El arte de pintar por números, también conocido como pintura con número, es una forma atractiva e interesante de crear o desarrollar impresionantes piezas u objetos de arte. Consiste en pintar o colorear un dibujo o imagen prediseñados basándose en un número concreto que se asocia o corresponde con un color específico. Las ilustraciones pueden ser obras únicas o diseños abstractos creados para el objetivo y propósito de la actividad de pintar con números. En caso contrario, la imagen o dibujo puede incluir una reproducción de obras preexistentes y conocidas, tanto es así que pueden hacerse reproducciones de obras famosas para pintar por números con diseños de artistas de renombre como Van Gogh, Picasso o Monet, entre otros.
¿Qué entendemos por pintar por números?
El concepto de pintar con números puede venir presentado en varios formatos y estilos. De eso va a depender, por ejemplo, la superficie sobre la que se realice el dibujo o el tipo de pintura. En los últimos años se ha hecho muy popular el formato de pintar por números sobre lienzo de lino, el cual puede ir enrollado o estirado sobre un bastidor de madera como los cuadros tradicionales. En este caso, los cuadros para pintar por números suelen venir con un kit que contiene todos los elementos y objetos necesarios para realizar y completar la obra de arte desde el principio hasta el final. Por lo tanto un kit de pintar por números incluirá los pinceles y pinturas, cada uno con etiquetas para facilitar su comprensión y uso.
Los usuarios de aficionados a pintar cuadros con números tienen que elegir el color que corresponde a un número concreto y rellenar el área determinada con ese tono de color específico. El proceso se asemeja a un libro de colorear para niños. Sin embargo, se realiza a mayor escala, a veces con el uso y la aplicación de un lienzo. Pintar con números es una actividad manual que libera del estrés mientras permite desarrollar piezas de arte fascinantes.
¿Cuál es la historia de la pintura con números?
La ingeniosa idea de la pintura con número surgió por primera vez de la mente de Dan Robbins, un artista comercial que producía y vendía sus obras de arte en Detroit. Inició su carrera trabajando en el departamento de arte de varios fabricantes de automóviles. A partir de ahí, adquirió experiencia con las pinturas y desarrolló sus habilidades en este campo.
La idea y el concepto de pintar con números se le ocurrieron a Dan Robbins cuando quiso reproducir el singular sistema de enseñanza iniciado por el célebre artista Leonardo da Vinci. Consistía en numerar secciones y partes de los lienzos para que los aprendices y principiantes pudieran completar las obras y adquirir conocimientos y habilidades a medida que terminaban sus tareas.
Leonardo da Vinci utilizaba el sistema de pintar por números para retar a sus alumnos a completar tareas creativas. El primero proporcionaba al segundo patrones numerados que sugerían los lugares en los que debían rellenarse determinados colores. Abarcaba incluso el fondo preliminar y los matices de la pintura subyacente. De este modo, da Vinci no tenía que prestar toda su atención a los aprendices, permitiéndoles pintar una obra significativa sin ayuda externa. Este enfoque atrajo a Robbins, lo que le permitió desarrollar el concepto de las pinturas por números.
La comercialización y venta de kits basados en la propuesta e idea de pintar por número comenzó cuando Robbins se asoció con Max Klein, propietario de Palmer Show Card Paint Company. El primero empezó a trabajar en la empresa del segundo en 1949. Al principio, Robbins consiguió un trabajo como ilustrador y tuvo que desarrollar libros infantiles. Sin embargo, se encontró en un aprieto cuando Klein le encargó una misión urgente y significativa: vender y comercializar más pintura al gran público. La solución que construyó Robbins pasaba por idear y promocionar un kit de pasatiempos que incluyera los productos de la empresa y diseños numerados.
A Klein le gustó la idea propuesta por Robbins, lo que llevó a la venta de los kits de pintar por números en 1950, tras varias correcciones y mejoras. El resultado fue la venta de más de 12 millones de estos artículos, que se convirtieron en los favoritos de un amplio abanico de personas. Para desarrollar cada kit de pintar por número, Robbins comenzó creando y pintando obras de arte originales. A continuación, colocaba una lámina de plástico limpia sobre la pintura y delineaba o trazaba las formas para designar cada tono y matiz. A cada segmento le asignaba un número concreto y lo asociaba a un color específico.
¿Cómo respondió el público a la idea de pintar por números?
Los kits de pintar por números, que salieron a la venta después de la guerra, atrajeron al pueblo estadounidense, que disponía de mucho tiempo libre para realizar actividades lúdicas como el presentado por la técnica de pintar con números. Rápidamente se convirtió en un aspecto de su vida cotidiana e incluso en un fenómeno cultural.
La idea y el producto de pintar con número se vendió a numerosas personas bajo la dirección y supervisión de Palmer Show Card Paint Company. Jacquelyn Schiffman, hija de Max Klein, presentó los archivos y registros de su empresa al Museo Smithsonian de Historia Americana tras su fallecimiento en 1993. Esto permitió que personas de todo el mundo conocieran la atractiva actividad de las pinturas por números y a las personas que la desarrollaron.
¿Qué ha ocurrido con la técnica de pintar por números después de los años?
Hoy en día, pintar por números es una actividad que practican y disfrutan personas de distintas edades en todo el mundo y también se ha hecho muy popular en España. Es posible adquirir kits completos de cuadros para pintar por números tanto online como en tiendas. Además también es posible hacerlo de forma virtual ya que varias aplicaciones y juegos virtuales ofrecen pintar con números a un amplio abanico de personas interesadas en pasar el tiempo haciendo algo que merezca la pena y sea creativo a la vez que entretenido.