sábado, 23 noviembre 2024

Wallbox recortará en servicios centrales en España, pero mantendrá la producción

Wallbox coge el toro por los cuernos ante el empeoramiento de las entregas de vehículos. El fabricante de cargadores eléctricos y soluciones tecnológicas para optimizar la gestión energética acomete «medidas dolorosas» a la plantilla ante los severos retrasos en la industria del automóvil, pero mantiene todos los objetivos fijados antes de la salida a Bolsa, como alcanzar los 1.000 millones de euros en ventas.

Wallbox presenta un potencial de subida de entre el 175% y más del 300%, según el consenso de Bloomberg

Para lograrlo, la compañía dirigida por Enric Asunción ha dado a conocer un plan de recortes que afecta al 15% de la masa salarial en una plantilla que cuenta con más de 1.200 personas. Para aplicarlo, Wallbox iniciará la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) el próximo 6 de febrero, según han indicado fuentes de la compañía cotizada en Wall Street.

«La reducción de personal dependerá de qué tipo de salarios se verán afectado», han apuntado. La horquilla es amplia en este sentido y todo dependerá de la conclusión de estas negociaciones.

El plan de recortes afectarán especialmente a España, si bien el equipo de Asunción protegerá la capacidad productiva en el país. De hecho, la compañía mantiene el objetivo de mantener una capacidad de producción del millón de cargadores. «La compañía está convencida de que se necesitará en un futuro próximo», han afirmado las mismas fuentes.

WALLBOX AHORRARÁ 50 M€ CON EL AJUSTE

Estos recortes supondrán un ahorro de unos 50 millones de euros en este 2023, el equivalente al 71% de la inversión realizada en la nueva fábrica de Texas. La compañía dispone de 70 millones de euros entre efectivo y disponibilidad en líneas de capital circulante, incluyendo la reciente ampliación de capital de 42 millones, a la que acudieron Asunción e Iberdrola, en condición de socio estratégico, entre otros. En este montante, también se han incluido las pólizas de crédito por valor de 28 millones que ha cerrado con las entidades financieras.

Enric Asunción, CEO y fundador de Wallbox
Enric Asunción, CEO y fundador de Wallbox

«Se espera que estas acciones brinden la agilidad necesaria para navegar en el mercado actual y fortalecer aún más su balance general», ha sostenido la compañía en su comunicado ante el regulador bursátil de Wall Street (SEC, por sus siglas en inglés). Estas líneas de financiación permitirán mantener el compromiso con el crecimiento a largo plazo. En este sentido, Asunción espera «adelantar un año antes su objetivo de rentabilidad».

En Wallbox no se han adoptado las decisiones a la ligera y afirman que el objetivo ahora es «minimizar» al máximo posible el impacto a todas las personas afectadas, a los que ha agradecido su contribución en la compañía.

WALLBOX APUNTA A LOS RETRASOS EN LAS ENTREGAS

«Invertimos mucho en capacidad de fabricación e innovación de productos en 2022, lo que mejora nuestra posición competitiva a largo plazo y nos prepara bien para un crecimiento continuo», ha afirmado Asunción, quien recalca que la interrupción del suministro en las cadenas globales de producción han afectado a las entregas de vehículos eléctricos. Por este motivo, se realinea su estructura de costes para adaptarse a la actual demanda, golpeada también por la subida de los tipos de interés y la inflación galopante.

Esta decisión se ha tomado en un mercado convulso, donde los principales índices de Wall Street muestran un movimiento errático o fuertes caídas, con una volatilidad muy presente. En el caso de Wallbox, las caídas fueron del 4% en la jornada en la que anunció este plan. No obstante, los inversores han mostrado su confianza en el último mes, con un ascenso del 35%. A cierre del viernes, las subidas en Wallbox superaban el 7,5%, hasta alcanzar los 4,69 dólares y borraba la jornada negra precedente.

La compañía, pese a estos baches que se están sucediendo en todo el sector tecnológico, tiene un fuerte respaldo de los analistas que siguen al valor. Todos y cada uno de los expertos tienen claro su consejo de «compra» o «sobrecompra», con un precio objetivo de 12 dólares por acción. Así, el potencial mostrado por la compañía con sede en Barcelona alcanza el 175%, uno de los más elevados de toda la Bolsa.

ESPALDARAZO DE LOS ANALISITAS A WALLBOX

Las recientes recomendaciones de Cowen, Canaccord Genuity y Baird, emitidas esta misma semana, apuntan a «sobrecompra», con precios objetivos entre los 12 y 14 dólares, un potencial que muestra una revalorización de entre ese 175% y el 220%.

Otro expertos ofrecen un precio mínimo de 10 dólares por acción. Stifel considera como precio objetivo los 20 dólares, un 350% por encima del precio de cierre de este jueves. Barclays y Baird ajustan esta subida al 220%, hasta los 14 dólares. Northland Securities, por su parte, apunta a una revalorización del 266%, hasta los 16 dólares.

De hecho, el mercado ha podido registrar una sobrerreacción a la baja, ya que las estimaciones de ventas y beneficio se dispararán de cara al 2024 tras un año de transición. Se espera que en 2025, Wallbox registre sus primeros números verdes, con 75 millones de euros, y aminorará los números rojos de 2022 en 2023 y 2024 de forma significativa, según las previsiones de Bloomberg.

En cuanto a la facturación, Wallbox está en condiciones de duplicar con creces las ventas en este 2023, hasta alcanzar los 320 millones de euros, y alcanzará los 600 millones en 2024, año en el que registrará un ebitda de más de 21 millones de euros.


- Publicidad -