Inversis ha descartado que se produzca una crisis bancaria como la que sucedió en 2008 debido a que las entidades tienen unos mejores balances, falta de concentración de activos tóxicos y unos elevados niveles de solvencia y liquidez.
En todo caso, la firma ha avisado de que «aún queda por saber el impacto que tendrá la subida de tipos en los balances de los bancos». De esta forma, «no es descartable» que se produzca algún otro rescate bancario y la regulación y supervisión bancaria aún tiene margen de mejora.
Tras las últimas turbulencias en el sector, que ha provocado el colapso de cuatro bancos medianos en Estados Unidos y de Credt Suisse en Suiza, la situación «parece que comienza a estabilizarse», según Inversis, aunque se mantiene la cautela.
Los expertos de la entidad han destacado que Europa «sigue topándose con dificultades» para frenar el encarecimiento de los precios, con una inflación situada en el 8,5%. «La subida de alimentos y la inflación subyacente han neutralizado la caída de los precios en energía y cadena de suministros. Especialmente notable también el salto inflacionario de los servicios», valoran desde Inversis.
Respecto a otras geografías, en Estados Unidos el dato de inflación es del 6%, por lo que «sigue dando motivos de preocupación», aunque con expectativas más optimistas. En China, la evolución de precios se mantiene moderada, aunque a la espera de un posible despegue de la actividad tras el fin de las políticas restrictivas.
En lo que se refiere a perspectivas de crecimiento económico, para Inversis la economía de EEUU muestra signos de resiliencia gracias al buen comportamiento del empleo y el consumo privado que están llevando a revisiones al alza para 2023, después de un cierre estimado del año pasado en el 2,7%.
En el caso de Europa, el PIB sigue mostrando un «crecimiento tendente a cero» con un cierre de 2022 en el entorno del 1,7%. Inversis considera que esto se explica por dos factores. De un lado el consumo privado que se resiente por la mayor incertidumbre, la inflación y el impacto de las políticas monetarias, y de otro, la caída de la inversión. En todo caso, los primeros indicadores del año «hacen prever una mejora en ambos parámetros».
China por su parte «entra de lleno en reapertura económica y eso tendrá un impacto» en el crecimiento global, más a corto plazo en el área asiática.
Asimismo, para los expertos de Inversis, las últimas decisiones tanto de la Fed como del BCE «confirman su determinación de llevar la política monetaria hasta sus últimas consecuencias» para conseguir que los precios se alineen con los objetivos a largo plazo. Así, desde la entidad consideran que el ciclo de subidas de tipos se podría alargar unos meses todavía.
Ante este entorno, la estrategia de Inversis para renta fija es mantener unas duraciones «ajustadas» en los tramos cortos e intermedios de los bonos soberanos, mientras que a medio plazo se extiende la duración a la espera de posibles bajadas de tipos en 2024.
En crédito, aunque las primas de riesgo de emisores corporativos han repuntado durante los últimos meses, están dentro de las medias históricos. Por ello, Inversis mantiene su apuesta por bonos de calidad, de sectores defensivos y sin exposición a riesgo sistémico. También hay preferencia por el ‘high yield’ europeo y en segmento de mayor calidad.
En renta variable, la estrategia de Inversis se decanta por reducir exposición a acciones de economías avanzadas a la espera de una mayor claridad en la evolución de beneficios empresariales. A la espera también de cómo evolucione el sector financiero, se apuesta por infraponderar en sectores más expuestos a riesgos sistémicos.