Las servilletas forman parte de nuestro día a día en la mesa pero no siempre ha sido así, el origen de este objeto se le atribuye a Leonardo Da Vinci quien las ideó alrededor de 1491.
A Da Vinci se le ocurrió una nueva forma de limpiarse las manos en los banquetes que evitase el uso de conejos. Por aquella época su señor, duque de Milán, amarraba conejos vivos a las sillas de los invitados, para que pudieran limpiarse las manos impregnadas de grasa sobre sus pieles. Leonardo encontraba esa costumbre impropia y decidió cambiarla disponiendo un paño individual para cada uno de los comensales. Este nuevo invento no tuvo una buena acogida, de hecho, no sería hasta el siglo XVII cuando el uso de la servilleta se extendió por toda Europa.