El Gobierno tiene claro que atacar el flanco de la banca le puede reportar réditos electorales y mantiene la presión sobre las entidades financieras, como ya hizo con el caso de los expedientes de regulación de empleo emprendidos por Caixabank, BBVA y Banco Sabadell. Entonces hubo diversas manifestaciones del Ejecutivo para que se redujeran las bajas previstas y hubiera buenas condiciones. En esta ocasión el tema son los depósitos. La vicepresidenta y ministra de Economía, Nadia Calviño, lanzó este mensaje en el tradicional seminario de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).
UN MENSAJE CLARO
«El sector bancario español tiene que hacer que la subida de los tipos de interés también suponga un beneficio para los españoles». Este fue el mensaje que lanzó la ministra de Economía al sector financiero, con cuyas patronales analizará a finales de junio la marcha de la ampliación de los «Códigos de buenas prácticas. Ocurre que, además, el Ejecutivo pondrá sobre la mesa la necesidad de que la banca remunere los depósitos de los clientes, que se quejan de que los tipos han subido, y con ellos lo que pagan por los préstamos, pero no así, en muchos casos, los depósitos. De hecho, hay entidades que no pagan nada por ellos, entre las cuales se encuentran Caixabank, Banco Santander, BBVA, Banco Sabadell y Unicaja. Bankinter tiene un depósito en dólares.
Calviño defendió el impuesto extraordinario con una medida que contribuye a un reparto justo de las cargas que ha traído las repercusiones económicas de la invasión de Ucrania. «Aunque el impuesto recorta los beneficios que tiene la banca, las entidades financieras no tienen ningún problema por ello para canalizar crédito y prestar servicios financieros. La banca dispone de una enorme liquidez, beneficios y dividendos y cuenta con capacidad para hacer las dos cosas, programas de apoyo y cumplir con su función de modo rentable», aseguró. El impuesto tiene carácter transitorio, pero «haremos una revisión del mismo», en el sentido de evaluar, y tomaremos una decisión».
«Aunque el impuesto recorta los beneficios que tiene la banca, las entidades financieras no tienen ningún problema por ello para canalizar crédito», DIJO NADIA CALVIÑO
El mensaje lo expuso Calviño delante del presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, que escuchó la petición de Calviño, al igual que escuchó a la vicepresidenta defender el impuesto temporal a la banca, que no aclaró si apuesta por hacer permanente este impuesto como piden desde el ámbito de Sumar. La propia Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en un foro organizado por UGT, no descartó que el Gobierno convierta en permanentes los impuestos a grandes fortunas, banca y empresas energéticas.
LA VISIÓN DE TORRES VILA
Por su parte, Torres Vila remarcó que los bancos no remuneran los depósitos de modo generalizado porque hay una situación de exceso liquide. Ahora que suben los tipos no retribuimos, pero tampoco repercutíamos los tipos a los clientes cuando estaban en negativo». «No es una cuestión de competividad», en relación a que pueda ser un efecto de que haya poca competencia en el mercado., dijo el número uno de BBVA, que vino a decir que mientras siga está situación, la política, en general, de la banca, será no retribuir. «Los que quieran sacar provecho a su dinero y quieran invertir, cuentan con alternativas como la renta fija», afirmó Torres.
El presidente de BBVA remarcó su postura contraria al impuesto a la banca. «Mantengo una opinión negativa del impuesto a la banca. Es un impuesto que frena, que no ayuda al sistema circulatorio de la economía, a dinamizar la economía».
Torres Vila repasó la transformación de la economía española en los cuarenta años de andadura del seminario. “Durante este tiempo, han cambiado muchas cosas. La economía y la sociedad española han vivido una profunda transformación”, señaló.
Torres Vila repasó la transformación de la economía española en los cuarenta años de andadura del seminario de la apie
Carlos Torres Vila repasó el proceso de cambio, especialmente desde la incorporación de España a las Comunidades Europeas a mediados de los años 80 y la consecuente consolidación de la apertura al exterior de la economía, que ya estaba en marcha, y que continuó en la siguiente década con la internacionalización de las empresas españolas.
En concreto, dijo que “en los últimos 40 años, y a pesar de la gran crisis financiera de hace más de una década, el crédito concedido por la banca en España, como parte de su actividad principal de intermediación, es decir canalizar ahorro hacia el crédito, ha aumentado el PIB per cápita más del 20%”, según una estimación realizada por BBVA Research. Esta actividad también ha tenido un impacto muy positivo en la productividad por hora trabajada (+31%), la inversión (+27%) y el consumo privado (+11%).
LA MEJORA DEL PIB
El presidente de BBVA hizo una radiografía del cambio económico y social en España en estas cuatro décadas. Carlos Torres Vila ha revisado indicadores como las exportaciones, que se han más que duplicado en 40 años y representan más del 40% del PIB actual. También ha mencionado el aumento del PIB per cápita en el periodo, que casi se ha duplicado en términos reales desde 1983 hasta los 25.000 euros en la actualidad; el incremento de la esperanza de vida, desde los 76 hasta los 83 años; y el crecimiento de los trabajadores en activo han pasado de 12 a más de 20 millones, de los que las mujeres son ahora el 47% frente al 29% hace cuatro décadas.