Alberto Ruano es el CEO de Lenovo España desde junio de 2016. El anuncio de su nombramiento era previsible, teniendo en cuenta su consistente trayectoria en el mercado español de la informática y el hecho innegable de que durante su etapa anterior en Toshiba consiguió que el fabricante japonés se mantuviese muy por encima en España de lo que lograba en ningún otro país. Ahora, en una compañía mucho más vigorosa, se le ve más confiado que nunca. En la entrevista que mentenemos en el marco del Mobile Word Congress mantiene, inmutable, uno de los elementos tradicionales de su discurso desde hace años: La necesidad de que el cliente valore la calidad y esté dispuesto a pagar precios más elevados para conseguirla. El ‘low cost’ nunca ha sido lo suyo…
P. ¿Cómo ves la feria en la que habéis lanzado la nueva versión de Moto G?
Lenovo y Motorola tienen cada vez más convergencia de clientes y clientes comunes. Somos una de las empresas que más podemos disfrutar de la feria. Estos días hemos estado con muchos clientes de empresas que nos demandan smartphones para sus compañías y ha sido uno de los puntos más importantes estos días, independientemente de los productos que hemos lanzado.
P. Es la feria del móvil y en diciembre ya dijiste que la compañía empezaría a vender móviles en el segmento empresarial y a administraciones. ¿Cómo os va?
En España hay como unas 600 empresas de más de 1.000 empleados y luego compañías globales que trabajan en muchos países. Venimos ofreciéndoles móviles desde enero y estamos teniendo mucha demanda. Parte de que el negocio crezca en smartphones se va a deber al segmento empresarial, que nos va a dar muchas alegrías. En los tres días que llevo aquí muchísima gente de empresas nos está pidiendo teléfonos. Nuestros compañeros de Motorola serán los que nos tengan que ayudar a llevar los mejores teléfonos a cada compañía. Estamos gratamente sorprendidos.
P. Lenovo siempre ha podido ofrecer configuraciones muy a medida para las empresas. ¿Cómo se traslada eso a los smartphones que tienen un catálogo menos flexible?
Lenovo tiene un portfolio de producto enorme. No es casualidad que lideremos desde hace tres años. Tiene una cartera de productos muy abierta y asombrosa. En el trimestre pasado hemos hecho 150 configuraciones diferentes a medida sólo en Iberia. En telefonía las cosas no son tan flexibles, pero tenemos una cartera lo bastante amplia para cubrir las necesidades de las empresas. A los clientes les gusta la marca Motorola, tiene para ellos un cierto componente de nostalgia. Despierta ilusión. No tendremos la flexibilidad el PC pero es una oportunidad importante que ha aparecido ahora y que Lenovo tiene que liderar.
P. ¿Esa tendencia la ves también en administraciones públicas?
¡Si los más interesados son las administraciones! En el Mobile World Congress son quienes más han pedido que nuestros comerciales y técnicos vayan a verlos. Más incluso que la empresa privada. Todo esto forma parte de nuestros objetivos comerciales desde el 1 de enero.
En el mercado profesional la educación nos supone el 25%, y esperamos que sea uno de los sitios donde más crezcamos.
P. En un entorno de reducción de gasto pueden encajar bien los productos de la gama Moto G, con buena relación calidad precio…
Me da pena que, con la tecnología que hay, hablemos de productos ‘commodity. Si la gente supiera cuánto I+D y cuanto dinero invertido detrás de cada máquina…
P. Ahora misma la parte de móviles e informática opera por separado. ¿Habrá más convergencia?
Es algo que tienen que ver nuestros mayores. Lo que sí es un gran paso es que la división de informática pueda distribuir y vender a sus clientes. ¿Qué vendrá después? No lo sé, pero el primer paso ya lo hemos dado.
P. Lenovo está funcionando especialmente bien en el segmento de convertibles. ¿Cómo lo ves?
Con Yoga tenemos ya un 64% de la cuota de mercado. Queremos que la gente los llame ‘Yoga’ y no ‘convertibles’. Estamos creciendo mucho en grandes superficies, y otra de las grandes alegrías es que la semana pasada fuimos número uno en gaming, un segmento de más alto valor. En tabletas estamos lanzando productos más resistentes. Lenovo, cuando era reconocida como una marca muy profesional, ha sabido reinventarse y atacar mejor el mercado de consumo. El reconocimiento de marca que estamos viviendo no deja de crecer. El Lenovo de 2017 y 2018 va a hacer historia.
P. Precisamente las grandes superficies han sido siempre un reducto del portátil simplemente barato…
La sociedad ha madurado y para muchos clientes es ya su segundo, tercer o cuarto portátil. Antes eran usuarios de informática sólo los trabajadores de empresas, ahora han pasado a formar parte del día a día de muchas más personas. Hemos pasado a una fase en la que el usuario ya quiere calidad, no sólo precio. A partir de cierto punto la gente quiere un buen equipo, con una buena pantalla OLED o duración de un día de batería.
En entrada de gama el mercado decrece y avanzan las prestaciones medias-altas. La gente siempre quiere mejorar. Empiezas con lo básico y luego vas a mayor calidad.