La lucha, cada vez más encarnizada, entre los taxistas y las VTC no parece demasiado cerca de terminar. Pero ahora en Madrid han conseguido un nuevo territorio: Las estaciones de cercanías, a las que Uber prestará un servicio especial de última milla bajo el nombre de ‘Uber Metropolitano’. Es una nueva apuesta para atrapar a un público cautivo que sale de las estaciones, y que enfrenta los retrasos de un servicio que parece tener incidencias «puntuales» todos los días.
«Con este lanzamiento queremos redoblar nuestro compromiso con Madrid y facilitar el acceso de los madrileños a los centros de transporte público en la periferia de la ciudad sin necesidad de que hagan uso del vehículo privado. La combinación de Uber con el transporte público es clave en el camino a mejorar la calidad de vida en las ciudades y contribuye a hacerlas más sostenibles y limpias», dijo durante el lanzamiento Lola Vilas, directora de Uber en España.
«Es un placer recibir en nuestro municipio proyectos de empresas potentes como Uber. Alcobendas es la ciudad de más de 100.000 habitantes con mejores cifras de empleo de España. Y estamos muy cerca de ser la segunda ciudad en facturación empresarial de España. Esto es, en parte, gracias al trabajo conjunto de empresas y ayuntamiento en colaboración público-privada», dijo D. Aitor Retolaza, alcalde de Alcobendas.
Pero para la empresa es una nueva ventaja, no solo sobre los taxis sino sobre otras VTCs. Es que la presencia de Uber como fija en estas estaciones cambiaría la forma en que los ciudadanos se mueven en la comunidad de Madrid. Lo cierto es que esto ocurre en un momento en que el servicio de cercanías ha recibido importantes críticas por sus problemas de retraso, y la propia Renfe puede usar algún salvavidas reputacional tras la debacle de los trenes de Cantabria.
¿CÓMO FUNCIONARÁ EL UBER METROPOLITANO?
Para seleccionar Uber Metropolitano, los usuarios deberán encontrarse en un radio de tres kilómetros desde las estaciones de tren de El Casar, Getafe Centro, Móstoles Central, Alcorcón, Majadahonda, Las Rozas o Alcobendas-Valdelasfuentes.
Una vez dentro de ese radio, el usuario podrá ver en su aplicación la opción de Uber Metropolitano como un producto individual, como UberX o Uber Green, con una tarifa plana de 4,5 euros. Esta tarifa será el coste total del viaje, independientemente de la distancia que se recorra dentro de esos tres kilómetros, para viajes con origen o destino en las estaciones seleccionadas.
MADRID: LA COMUNIDAD MÁS ABIERTA A LAS VTC
Lo cierto es que la Comunidad de Madrid tiene una relación mucho más cercana con las VTC que el resto del país. Es que mientras que incluso otras comunidades gobernadas por el PP como Andalucía ponen limitaciones importantes a su funcionamiento, obligándoles a mantener la distancia de zonas como aeropuertos u hospitales, Madrid les ha abierto las puertas, muy en línea al discurso de Ayuso de la libertad.
Pero es comunidades como Cataluña han puesto algunas restricciones que hacen casi imposible la existencia del modelo de negocio, y la mayoría ni siquiera ha presentado una regulación posterior al vencimiento de la moratoria por el famoso «decreto Ábalos», por lo que existen con incertidumbre y dudas en muchas de ellas.
Por eso parece tan buena idea su apuesta por Madrid. Afortunadamente, para Uber, Cabify y Bolt, se trata de una ciudad suficientemente importante y grande para seguir funcionando. Además, son empresas que han comentado antes que los eventos son una oportunidad de negocio clave para ellos, y con la capital española albergando en verano el Mad Cool, el Primavera Sound, Dcode y una larga lista de evento cultural no parece demasiado grave tener que conformarse con la capital.
Por supuesto eso ha generado el rechazo de los taxis. No son pocos los días que la plaza del Sol ha recibido a los taxistas molestos con las medidas que la comunidad de Madrid ha tomado en lo que consideran beneficio de las VTC, y lo cierto es que esta nueva medida tiene todas las letras para causar una reacción.
LAS ESTACIONES NACIONALES DE MADRID
Mientras tanto las mismas VTC no pueden acercarse a dos de las estaciones más importantes de cercanías en la capital: Atocha y Chamartí, puesto que estas comparten espacio con los trenes de alta velocidad. Es una situación delicada que muestra las diferentes formas de enfrentar la transformación de los medios de transporte que representan las nuevas aplicaciones como Uber, Cabify y Bolt.
De cualquier modo es cierto que la situación es diferente a otras ciudades, desde Uber ya han demostrado que son capaces de conseguir «atajos» para acercarse a Atocha, al punto de en un momento poner publicidad dentro de la propia estación. En cambio, en otras ciudades es imposible acercarse tanto, como puede atestiguar cualquiera que haya visto la reacción de los taxistas al ver a los Cabify acercarse a Sants en Barcelona.
Eso es lo que puede preocupar a la comunidad de Madrid de cara a esta nueva alianza con Uber. Más que un problema logístico o económico, que probablemente la empresa pueda resolver mejor que opciones más tradicionales, es que un problema reputacional con unas elecciones tan cercanas tanto comunitarias como nacionales.
OTRAS APUESTAS DE UBER
Lo cierto es que la empresa ha demostrado su interés en cada vez más formas de funcionar como parte del día a día de los ciudadanos. Desde proyectos como Uber Green, su versión del proceso de electrificación de la flota de vehículos en el que están colaborando con Wallbox, el ya conocido, y criticado, Uber Eats o su entrada en el mercado de la micromovilidad, patinetes y bicicletas eléctricas.
Su acercamiento al transporte público tampoco debería ser una sorpresa. Desde hace un tiempo la información de como moverse en él está disponible en su App, y aplicaciones como Doco, de la propia Renfe, han abierto las puertas a una mayor sinergia entre ambos espacios. En cualquier caso hay que esperar al miércoles para saber todos los detalles de este ‘Uber metropolitano’, y algo más para ver como reaccionan a este concepto los usuarios.
