley de Arrendamientos Urbanos pretende poner un poco de orden.
Uno de los objetivos que tiene el inquilino es dejar la vivienda tal y como estaba antes de finalizar el contrato de alquiler. De lo contrario, el propietario tiene derecho a quedarse con la fianza para cubrir los daños ocasionados.
La subida del precio del alquiler hace que se origine una disputa. Puede provocar que el inquilino busque otra vivienda más económica. Los expertos indican que no se puede destinar más del 35% del salario de los ingresos mensuales.
SITUACIÓN ACTUAL DEL ALQUILER
La nueva Ley de Vivienda obliga a que el propietario tenga que avisar al arrendatario que va a subir el alquiler. De lo contrario, será inválido. Con esto se busca evitar los aumentos que muchos casos tenía como objetivo presionar al inquilino a que se marche.
El precio en España ha subido un 9,2% durante el último año, marcando máximos en 25 capitales, según el informe publicado por idealista.
Barcelona es la capital más cara para alquilar una vivienda, con 18,7 euros/m2, seguida por Madrid (16,8 euros/m2) y San Sebastián (15,9 euros/m2). En cuarto lugar, se sitúa Palma (14,4 euros/m2) y ya en quinto lugar está Bilbao (13,1 euros/m2). En la parte baja de la tabla, encontramos a Ciudad Real, Lugo y Zamora (6,2 euros/m2 en los tres casos), Cáceres (6,3 euros/m2), Ávila (6,3 euros/m2) y Ourense (6,4 euros/m2). También han sido relevantes las subidas registradas en Santa Cruz de Tenerife (19,9%), Málaga (18,9%), Alicante (17,3%), Valencia (16,6%), Huelva (15%) o Cantabria (12,4%).
Zamora es la provincia más económica para alquilar una vivienda (5,6 euros/m²). La menor subida es la registrada por Cáceres (0,4%), seguida por Palencia (1%) y Lugo (1,1%
LOS DEBERES DE CADA UNO
- El inquilino debe hacerse cargo de las pequeñas reparaciones que exija el desgaste por uso ordinario de la vivienda. En el caso de que quiera realizar modificaciones, deberá contar con el consentimiento por escrito del propietario. Y deberá devolver la casa de la misma manera que estaba cuando la alquiló, a excepción de que el casero diga lo contrario. En caso del inquilino no cumpla con su deber, el propietario estará en pleno derecho a finalizar el contrato de alquiler.
- El casero: En el momento de firmar el contrato de alquiler, el propietario cede su derecho a su inquilino, lo que significa que no podrá entrar en la vivienda sin la autorización previa. Es responsable del deterioro de todas aquellas reparaciones necesarias para mantener el inmueble en perfectas condiciones de habitabilidad. Es decir, las averías referidas al paso del tiempo y no del uso de la vivienda.
CONSEJOS PARA MEJORAR LA RELACIÓN ENTRE ARRENDADOR Y ARRENDATARIOS
Es complicado acceder a la vivienda, y cuando se consigue existe la posibilidad de que no demos con el inquilino o el propietario adecuado. Estos consejos pueden ayudar a mejorar esa relación.
- Prestar atención: La relación entre el arrendador y el arrendatario debe ser buena, no es necesario que sean amigos, pero sí podría ayudar una buena comunicación y atención. Si el propietario está pendiente de resolver los problemas que puedan surgir al inquilino, es probable, que este cumpla con su parte correspondiente.
- Contar con un contrato de alquiler: Es necesario que el alquiler sea recogido en la Ley de Arrendamientos Urbanos. Aquí es donde se reconocen los derechos y obligaciones de ambas partes.
- Contratar un seguro de solvencia: Este seguro garantiza al arrendador de la vivienda recuperar las rentas impagadas y en caso de que el inquilino haya ocasionados desperfectos, recompensar por los daños.
- Responsabilidad por ambas partes: La tendencia es pensar que el propietario tiene que buscar un inquilino fiable, y es cierto, pero también es necesario que el arrendador cumpla con sus responsabilidades legales.
- Hacer un inventario del inmueble: Es un documento que se realiza durante un arrendamiento para registrar detalles muy precisos sobre las condiciones del estado físico. Ambos podrán comprobar el funcionamiento de las instalaciones y conseguirán una relación más sincera.
ANTE LAS ADVERSIDADES
Como todas las relaciones existen baches. En el caso del arrendador y arrendatario puede verse afectada por una subida de precios, o por una falta de cuidado en la vivienda. Lo más importante es encontrar a la persona indicada para evitar problemas, pero si surgen hay que mostrar empatía con la otra parte y saber resolverlo de la mejor manera posible.