Es común que muchas localidades españolas compartan límites con países vecinos. Ya sea en el norte, colindando con Francia, o en el oeste, junto a Portugal, estas poblaciones viven en un entorno internacional que ha dejado huella en su historia. Esta circunstancia les otorga particularidades interesantes y les permite entrelazar sus costumbres con las de las regiones vecinas. Aparte de las impresionantes ciudades de Ceuta y Melilla, ubicadas en África y que merecen una visita obligada, te queremos sugerir algunos fascinantes pueblos fronterizos de España.
1HONDARRIBIA, EN GUIPUZKOA
A lo largo de los siglos, Hondarribia ha sido un enclave de gran importancia estratégica. Inicialmente, fue la salida marítima de Navarra y posteriormente se convirtió en frontera con Francia. Como resultado, este pintoresco pueblo fronterizo ha sido objeto de numerosos asaltos a lo largo de su historia.
Durante el reinado de Carlos I, se realizaron importantes mejoras defensivas en la localidad, pero su momento más destacado ocurrió en 1638, cuando resistió un asedio por parte de las tropas francesas durante dos meses. Se dice que durante ese tiempo, tuvo lugar una aparición mariana, y esta hazaña se conmemora anualmente con el llamativo «alarde» de Hondarribia.