El FC Barcelona no tiene apenas margen de error en la obra del Espai Barça y todo el éxito de Joan Laporta y su junta directiva dependen de este proyecto faraónico. El sector de la construcción expuso su sorpresa ante la elección de la constructora turca Limak Construction, sin experiencia en campos de fútbol de primer nivel, pero ahora también lo avisa Kroll Bond Rating Agency sobre la nota de la deuda del club blaugrana en un informe de 19 páginas al que ha tenido acceso MERCA2.
El plan de Laporta debería finalizar en verano de 2026 por un importe máximo de 900 millones de euros, un precio que las fuentes del sector consultadas consideran insuficientes ante el elevado coste del material y del encarecimiento de la mano de obra ante la falta de personal cualificado.
La calidad crediticia del contratista no es suficiente para respaldar las calificaciones
El precio ofrecido por Limak roza «lo temerario», según las fuentes del sector consultadas, pero no hubo un solo ‘pero’ en la Junta directiva del club, de la que se asentó el responsable de Espai Barça. El presidente del Barça descartó las ofertas, más caras de Acciona y FCC, debido al precio; y además, blindó una serie de sanciones a la compañía otomana en caso de incumplimiento en los plazos.
De hecho, la agencia de calificación de la nueva deuda del FC Barcelona, Kroll Bond Rating Agency, ha otorgado una nota de BBB+ a la totalidad de los 1.500 millones emitidos por el club para hacer frente a este complejo. Se trata de un grado de inversión de aprobado, pero con riesgos significativos.
EL BARCELONA DE LAPORTA, A EXPENSAS DE UNA FINALIZACIÓN EXITOSA
Según el informe, «la capacidad del club para generar ingresos adicionales depende de la finalización exitosa de los trabajos de remodelación». En este sentido, considera que los retrasos serán como mínimo de un año, aunque también ha analizado el escenario adverso en caso de que la obra se demore 24 meses. Para Kroll Bond, Limak lidera un «experimentado equipo», pese a carecer de experiencia en este tipo de obras.
El retraso de las obras será de al menos un año, según Kroll Bond, si bien John Lang Lasalle, asesor técnico en el proyecto, Limak entregará las llaves en el plazo previsto. «Es tiempo suficiente», ha sostenido la consultora, que también justifica el montante abonado a la constructora. Con todo y a juicio de Kroll Bond, la «calidad crediticia del contratista no es suficiente para respaldar las calificaciones. De hecho, en el escenario más adverso considera que el club tendría suficiente liquidez para «poder cambiar» a Limak en caso de que entre en «insolvencia». De hecho, la emisión de los 1.500 millones de euros de deuda contempla un coste de entre 180 y 232 millones en caso de materializarse esta situación.
EL BARCELONA RESERVA 180 M€ PARA CAMBIAR A LIMAK
Según los cálculos y estimaciones de la agencia de rating, el FC Barcelona jugará al menos durante la próxima temporada en el Estadio Olímpico de Montjuïc, con la «opción de jugar una segunda temporada completa allí». Asimismo, una vez que el club vuelva a la competición en el Camp Nou tan sólo habrá 50.000 asientos disponibles, de los que 1.000 serán VIP. El plan inicial estima que los blaugranas podrán jugar en un estadio aún en obras para la temporada 2024-2025.
De esta forma, el Barça podría tener que jugar en su 125 aniversario fuera del estadio actual. El principal reto pasa para que todo el puzzle se arme sin contratiempo alguno, un escenario muy optimista dada la magnitud de la obra.
De hecho, la cúpula del club ha reservado 247 millones para hacer frente a las contingencias, un montante incluido en las tres emisiones de 500 millones de euros y que supone el 16,5% del total. Este fondo cubrirá elementos no esenciales o bien los costes de la obra principal. Además, Kroll ha minimizado el riesgo en caso de un cambio de Gobierno municipal tanto en L’Hospitalet como en Barcelona.
EL FC BARCELONA, SIN MARGEN DE ERROR EN EL ESPAI BARÇA
La entidad ha defendido desde el inicio la designación de Limak al considerar que se ha ajustado al pliego de condiciones, modificado poco antes de la licitación y que exigía inicialmente que la constructora tuviera experiencia en campos de fútbol de primer orden, un requisito borrado en la última licitación. ¿El motivo? Oficialmente el club guarda silencio al respecto y se remite únicamente a las comunicaciones oficiales, de las que considera ya ha dado suficientes explicaciones.
En el escenario más adverso, los costes del club subirán en 52 millones de euros, hasta los 654,2 millones frente a los 602,2 estimados en el escenario más benévolo. Por otro lado y una vez, terminadas las obras, se espera que la taquilla genere unos ingresos de 73,85 millones, el 21% del total; mientras que los socios aportarían 50,23 millones, el 14%.
Las visitas turísticas supondrían el 23% de los ingresos, con 79,7 millones; mientras el párking y comida generaría el 5%, hasta los 18,89 millones. Los ingresos totales alcanzarían los 222 millones. El Espai Barça, por su parte, daría entrada a otros 123,82 millones, entre hoteles, derechos y publicidad.
LAPORTA ESPERA DISPARAR LOS INGRESOS CON EL ESPAI BARÇA
En total, el club contaría sólo con este nuevo proyecto con 346,59 millones de euros. Para Legends Advises, estas cifras son factibles al estar en línea con otras remodelaciones, como las del PSG y Tottenham, que incrementaron los ingresos entre un 400% y un 113%, respectivamente. En el caso del Arsenal, el aumento fue del 77%, especialmente por los hoteles. En el caso del Atlético de Madrid, el incremento de los ingresos fue del 44%.
Con todo, el FC Barcelona no tiene margen de error al depositar e hipotecar el club a cambio de convertirlo en uno de los principales referentes a nivel mundial. El Camp Nou compite actualmente con la Sagrada Familia por ser el monumento más visitado de Cataluña. Con la nueva remodelación, el FC Barcelona espera vender las entradas entre los 45 y los 70 euros para el público en general, con precios más elevados en las mejores zonas -entre 95 y 130 euros cuesta una tribuna-.