Disney está en período de cambios. Su realidad es complicada pues, por un lado, está viendo algunos agujeros importantes en su armadura que han obligado a esta empresa a reducir las producciones de su aplicación de streaming. Ahora bien, la realidad es que la compañía sigue siendo uno de los conglomerados económicos más grandes del mundo, por lo que sus decisiones siguen marcando un patrón importante y la de devorar el contenido de sus otros servicios de streaming en su marca principal.
Ya lo hizo en Estados Unidos con Hulu, el servicio que comparten con Universal y que es el hogar de series como ‘The Bear’, ‘Only Murders in the Building’ o la adaptación de ‘Cuatro Bodas y un Funeral’ en el país norteamericano y ahora lo hará con el contenido de ESPN+, su aplicación de deportes. En esta app se incluyen transmisiones en vivo de la NFL, la NBA así como programas de análisis deportivo. Además, cada vez suman más deportes internacionales.
La empresa sabe lo potente que es el deporte dentro una de estas plataformas. No solo debe haber seguido de cerca el experimento de Amazon con la League One de Francia, sino que hicieron el suyo propio. Durante varios años tuvieron los derechos de transmisión exclusivos de la liga india de cricket en el país, y pueden saber el efecto que tenía en el servicio, es en donde se concentra la mayoría de los cuatro millones de usuarios que han perdido este primer trimestre.
Por tanto, no es mala idea que quieran agregar la marca deportiva, que, además, está volcada los últimos años en la producción de documentales. De hecho series como ‘OJ: Made in America’ y ‘The Last Dance’ han sido éxitos absolutos para Netflix, pero el acuerdo que la marca tenía con esa plataforma antes de ser adquiridos por Disney se vence pronto, por lo que es contenido con el que podrán contar a futuro.
NO SON LOS ÚNICOS QUE APUESTAN POR SUMAR DEPORTE
Lo cierto es que una de las quejas normales de los jóvenes que no ven deporte es lo incómodo que es depender de servicios como Movistar+ o Dazn, ambos extremadamente costosos. Por el contrario, la presencia de este tipo de programación en los servicios de streaming no solo facilitan el proceso, sino que pueden permitir acceder al ritmo que lo deseen los espectadores. En el caso español esto puede beneficiar especialmente a los fanáticos de ligas norteamericanas.
Al mismo tiempo, permite formas bastante diferentes de acercarse a los deportes. Incluso algunos espectadores que no son habituales de la Fórmula uno pueden conectar con ‘Drive to Survive’, y aun sin ver el día a día de la Serie A se puede disfrutar la serie documental de la Juventus. La propia empresa del ratón sumo recientemente un documental sobre la dinastía Laker a su plataforma. Visto así, ESPN puede ser otra pieza de la fábrica infinita de contenidos en que se está transformando Disney.
En este marcó, resulta interesante saber si desde Netflix o HBO hay planes similares. La primera quiere mantener la distancia con respecto a la compañía liderada por Bob Iger y la segunda espera alcanzar a sus dos competidores principales, aunque de momento sigue algo lejos de lograr ese objetivo. Visto así apostar de una forma o de otra por el deporte puede ser una estrategia tan valiosa como sumar alguna propiedad como Star Wars, o los universos de Marvel y DC.
DISNEY QUIERE QUE SU APLICACIÓN TERMINE DE SER RENTABLE
Lo cierto es que hasta el momento Disney+ ha costado varios millones de euros sin conseguir ser rentable hasta el momento. Entre el costo de mantener los servidores, la creación de nuevo contenido, que además suele tener un alto presupuesto cuando se trata de sus marcas más conocidas y el costo de publicidad han convertido este proyecto hasta el momento en un vehículo para promocionar su contenido, pero no necesariamente una fuente de ingresos. Es una situación que el CEO ha prometido cambiará el año próximo.
Mientras tanto no es como que tengan una sola fuente de ingreso. Desde sus ingresos en taquilla, empujados los últimos meses por ‘Avatar: el sentido del agua’ y ‘Guardianes de la Galaxia Volumen 3’ pasando por sus parques y las ventas de mercancia no es como si los creadores de Mickey Mouse tuviesen que preocuparse por quebrar o ser adquiridos por alguna otra empresa de entretenimiento.
Por tanto, lo normal es que no tengan apuro, después de todo no les tembló el pulso para despedir unas 7.000 personas y podrían hacerlo de nuevo si es necesario. Igualmente, su futuro depende de varios factores externos en los cuales no pueden intervenir demasiado directamente. Así que habrá que esperar para saber si sus estrategias a largo plazo en efecto funcionan, pero es interesante ver como se siguen abriendo flancos en la guerra del streaming.