La posible huida de Ferrovial a Países Bajos ha provocado un tsunami dentro del tejido empresarial que enfrenta la presión fiscal española con las compañías más importantes del país. No obstante, y a falta de unas horas para la confirmación oficial, la entidad decidirá el traslado en la junta de accionistas que se celebrará mañana día 13 de abril, la salida de Ferrovial afectará más a la propia compañía que a España.
En la línea, una de las más críticas con el asunto ha sido la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien en sus últimas declaraciones ha dejado claro que la entidad española deberá exponer los puntos de partida, ya que las aportadas hasta ahora no convencen ni siquiera al Gobierno.
La supuesta presión tributaria española ha afectado en los últimos años a las grandes compañías y hasta a los ‘youtubers’
“La legislación es clara. Cuando no hay motivos económicos, hay determinados elementos fiscales que no se pueden aplicar a la empresa. […] Es importante que el Gobierno aclaré a Ferrovial que las razones esgrimidas para su traslado, que se basan en no poder cotizar en la bolsa de Estados Unidos, no se corresponden con el espíritu de la legislación. En ese sentido, no tiene nada que ver con el día a día de lo que puede hacer cualquier empresa que está ubicada en España».
Las declaraciones de la ministra vienen precedidas de un clima de tensión que ha puesto en jaque el sistema de recaudación de impuestos, situación similar a la vivida hace unos años con la también huida de los creadores de contenido, llamados youtubers, hacía Andorra, donde la presión tributaría es mucho menor.
LA TRIBUTACIÓN DE FERROVIAL
Si bien el contexto económico resulta algo delicado para ambas partes, tanto para Ferrovial como para España, las previsiones a largo plazo son más optimistas para el país que para la compañía. Y esto resulta de la cantidad de grandes empresas que han decidido quedarse ante la salida, casi ya anunciada, de la entidad especializada en infraestructuras y transportes. En fin, un 99% contra un 1%.
Con todo, mañana Ferrovial decidirá su futuro en una junta de accionistas, en un evento donde, además, “los accionistas se pronunciarán sobre las distintas propuestas realizadas por el Consejo de Administración, entre las que se encuentra una reorganización societaria que tiene por objeto de reforzar su perfil internacional y alinear la estructura de la sociedad con la estrategia de crecimiento de su negocio.”
FISE, con domicilio social en Países Bajos, pasaría a convertirse en la sociedad matriz del Grupo bajo la forma social de Sociedad Europea
No obstante, la huida de Ferrovial se podría producir incluso con el reciente cambio de parecer del Fondo Soberano de Noruega (de una negativa rotunda a un sí sin dudas), quien a día de hoy mantiene apenas un 1,5% del accionariado de la compañía. En relación, la salida de Ferrovial estaría ya organizada de tal manera que, de llevarse a cabo, se produciría “una fusión transfronteriza intracomunitaria entre Ferrovial SA y Ferrovial International SE”.
De esta manera, “FISE, con domicilio social en Países Bajos, pasaría a convertirse en la sociedad matriz del Grupo bajo la forma social de Sociedad Europea. En el marco de esta operación también está prevista la negociación de sus acciones simultáneamente en España y Países Bajos y, posteriormente, solicitar su cotización en Estados Unidos”.
LA CEOE APOYA A FERROVIAL
Aunque las consecuencias aún son incalculables para Ferrovial, a parte de la ya sabida, que es la probabilidad de dejar de recibir adjudicaciones públicas en España, la compañía alberga muchas posibilidades de salir de España. Y más aún cuando cuenta con apoyos tan importantes como el del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi.no apoyará el
Garamendi no apoyará el observatorio de márgenes empresariales anunciado por Nadia Calviño
Se está diciendo que el sistema financiero tiene que ser robusto y tiene poco sentido que te metan un impuesto a la carta precisamente que va en contra de esa robustez financiera«, ha criticado Garamendi, que ha insistido en que si la economía funciona es porque funcionan las empresas.
Además, ha afirmado también que no apoyará el observatorio de márgenes empresariales cuya creación ha anunciado la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, si lo que supone es «más intervencionismo» en las empresas.