En relación a las supuestas dificultades de los clientes para devolver recibos propios de Caixabank, el banco ha precisado a MERCA2 que «la entidad cumple la ley y que no impide que los clientes los devuelvan». «La entidad no ha tomado ninguna decisión nueva sobre esta cuestión ni ha introducido ningún cambio en los contratos de sus productos relacionado con ello. Se trata de una cuestión que aparece en el contrato de cada producto», dijeron.
LA NORMATIVA
El banco apunta que CaixaBank cumple estrictamente con la normativa de servicios de pago (PSD2) con independencia de quien sea el emisor del recibo (una filial o un tercero ajeno al grupo). «No es cierto que haya diferencias entre los cargos en cuenta y los recibos. Es lo mismo para el cliente. El derecho de revocación permite al cliente ordenar a CaixaBank que no atienda el recibo antes de la fecha de cobro: sabe con antelación cuándo se hará el cobro, el recibo ni se llegará a cargar en su cuenta», dijeron fuentes oficiales de la entidad. «Si al cliente se le pasa la fecha de revocación, no tendrá problemas en obtener la cancelación del seguro en un plazo razonable», apuntaron desde la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri.
¿QUÉ RECIBOS PUEDEN DEVOLVERSE?
Toda persona tiene el derecho de devolver cualquier recibo, esté domiciliado o no, salvo los de pagos de préstamos o comisiones, a no ser que la entidad bancaria haya cometido un error.
En el caso de que quieras devolver un recibo domiciliado tienes un plazo de 8 semanas (50 días) desde que se hace el cargo. Para los recibos no autorizados, el plazo de reclamación aumenta hasta 13 meses desde el momento en el que la empresa cobra la cantidad.
En el caso de que quieras devolver un recibo domiciliado tienes un plazo de 8 semanas (50 días) desde que se hace el cargo.
En un plazo de 10 de días laborales el cliente recibe el reembolso total de esa factura.
Cuando devolvemos un recibo pueden darse dos situaciones:
- Que el banco reembolse la cantidad pagada en la factura.
- Que la entidad bancaria rechace la devolución del recibo y obligue a seguir el proceso por trámites judiciales o extrajudiciales.
LAS CONSECUENCIAS
Al no realizar el pago de la factura, la empresa puede incluirte en la listas de RAI o ASNEF. Se tratan de listados de morosos. Puede traer consecuencias negativas, ya que al formar parte de ese registro se nos puede restringir el acceso a un préstamo o hipoteca. También se puede dar la circunstancia de que empresas que proporcionan algún servicio corten el suministro, como agua o electricidad.
la empresa solo incluirá tu nombre en la lista ASNEF si la devolución del recibo no es justificada
Sin embargo, la empresa solo incluirá tu nombre en la lista ASNEF si la devolución del recibo no es justificada o si sigues disfrutando de los servicios que la compañía provee, y esta puede demostrarlo aunque los recibos se devuelvan. Para no acabar en la lista de morosos, el usuario tendrá que justificar a la empresa por qué ha devuelto el recibo. Esto puede ser por que el importe no era el exacto o la cantidad a pagar es mayor de lo esperado. En otros casos puede recibirse una demanda por impago.
EL CONTROL
Para evitar uno de estos sustos es muy importante controlar los pagos que hacemos mes a mes. En caso de que nos demos de baja de una empresa cuyas facturas hemos domiciliado, debemos informar a la entidad bancaria de ello y comunicar que ya no hay que pagar esos recibos.
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