Empleados de la división tecnológica de Indra agrupada en torno a la compañía Minsait están nerviosos ante los últimos movimientos corporativos en el seno del grupo español, hasta el punto de que cualquier operación que se produce en esta área es vista con recelo. No en vano uno de sus principales accionistas, el fondo de inversión Amber Capital, ha solicitado al Gobierno que de luz verde a la segregación del grupo, separando la parte tecnológica y militar, una operación a la que se oponen la cúpula directiva y los sindicatos.
El temor de la plantilla ha crecido después de ser convocados los delegados sindicales a una reunión en la que la dirección del área tecnológica de Indra ha comunicado la decisión de realizar un «cambio de titularidad de la unidad productiva dedicada al servicio de externalización de procesos de negocio de soporte, atención y gestión de servicios TIC de Telefónica«, que pasará a manos de la consultora ABAI.
LA OPERACIÓN CON ABAI
Según la información facilitada a los representantes laborales a la que ha tenido acceso MERCA2, como consecuencia de esta operación, se traspasarán en bloque a ABAl el conjunto de medios que le permitan continuar desarrollando su actividad económica de manera independiente, «constituyendo en sí misma una unidad productiva autónoma». De esta forma, los trabajadores que en estos momentos están asignados a esa división «serán subrogados» a ABAI sin solución de continuidad”.
La fecha inicialmente prevista para la transmisión es el próximo seis de marzo, operación que responde a la decisión de ABAI para incrementar y potenciar su actividad de externalización de procesos de soporte, atención y gestión de servicios TIC, como parte de su plan estratégico de diversificación y crecimiento. Para ello, la consultora ha acordado con Indra adquirir su línea de negocio ya constituida de externalización de procesos de soporte, atención y gestión de servicios TIC de Telefónica.
LA CONSULTORA ABAI COMPRA A MINSAIT LA LÍNEA DE NEGOCIO DE SERVICIOS TIC QUE EL GRUPO INDRA HACÍA PARA TELEFÓNICA
Indra ha garantizado a la plantilla afectada conservará las mismas condiciones económicas y laborales, pero los empleados consultados por este diario indican que esta venta responde a una estrategia de despiece de la división tecnológica, vendiendo unidades de negocio que no interesan para hacer más atractiva la venta. Lo cierto es que la venta del área de Tecnologías de la Información de Indra lleva tiempo sobre la mesa y aunque ahora Amber lo ha puesto de nuevo en la agenda no hay muchos compradores interesados.
Cuando se pregunta en el ámbito corporativo por esta cuestión todas las miradas apuntan a Telefónica como candidato. El grupo que dirige José María Álvarez Pállete llegó a mantener conversaciones informales con Indra para promover una fusión, pero finalmente no llegaron a buen puerto. La oposición sindical a la segregación y la injerencia política que supone que más de una cuarta parte del capital esté en manos estatales (a través de la SEPI) son dos elementos adicionales que dificultan la operación.
NO ANTES DE LAS ELECCIONES
Fuentes del entorno de Joseph Oughourlian, fundador de Amber Capital y primer interesado en la segregación de Indra, indican a MERCA2 que en estos momentos «hay cierta parálisis en esta materia» y descartan una partición del grupo español antes de las elecciones autonómicas y generales. Mientras tanto la cúpula de Indra insiste en que no se ha hablado de esta cuestión de forma oficial, aunque la agencia Bloomberg apunta lo contrario.
El propio presidente Marc Murtra ha cerrado filas con los que se oponen a la separación del grupo, aunque el pasado año planteó que Minsait debía tener un mayor margen de maniobra.
Lo cierto es que en estos momentos Indra vive un momento dulce, tras anunciar un incremento de la remuneración a los accionistas de casi el 70%, con un dividendo de 0,25 euros por título. El beneficio neto de 172 millones de euros logrados en 2022 es un resultado récord y en el mercado se espera que la compañía siga elevando sus ganancias gracias al desarrollo de la industria militar europea, que vive días de gloria gracias a la guerra de Ucrania. La cartera de contratación de la firma ha crecido un 16% superando los 6.300 millones de euros.
BUENOS RESULTADOS EN 2022
El departamento de análisis de Bankinter destaca que «tanto los resultados como las guías para el año 2023 se encuentran por encima de lo esperado por el consenso del mercado» y consideran que los últimos resultados «confirman la solidez los fundamentales de la compañía, que además se encuentra apoyados por el incremento del gasto en defensa de los países de la UE de cara a los próximos años».
Si nos centramos en la evolución de Minsait, comprobamos que los ingresos crecieron un 18%, logrando una facturación de 2.517 millones de euros y un beneficio antes de impuestos, intereses y amortizaciones (EBITDA) que repuntó un 19%, hasta los 201 millones. Todo ello con un incremento de su cartera del 8%, sumando más de 1.700 millones de euros.
Unas cifras que hacen muy atractiva a la división tecnológica de Indra, aunque en el mercado se hable de «apetito limitado» respecto a los posibles compradores. Veremos si tras las citas electorales de este año Amber Capital vuelve a la carga, ya que necesita hacer caja por el lastre que soporta con su inversión en Prisa, donde también lidia con el aparato gubernamental. De momento el Palacio de La Moncloa ha pedido una tregua al inversor armenio y parece que éste se la ha concedido. Lo cual no termina de tranquilizar a la plantilla de Minsait, que ronda los 50.000 empleados.