El ministerio de Economía y Finanzas de Perú ha lanzado este viernes un nuevo programa para reactivar la economía que asciende a un importe de más de 5.900 millones de soles peruanos (unos 1.480 millones de euros), con el que pretende seguir apostando por la reactivación de la economía peruana, sin comprometer la estabilidad del país.
Este nuevo paquete económico, bautizado como ‘ConPunche2’, da continuidad al primer programa que se puso en marcha en el mes de enero y llegó hasta los 7.856 soles peruanos (unos 1.970 millones de euros).
Tras la aplicación de este plan, gracias al que, según el ministro de Economía y Finanzas, Alex Contreras, se logró pacificar el país y reactivar la economía, el objetivo ahora es seguir atendiendo las emergencias sociales y económicas de Perú, sin descuidar los avances más estructurales.
Junto a los tres ejes de reactivación sectorial, familiar y regional del anterior plan, este segundo programa incluye un nuevo segmento enfocado a dar un impulso las pequeñas y medianas empresas. Además, desde el Gobierno se quiere avanzar en la lucha contra la pobreza y una mayor cohesión social.
«Seguir acelerando la inversión privada y generar un alto retorno social son las principales motivaciones del nuevo paquete de medidas», ha destacado Contreras.
Más de 1.150 millones de soles peruanos (unos 288 millones de euros) irán para la reactivación de la economía familiar, con partidas destinadas a aumentar los programas sociales, dar préstamos a los estudiantes o garantizar el acceso a agua potable.
Por su parte, el sector textil recibirá 200 millones de soles (50 millones de euros) para comprar maquinaria y dar impulso a nuevas contrataciones. A su vez, se destinará la misma cantidad para la preservación de empleos formales en regiones de alta vulnerabilidad climática.
La seguridad ciudadana, el sector de la salud o la industria naval también tendrán ayudas específicas, al mismo tiempo que se realizará transferencia de recursos para la financiación de inversiones prioritarias con las que cerrar la brecha en infraestructuras.