Los intereses de las deudas con Hacienda se incrementan hasta el 4,06%. Así lo estipulan los nuevos Presupuestos ante la elevada inflación. El Ejecutivo se ha negado a realizar medidas de relajación a los deudores mientras ha emplazado a la banca a adoptar de forma voluntaria medidas para aliviar la carga de las agresivas subidas de tipos de interés a los hipotecados, aunque no para todos.
Todo tras negarse a deflactar los tramos de los impuestos, una estrategia que ha disparado la recaudación fiscal a máximos históricos. Pero Hacienda quiere más, en concreto el 25% más por los intereses de demora.
Los ingresos por intereses de demora no se declaran en el IRPF
El Gobierno presionó a la banca para adoptar medidas de «buenas prácticasa» en un momento de máxima tensión por el alza de los precios y de los tipos de interés, actualmente fijados en el 2,5% por el Banco Central Europeo, mientras el Euríbor, el índice más utilizado para el cálculo de los intereses de las hipotecas, ha escalado por encima del 3%.
HACIENDA, SIN PIEDAD FRENTE A SUS DEUDORES
Ante estas subidas, el Gobierno daba una falsa red de seguridad, más cuando los tipos continuarán subiendo y se espera que lleguen al 4% durante este próximo 2023. La medida es un escudo para las familias vulnerables, aquellas que ganan menos de 27.000 euros, según el último paquete de medidas aprobado este martes.
Para estos hipotecados, las entidades financieras aplican una carencia de capital de cinco años. En ese lustro sólo se abonarán intereses, con un euríbor -0,1%, mientras se les alarga el plazo a los 40 años.
El Ejecutivo, a través del Tesoro, ha establecido un tipo legal del dinero del 3,25%, un 8,3% más respecto a los Presupuestos anteriores. De la misma forma, el tipo de interés de demora pasa del 3,75% al actual 4,06%. Todo ello, para elevar los tipos de interés en España a la misma altura que los tipos del BCE. Este tipo de interés también lo abonará Hacienda o la Seguridad Social en caso de haber cobrado de más de forma indebida.
No obstante, Hacienda tiene un mayor plazo a la hora de realizar las devoluciones de impuestos. No obstante, estos ingresos no se declaran en el IRPF en el caso de los autónomos, tal y como estableció el Tribunal Supremo, abriendo así la puerta a una avalancha de reclamaciones.
EL TESORO SE DESVINCULA DE LOS TIPOS DE INTERÉS
El Gobierno de España ha vinculado estos intereses a la evolución de la rentabilidad de la deuda pública, pero no se ha realizado en la práctica. Así, mientras los tipos de interés se han situado en el terreno negativo, con un euríbor también en negativo, el Tesoro ha registrado un tipo de interés legal del 3% y el de demora en el 3,75%. Es decir, un nivel muy elevado y sin correlación alguna con los tipos oficiales marcados por el BCE.
En los últimos seis años, el tipos de interés se ha situado en el 3,75%, tras situarse anteriormente en el 4,375%, un nivel que podría volver a tocar si el BCE mantiene su agresiva política monetaria. Por el momento, el organismo europeo, presidido por Christine Lagarde, ha pasado del 0% al 2,5% en apenas cinco meses. Todo ello, por una inflación galopante provocada por la parte de la oferta en Europa. La advertencia de Lagarde de cara a los próximos meses es muy clara: «Habrá nuevas subidas, aunque sin que se discuta aún la cuantía». Y es que, pocos economistas creen que habrá una moderación de los precios el próximo año.
Con esta agresividad, el euríbor ha pasado del terreno negativo que aún registraba en marzo de este año a dispararse a una tasa del 3%. De hecho, la media mensual en este mes de diciembre ya ronda este nivel. Sin embargo, está aún lejos de los registrados en la crisis de 2008 y hasta marzo de 2009, en el 7%. A partir de entonces registraron caídas significativas, al 5% desde abril de 2009 hasta 2014. Del 4,375% en 2015 y del 3,75% desde 2016 hasta este 2022, según las tablas oficiales del Banco de España. En 1995, esta tasa era del 11% ante la quiebra de la Seguridad Social que dejó el último gobierno de Felipe González.
LOS INTERESES DE DEMORA, EL CASTIGO PARA HACIENDA
Los intereses de demora dan dos de cal a Hacienda. En concreto, el pasado ejercicio pagó un total de 278 millones de euros por este concepto, pero este año la cifra será muy superior debido a una reciente sentencia favorable a Telefónica, que ingresará más de 526 millones libres de impuestos tras ganar un pleito a la Agencia Tributaria.
Tras las sentencias de la Audiencia Nacional y del Supremo, la Agencia Tributaria tuvo que pagar 1.316 millones de euros por un contencioso sobre el Impuesto de Sociedades entre 2008 y 2011. El organismo, con María Jesús Montero, como máxima responsable, abonará el 40% por los intereses.
La Agencia Tributaria continuó pleiteando hasta este verano, con un recurso, pero fue inadmitido por el Supremo. Todo por los criterios de utilización de bases imponibles negativas y deducciones mantenidos por la operadora. No obstante, algunos contribuyentes, como el conocido Rubius, un youtuber afincado en Andorra, ha tenido una sentencia contraria contra la Agencia Tributaria, aunque los intereses de demora son una ínfima parte de los que pagados por el ente público a Telefónica.