La increíble revalorización de Ferrari (suma un 45% en el año y casi un 200% desde que salió a bolsa en 2015) está dejando en muy mal lugar a la práctica totalidad de los gestores españoles de fondos, que no han sabido leer el potencial de la icónica marca, mientras mantienen invertidos cientos de millones de euros en otros fabricantes (Renault, Daimler y Volkswagen, principalmente) cuyo desempeño en bolsa, en alguno de los casos, ha sido muy decepcionante.
Pese a que muchos españoles no tienen conciencia de ello, una parte importante de sus ahorros está ligado a la evolución del sector de la automoción europeo, y es que dado su gigantesco tamaño (con algunas de las firmas más grandes del mundo) atrae cientos de millones de los instrumentos de ahorro españoles. Así, hasta el 30 de marzo de 2019, los fondos patrios mantenían invertidos en los siete principales fabricantes del continente 738 millones de euros, un par de trimestres antes la cifra se acercaba a los 1.000 millones, de los cuales una parte importante está ofreciendo rentabilidades negativas o muy por debajo de la media del mercado.
La principal razón de lo anterior, es que los máximos dirigentes de cada producto de inversión, sus gestores (algunos de los cuales son seguidos como auténticos gurús), no se han atrevido a apostar por la firma del Cavallino rampante cuya rentabilidad, en el mejor de los casos, ya multiplica por tres a la segunda mejor firma, Daimler. De hecho, Ferrari pese a que se revaloriza en el año un 45% y se acerca desbocado, ya supera los 126 euros por título, a sus máximos históricos, que conquistó en junio del año pasado al superar los 127,5 euros, apenas registra en su capital social (la capitalización se acerca a los 24.000 millones) 1,62 millones de euros, lo que supone tan solo el 0,22% de toda la inversión realizada por los fondos en los fabricantes europeos.
Curiosamente, la firma en la que más han confiado los profesionales españoles es la que peor lo está haciendo en lo que va de año, Renault. La compañía francesa suma hasta 343,16 millones de los 738 millones totales, prácticamente la mitad. Una inversión que sin embargo no está recogiendo los frutos deseados, ya que su desempeño en lo que va de año es del -3,9% y en los últimos meses firma un descalabro superior al 30%.
Entre los gurús españoles que más fuerte han apostado por la firma francesa, que estuvo (y esta) envuelta en problemas legales por pagos a su antiguo presidente, se encuentra el histórico Francisco García Paramés con la mayor participación de todos (un 5,91% de su Cobas Grandes Compañías, un 4,12% de su Cobas Internacional y hasta un 3,71% de su Cobas Selección), también Iván Martín, ex Santander AM, Aviva AM y Sabadell Gestión, atesora la segunda mayor participación (con un 5,11% de su Magallanes European Equity). Aunque hay muchos más, hasta un total de 176, como Merch-Oportunidades, Solventis, Caixabank Bolsa o Tressis Cartera Eco30.
En el caso de Daimler, la segunda firma con mayor inversión española, los analistas y gestores si han sabido leer la buena evolución que podría ofrecer la compañía en 2019. En los primeros cinco meses y medio del año, se dispara un 15,55%, lo que supone una fuerte revalorización para los 192,4 millones de euros que están invertidos en la firma. Entre los fondos que más se están beneficiando de la matriz que comercializa la marca Mercedes destacan los bancarios, ya que los cuatro más expuestos son dos de Caixabank (Bolsa Gestión Euro y Bolsa Dividendo Europa) y dos de Ibercaja (Ibercaja Alpha e Ibercaja Dividendo).
Los siguientes en la lista también se sitúan en verde, aunque varias veces por debajo de Ferrari, en concreto Volkswagen se revaloriza un 8,23%, mientras que Peugeot lo hace un 11,56%. Entre ambos, suman una inversión conjunta que supera los 120 millones de euros y cuenta con inversores ilustres como el Santander Small Caps, que está dirigido por una de las consideradas mejores gestoras de España, Lola Solana, entre otros.
Por último, entre las firmas con un volumen de inversión importante, también en negativo (-3,7% para los 76,1 millones españoles colocados en el fabricante) se situaría BMW, cuya cotización ha caído con fuerza en los últimos meses después de anunciar un profit warning a finales de mayo. La firma germana explicó al mercado que los beneficios antes de impuestos del grupo se desplomarán cerca de un 10% a lo largo de este año, y, además, anunció un plan de ahorro de costes para poder compensar la fuerte inversión que desarrollará en tecnologías.
Finalmente, entre las firmas del sector con una inversión residual no solo se sitúa Ferrari, sino también la propia Fiat Crhysler, que posee una participación importante en la compañía con residencia en Maranello. Incluso para más inri, compañías como Tesla (que ha caído a mínimos de hace dos años), la propia Cie Automotive, Gestamp, Continental o Michelin registran una inversión española bastante mayor que Ferrari.