Los peores temores se confirman: está a punto de producirse una segunda ola de calor, más intensa que la de junio y con temperaturas que alcanzarán los 45 grados centígrados. Es ‘lo que toca’ dentro de este verano tan peculiar, donde en cualquier momento podemos pasar de las tormentas al calor extremo. Si tienes pensado desplazarte el próximo fin de semana o quieres saber en qué zonas subirá más el termómetro, presta atención a lo que te contamos aquí.
1LAS OLAS DE CALOR SON CADA VEZ MÁS FRECUENTES
En los últimos años hemos sido testigos de un aumento en la frecuencia e intensidad de las olas de calor durante el verano, períodos de calor extremo propiciados por el cambio climático. El aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero ha provocado un calentamiento global que altera los patrones meteorológicos, por lo que las altas temperaturas se vuelven más comunes debido a la acumulación de calor en la atmósfera.
Además el cemento y el asfalto retienen el calor, creando islas de altas temperaturas en áreas urbanas densamente pobladas. La deforestación también juega un papel importante, dado que los bosques actúan como reguladores naturales del clima al absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno. Con menos áreas boscosas, se reduce la regulación de la temperatura y mayor probabilidad de una ola de calor.
