“El PP no gobierna”. Esta frase de una fuente del sector financiera muestra el camino de prudencia que, salvo sorpresa, va seguir la banca en el contexto actual. No habrá pronunciamiento público por más que el candidato del Partido Popular a presidir el Gobierno, Alberto Núñez Feijoo, tenga muchas opciones de ser el próximo presidente del Ejecutivo y haya hecho un claro guiño a las entidades españoles afectadas por el impuesto extraordinario fijado por el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez. La realidad es que el Gobierno está en manos del Partido Socialista y hasta que no esté claro quién llevará el mando de la nación, la banca, no moverán ficha, no hará peticiones, según estiman fuentes financieras. En este momento, las entidades financieras guardan silencio. No se quieren pronuncian sobre Feijoo y tampoco sobre lo que pueda hacer el político gallego con el impuesto a la banca. Fuentes de los cinco bancos más importantes de España y de las patronales del sector han preferido no hacer valoraciones se han expresado de la misma manera cuando MERCA2 ha pedido su opinión sobre lo que esperan de Feijoo en relación al impuesto a la banca.
DE LAS MULTITUDES A LA ACCIÓN
Frente a baño de masas que se dio Alberto Núñez Feijoo en el Cercle de Economía de Catalunya, donde el presidente del PP jugó en casa, la banca no quiere manifestarse sobre lo que puede pasar con el impuesto que les colocó Pedro Sánchez, y que en ámbitos empresariales esperan que Feijoo derogue si consiga llegar a La Moncloa. Por ahora, el sector financiero no ha recogido el guante que les que lanzó el dirigente gallego en el marco de su intervención en el Cercle de Economía.
«No tiene sentido hacer señalamiento social. Si se quiere crear un fondo para solucionar el problema de los 300 euros de incremento de la hipoteca mensual, creamos un fondo con la banca, se puede llegar a un acuerdo, pero meter un impuesto a la facturación judicializado y que previsiblemente tendrá que devolverse, no tiene ningún sentido», dijo Núñez Feijoo.
No obstante, está por ver si Feijoo derogará este impuesto. De sus palabras se desliza que si alcanza la Presidencia del Gobierno, el segundo año en el que la banca tendrá que pagar el impuesto, este será historia. En ese caso, la incógnita es si Feijoo se atrevería a realizar algún tipo de operación destinada a aliviar a la banca el dinero pagado el primer año del impuesto.
En ese caso, la incógnita es si Feijoo se atrevería a realizar algún tipo de operación destinada a aliviar a la banca el dinero pagado el primer año del impuesto
EL BALANCE DE FEBRERO
A finales de febrero, según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el Gobierno ya había recaudado 1.454,5 millones gracias a los impuestos temporales a la banca y a las energéticas con los que gravan sus beneficios extraordinarios por la subida de los precios de la energía y del alza de los tipos de interés.
Según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el primer avance de este pago, ya arrojaba un cumplimiento de las previsiones más conservadoras de recaudación total: 3.000 millones a fin de año, una previsión basada en los beneficios a cierre de 2022.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que el contexto puede ser poco propicio para renunciar a estos ingresos. De hecho, perdonar dinero a la banca es una medida muy impopular en España y eso puede lastrar la imagen de Feijoo. Puede ser un coste asumible si se hace al principio de un hipotético mandato del líder PP, pero, una medida así le sería recordara de modo permanente por la izquierda, por las asociaciones de consumidores y es posible que hasta por las energéticas, por aquello del agravio comparativo.
Perdonar dinero a la banca es una medida muy impopular en España y eso puede lastrar la imagen de Feijoo
Y es que un futuro Gobierno de Feijoo no podría derogar sino solo retocar el impuesto que actualmente afecta al sector energético, según fuentes próximas al Gobierno citadas por ‘La Información.
Según este diario, el motivo es que la Unión Europea ha puesto en marcha su propia «contribución solidaria temporal» sobre los beneficios extraordinarios del petróleo, el gas, el carbón y la refinería que no están cubiertos por el tope máximo de los ingresos inframarginales, lo que se conoce como beneficios caídos del cielo.
AUTORIDAD FINANCIERA
La convocatoria de elecciones generales hace que la aprobación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero sea papel mojado, ya que será una de los iniciativas legislativas en tramitación que decaiga, según avanzan a MERCA2 fuentes del Partido Popular (PP) en el Congreso de los Diputados. Si el PSOE consigue gobernar de nuevo, lo normal es que recupere -mediante una nueva aprobación en Consejo de Ministros, esta apuesta de la ministra de Economía, Nadia Calviño. Sin embargo, si gobierna el PP, que se abstuvo en la votación de la Autoridad en el Congreso, está por ver qué sucederá.
Con la convocatoria de los comicios, la tramitación parlamentaria del proyecto de ley para la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, que se encontraba en el Senado, se esfuma. “Al convocar los comicios, al estar en tramitación y no estar incluida dentro de los supuestos que permiten que siga la tramitación, con la nueva legislatura, esta iniciativa va a decaer, lo que sucedera hoy tras el acuerdo de la Mesa Diputación Permanente del Congreso”, indicaron fuentes de la Mesa del Congreso de los Diputados. Estas fuentes aclararon que esto ha sucedido así siempre que se han convocado Elecciones Generales desde la vuelta de la democracia.
De este modo, una de las papeletas que tendrá que resolver el líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, si consigue alcanzar la Presidencia del Gobierno es decidir si recupera la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, una iniciativa del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez para la resolución extrajudicial de conflictos entre las entidades financieras y sus clientes. “Alberto Núñez Feijoo se replanteará todas las cuestiones”, apuntaron fuentes del PP con mucho peso dentro del partido y del grupo parlamentario en el Congreso.