Banco Santander acometerá este fin de semana la integración tecnológica en su red de las oficinas procedentes de Banco Popular en la Comunidad de Madrid, Castilla y León y Extremadura, tres regiones que en conjunto suman 365 sucursales.
Según fuentes del Santander, se trata de la séptima y probablemente penúltima oleada de integración. Aunque en un primer momento se anunció que el proceso se ejecutaría en nueve oleadas, la buena evolución de las fases anteriores permite anticipar que finalmente se llevará a cabo en ocho, pues a partir de la próxima semana Andalucía sería la única Comunidad pendiente de la integración.
La próxima semana operarán bajo los sistemas de Santander un total de 1.315 oficinas procedentes de Popular
De esta forma, a lo largo del fin de semana (14-16 de junio) un total de 365 oficinas de Madrid, Extremadura y Castilla y León se sumarán a las 950 sucursales de Banco Popular que la entidad ya ha integrado.
De esta manera, a partir de la próxima semana operarán bajo los sistemas de Santander un total de 1.315 oficinas procedentes de Popular, lo que representa alrededor del 83% del total de 1.584 oficinas de la entidad que el grupo presidido por Ana Botín adquirió en junio de 2017 tras su resolución.
Desde el banco prevén que la octava y última oleada (si todo sale bien) se lleve a cabo el fin de semana de entre el 12 y el 14 de julio, momento en que se dará por finalizado el proceso de integración tecnológica.
Una vez termine dicha fase, podrá empezar a ejecutarse el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la entidad está negociando con los sindicatos. El principio de acuerdo alcanzado el jueves contempla el cierre de 1.150 oficinas, la extinción de 3.223 puestos de trabajo y prejubilaciones desde los 55 años con entre el 75% y el 80% del sueldo, en función de la edad.
PRIMERO LA INTEGRACIÓN DE OFICINAS, DESPUÉS EL ERE
Banco Popular desapareció como entidad jurídica el pasado mes de septiembre, momento en que todas las oficinas pasaron a añadir en sus rótulos la firma Santander. La intención es que las marcas Popular y Pastor desaparezcan, pero no es hasta que se completa la integración tecnológica en una oficina cuando el grupo cambia el cartel de la sucursal por el del resto de oficinas de Santander.