El tráfico de mercancías en los puertos españoles se frena de forma brusca. Los índices de cargamento y fletes muestran fuertes caídas desde los máximos alcanzados a finales del pasado año, mientras que el Baltic Dry Index (BDI) trata de salir del fondo con un repunte cercano al 130% en apenas diez días.
El BDI es uno de los indicadores referentes de los mercados internacionales y mide el tráfico de grano seco, carbón, algodón y hierro, entre otras, hacia Europa. Para su cálculo, las navieras dan a conocer el coste medio por tonelada con el que fletan sus barcos. En los últimos días y como consecuencia de la guerra de Ucrania, este índice se ha disparado desde los 500 a los 1.300 puntos, un incremento del 160%.
RÉCORD EN LOS PUERTOS DE BARCELONA Y CARTEGENA, PERO LOS ÍNDICES APUNTAN A UN FRENAZO DE LA DEMANDA
Sin embargo, los puertos españoles registran la tendencia contraria. Los fletes se han desplomado un 45% desde los máximos de agosto de 2022 a marzo de 2023, según los datos del Puerto de Valencia consultados por MERCA2 y registran seis meses de caída ininterrumpida. El Valencia Containerised Freight Index (VCFI), que mide la fluctuación de los costes en el transporte de contenedores por mar desde el Puerto de Valencia, se ha hundido desde los más de 4.900 puntos a poco más de los 2.700. En el de Alicante, estos fletes han caído más de un 10% en las últimas semanas, mientras que en el Puerto de Cartagena se ha cerrado el año con un récord de tráfico de mercancías, con 36,6 millones de toneladas.
CARTAGENA SE ERIGE COMO EL CUARTO PUERTO DE ESPAÑA
Cartagena se posiciona así como el cuarto puerto más importante de España, con un aumento del 15% en el volumen de mercancías respecto al 2021 debido al fuerte impulso por el crecimiento en graneles sólidos y líquidos. En este sentido, Pedro Pablo Hernández, vicepresidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena, ha apuntado a las buenas perspectivas para este 2023, con un crecimiento del 2,74% en enero de este año respecto al mismo mes del pasado ejercicio.
«El Puerto de Cartagena no se para», ha considerado. Un ejemplo de la buena marcha del Puerto es la descarga de azúcar ensacada, con 28.000 toneladas, alcanzando el mayor volumen de toda Europa. En el caso del Puerto de Barcelona, los beneficios alcanzaron los 62 millones, un 66% más respecto a 2021 en un contexto convulso por la invasión de Rusia a Ucrania, la crisis energética y la COVID-19 persistente en China. El organismo registró un «récord histórico», con una cifra de negocio neta de 181 millones de euros, un 20% más respecto a 2021.
RALENTIZACIÓN DEL TRANSPORTE
No obstante, a pesar de las buenas cifras, se constata una ralentización en el crecimiento del comercio mundial, según los indicadores marítimos consultados por MERCA2. Así, el índice RWI/ISL muestra una caída desde los 130 a los 120 puntos, un descenso del 8% en el último mes. Este índice muestra los datos de rendimiento de contenedores de 94 puertos internacionales recopilados continuamente por el Monitor Mensual de Puertos de Contenedores de ISL como parte de su observación del mercado.
Estas terminales representan aproximadamente el 64% del tráfico mundial de contenedores, especialmente europeos y en la zona del Mar del Norte, contabilizando así los puertos más importantes de Países Bajos, como Rotterdam. Se trata de un indicador fiable y a menor rendimiento más se aproxima la economía a una ralentización o bien una recesión. En 2020, la caída de este índice fue del 20%, ahora es de prácticamente el 40%.
ALERTA TEMPRANA ANTE LA POSIBLE RECESIÓN
Está considerado como un indicador de alerta temprano y con un alto grado de confianza para medir el pulso al comercio internacional de productos manufacturados, así como de la actividad económica mundial. Por otro lado, los puertos chinos muestran una actividad completamente estancada. No obstante, la reapertura del país asiático podría estar detrás de las alzas registradas en el BDI.
Asimismo, el número de buques vacíos se ha duplicado en el último mes, según los datos de Alphaliner, hasta rondar los 160 frente a los 80 registrados en enero. Esta cifra representa más de un 3% del transporte de carga. Según ha podido saber este medio, varios contratistas están devolviendo barcos y buques a las navieras ante la falta de mercancías para transportarlos.
