Grifols se sitúa a las puertas de la resistencia tras la montaña rusa en la jornada de este jueves. La empresa dedicada a los hemoderivados sesión de más a menos, al iniciar la jornada con un ascenso del 10% y cerrarla con una subida de apenas el 2,47%, hasta los 13,92 euros por acción. La revalorización registrada en Wall Street fue del 9% el pasado martes.
Desde los mínimos de octubre, el valor se ha disparado con fuerza y el volumen registrado en la jornada de este jueves es el más elevado en los últimos tres años. De hecho, el plan anunciado ha desatado las recomendaciones de compra por parte de los analistas e impulsado el precio de las acciones a niveles no vistos desde agosto del pasado año.
GRIFOLS SUBE CON UN FUERTE VOLUMEN
Grifols cuenta con el respaldo de Citi, Jefferies, Oddo BHF, Mirabaud y Berenberg. Las cinco agencias de análisis apuntan precios entre los 18 y los 30 euros por acción, un potencial alcista adicional de entre el 29% y el 115% respecto a los precios de cierre de este jueves. El consenso de Bloomberg se sitúa en los 17,66 euros, un 26,9% por encima. Asimismo, Grifols dibuja un escenario alcista de manual, con máximos y mínimos crecientes, si bien está muy cerca de la resistencia de los 14,1 euros, una cota que en caso de superar le llevaría hacia la zona de los 15,5 euros.
Grifols continúa evaluando las ventas de divisiones para reducir el endeudamiento
Citi sitúa a Grifols en los 30 euros con un consejo de «compra», mientras que Oddo BHF considera sobreponderar la acción al otorgar los 18 euros por título. Mirabaud se ha unido también a este consejo de compra con los 26,86 euros y Berenberg sitúa el precio objetivo en los 23,8.
EL NECESARIO AHORRO DE COSTES
La fuerte subida se debe a la puesta en marcha del primer plan integral de Steven F. Mayer, que trata de mejorar la operativa e incrementar la competitividad con una organización más ágil tanto en los costes como en la gestión. Este nuevo proyecto pasa por el despido de 2.300 trabajadores, cien en España, y el cierre de centros de plasma poco productivos. El pasado año bajó la persiana a 18 centros y espera continuar con esta operativa a lo largo del primer semestre. El objetivo es ahorrar costes de unos 400 millones de euros, que se verán reflejados en las cuentas del próximo 2024.
La compañía espera mejorar su flujo de caja y reducir su base de costes, con un mejor desempeño y financiero y un mayor dinamismo en el modelo operativo. «La mayor parte del ahorro de costes anualizado se verá reflejado en la cuenta de resultados de 2024, si bien se espera un impacto de 100 millones de euros de ahorro en la cuenta de resultados de 2023», ha indicado la compañía.
GRIFOLS CIERRA DE CENTROS DE PLASMA
Grifols ha dado luz verde a este plan tras analizar las estructuras organizativas y los costes, así como la dotación de personal, los planes de incentivos, las instalaciones, sistemas y procesos. Para Mayer, son «medidas son necesarias». El objetivo de Grifols es crear una «plataforma de obtención de plasma más eficiente, accesible para los donantes, moderna y fiable del mundo». El plan pretende ahorrar 300 millones respecto al 2022. Para ello, impulsará la eficiencia de los centros de plasma, reducir los costes de personal, cambiar los horarios de apertura y mejorar la experiencia del donante, si bien se revisarán los incentivos con una optimización en el proceso.
Por ello, Grifols ha cerrado 18 centros a finales de 2022 y realizará más a lo largo de los primeros seis meses de este año. Para este ahorro de costes, Grifols tendrá que recurrir a 140 millones de euros y que se reportarán en las cuentas de enero a marzo. Así, se incluyen las indemnizaciones por despido, honorarios de asesoramiento y consultoría y otras actividades.
GRIFOLS Y LAS VENTAS DE CHINA, BIOMAT Y DIAGNOSTIC
«Las medidas de nuestro plan de mejoras operativas garantizarán el éxito de Grifols a largo plazo y la creación de valor para todos nuestros grupos de interés de forma sostenible. Las decisiones adoptadas, en particular las que afectan a nuestro equipo humano, no se han tomado a la ligera», han destacado Victor Grifols Deu y Raimon Grifols Roura, co-CEO de Grifols.
La compañía prosigue así con la reducción de la deuda, la captura de oportunidades comerciales, el desbloqueo del valor de Biotest y la optimización de la organización. Asimismo, continúa evaluando otras alternativas transaccionales para reducir el endeudamiento. El mercado espera las ventas en China, Biomat y Diagnostic. Estas divisiones tienen un valor de unos 6.000 millones de euros.
El tiempo apremia a la compañía ante las subidas de tipos de interés y a pesar de tener bajo control el coste del 65% de su deuda, al referenciarse a tipos de interés fijo, las continuas subidas de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y del Banco Central Europeo (BCE) pasarán factura a la hora de refinanciar. Y es que, los próximos vencimientos importantes para la cotizada catalana llegan en 2025, de ahí las prisas por reducir el apalancamiento.