La procesionaria, Thaumetopoea pityocampa, es una oruga que sin duda conocerás. Se encuentra en parques, zonas rurales y bosques donde hay pinos y cedros. El origen de su nombre es debido a que cuando los lepidópteros rompen su bolsón en el que anidan, bajan o caen al suelo para enterrarse, completar su metamorfosis y convertirse en mariposa, formando un desfile que se desliza como una procesión.
La procesionaria constituye una plaga en los países mediterráneos y se está expandiendo hacia el norte por el calentamiento global. El riesgo se encuentra en que estas orugas poseen unos pelos urticantes muy pequeños que se desprenden con gran facilidad de su cuerpo, lo cual pueden provocar una reacción adversa y los síntomas suelen ser instantáneos y en general remiten en pocos días.