La sostenibilidad empresarial no solo trata del cumplimiento de las leyes y normativas relacionadas con la energía. Hay que verla en una perspectiva más amplia, en la que todos los procesos críticos de producción diaria para la supervivencia de la empresa sean realizados de manera respetuosa con el medio ambiente. Esto no solo habla de la carencia de materias primas no renovables o de la generación de energías limpias, sino también de la producción propia y de la estrategia de consumo de la empresa.
Es importante comprender que una empresa es un ecosistema en sí misma, en el que todas sus actividades afectan a su entorno y en ocasiones, también influyen en la gran cadena ecológica global. Vale recordar que hablar de sostenibilidad empresarial es abordar el tema desde un punto de vista muy íntegro. Las microacciones que realice la compañía pueden significar mucho para lograr un estilo de vida puramente sostenible, para la preservación de los recursos y la reducción del daño ambiental producido por su operatividad.
Índice
Gestionar la energía para conservar el medio ambiente
Es imprescindible que las empresas se responsabilicen de la cantidad de energía que consumen y su procedencia. La buena noticia es que, gracias al avance de la tecnología, existen la oportunidades de utilizar la energía de forma limpia. Esto significa usar recursos renovables, como la energía solar, la eólica, la biomasa o la geotérmica, para su producción. Así, se pueden recortar los gastos, la emisión de CO2 y la contaminación del aire. Estas prácticas también se utilizan para la extracción y purificación de agua, para la cual últimamente se propone el uso de energías renovables, en conjunto con procesos de reciclaje y limpieza.
Adicionalmente, la tendencia actual consiste en la reducción de la demanda de energía. Esto se logra implementando una gestión eficiente de la misma. El ahorro de energía se puede conseguir a través de conductos y aislamiento de materiales, utilización de materiales que posean baja emisión de energía, el uso de dispositivos que se autoapaguen, el uso de sistemas de ventilación digital o la regulación de la temperatura ambiental. Todos estos procesos garantizan un menor consumo, lo cual significa menores gastos, menos presión sobre los recursos naturales y, eventualmente, menos contaminación.
Programas de eficiencia energética
Las empresas también pueden fomentar programas de eficiencia energética en sus sistemas y procesos productivos. Esto no solo implica el uso de dispositivos con alto nivel de eficiencia y la mejora de la estructura física de la organización, sino también el mantenimiento de los equipos industriales, la mejora de la producción así como la optimización de los tiempos de ciclo. Como resultado, se logra un mejoramiento en la eficiencia, la productividad y la calidad de la energía, reduciendo costos de desempeño y mejorando las medidas de seguridad.
Las empresas también pueden hacer uso de programas de apoyo energético. Estos ayudan a mejorar el uso de la energía a través de la educación y el entrenamiento en materia, de la puesta en funcionamiento de soluciones tecnológicas y de la optimización de la infraestructura. Estos beneficios también permiten un uso eficiente de la energía, mientras que la información obtenida a partir de tales programas ayudan a las empresas a realizar mejores diagnósticos.
Manejo de los residuales
Es fundamental que una empresa conozca los riesgos ambientales a los que se enfrentan, así como los procesos y las actividades que los generan. Esta información ayuda a comprender los procesos de producción en profundidad y a convertir el manejo de los estados residuales en un asunto estratégico.
La generación de desechos se reduce cuando se controlan los procesos y se emplean nuevas tecnologías de producción eficiente. Esto implica la implementación de mecanismos de reciclaje, que permitan reutilizar los materiales usados en la producción que, de otra manera, serían desechados.
Por otro lado, la buena gestión de los residuos es igualmente importante para lograr una mayor sostenibilidad empresarial. Desde la prevención hasta el tratamiento y almacenamiento de desechos domésticos e industriales, un programa eficaz de adecuación de los residuos contribuye al cuidado del medio ambiente. El uso de procedimientos adecuados para su descontaminación y posterior reincorporación a la cadena productiva son fundamentales para la conservación del medio ambiente.
Además de la energía, cuáles son los recursos esenciales a considerar
Cuando hablamos de sostenibilidad empresarial debemos tener en cuenta que además de la energía hay otros recursos que componen el modo en que funciona una empresa. Estos recursos incluyen el agua, los materiales, los alimentos, los productos, el capital humano y la diversidad cultural.
La gestión de los recursos naturales debe abordarse desde varias perspectivas. Por una parte, debemos prestar especial atención a los impactos que la actividad empresarial genera sobre los recursos naturales, para asegurar la conservación de suficientes partes en los ecosistemas, así como el sostenimiento de las mismas para la existencia futura. Por otro lado, la gestión responsable de cualquier recurso empresarial debe centrarse en la defensa de la salud, la seguridad y los derechos de la comunidad, y en la responsabilidad con el medio y los seres humanos que trabajan en su entorno.
Adicionalmente, debemos tener en cuenta que para generar fuentes de energía limpia hay que asegurarles una disponibilidad suficiente. Esto significa que hay que controlar los gastos, la producción y la distribución de los recursos. Desde la utilización de recursos renovable, hasta la fabricación de productos energéticamente eficientes, todos estos pasos contribuyen a asegurar que la empresa no genera daños al planeta.
La Innovación como herramienta clave para la sostenibilidad empresarial
La sostenibilidad empresarial es cada vez más importante para satisfacer la creciente demanda de recursos naturales. Investiga las empresas buscan ofrecer productos y servicios mejorados, que no solo satisfaga sus clientes, sino que también mejore la calidad de vida de sus empleados y contribuya al entorno de una forma benigna. Esta innovación tecnológica proporciona al mundo nuevas soluciones para una eficiencia energética más eficaz.
Las empresas deben participar activamente en el desarrollo de productos innovadores para asegurar, la sostenibilidad empresarial. Esto significa llevar a cabo investigaciones para soluciones innovadoras, como el uso de herramientas de optimización de eficiencia, la mejora de la producción, la reducción de los residuos o el uso de energías renovables.
Además, las empresas deben fomentar la comunicación entre sus empleados, clientes y proveedores para determinar los puntos fuertes de la misma y encontrar nuevas formas de mejorar sus productos